La Bolsa argentina cedió con cifras marginales este lunes por recomposiciones de carteras de fin de año, en un marco reducido y selectivo de operaciones en general.
El índice líder S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires perdió 0,3%, apenas debajo de las 85.000 unidades, tras acumular una mejora del 1,9% en pesos durante la semana previa.
Las lentas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por una millonaria deuda y las escasas reservas del Banco Central son los temas que mantienen en vilo a los inversores, coinciden analistas.
“Sin dudas que el pago al FMI realizado la semana pasada constituyó una buena señal de que el Gobierno busca acordar. Sin embargo, tras el pago las reservas netas líquidas (el concepto más estricto que toma el mercado) cayeron a terreno negativo estando en casi 1.000 millones de dólares”, dijo a Reuters el economista Roberto Geretto, de Fundcorp.
Los bonos Globales -en dólares con ley extranjera- eran negociados con ganancias promedio de 1% a las 17 horas, tendencia que se reflejaba en el riesgo país de JP Morgan -que mide la brecha de tasas de retorno de los bonos del Tesoro de los EEUU con similares emisiones emergentes- con baja de 20 enteros para la Argentina, a 1.742 puntos básicos.
Los mercados de monedas, acciones, bonos y granos argentinos permanecerán cerrados el viernes, por ser víspera de la celebración del Año Nuevo.
“Acompañando esta vez el mejor clima del norte, los activos domésticos exhiben una recuperación más allá de que se mantiene vigente el tono de cautela y expectativa que despiertan las negociaciones con el FMI, que se reanudaría a comienzos del año próximo”, evaluó el economista Gustavo Ber.
“Ello se debe a que dicho acuerdo se convierte en el principal driver, aún cuando los inversores reconocen que deberá incluir una sólida ‘hoja de ruta’ económica que permita corregir los desequilibrios económicos para aspirar a mejorar las expectativas de los agentes. Caso contrario, o de que no se cuente con suficiente respaldo político desde el oficialismo y la oposición, se corre el riesgo de que sólo sirva para prorrogar vencimientos pero no para encarar un programa económico integral que logre revertir el circulo vicioso”, acotó el titular del Estudio Ber.
El mercado espera señales locales firmes tras el rechazo parlamentario al proyecto del ley de Presupuesto 2022 y un demorado plan económico “plurianual”, en medio de presiones cambiarias, falta de reservas del Banco Central (BCRA), alta inflación y un fuerte déficit fiscal.
Los expertos de Research for Traders aportaron que “los bonos en dólares manifestaron caídas la semana pasada, días después de haberse rechazado el Presupuesto 2022 en la Cámara de Diputados, y en un contexto en el que los inversores se mantienen atentos a las demoradas negociaciones entre Argentina y el FMI”.
“El Presidente prorrogará el Presupuesto vigente y administrar los recursos de modo que el 2022 sea otro año de recuperación, con más capital público, educación, salud y conocimiento. Se estima que lo haga esta semana, y en los primeros meses de 2022 se tendrá que definir si hay un nuevo proyecto para consensuar en el Congreso nuevamente”, subrayaron desde Research for Traders.
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