La Argentina quedó bajo fuego cruzado. A sus propios desequilibrios, se le agregó el derrumbe de los mercados chilenos por el triunfo del candidato de la izquierda, Gabriel Boric, y la crisis de Estados Unidos por el avance de la nueva variante del covid, la posibilidad de que no se apruebe una ley que contempla subsidios por USD 175.000 millones y la posible suba de tasas en el futuro cercano por parte de la Reserva Federal. Esa conjunción de factores hizo que caigan las acciones y bonos de la deuda y, además, que suba el dólar.
En la plaza marginal, el dólar libre o “blue” subió 50 centavos a mitad de la rueda, pero después retrocedió al valor del viernes porque le faltó fuerza a la demanda. Los dólares financieros recuperaron terreno y cerraron por encima del precio del “blue”. Nuevamente, el mercado blanco superó al marginal.
En el mercado del AL30D, el bono que utiliza el Banco Central para intervenir, aunque hace tiempo dejó de entorpecer estas operaciones para no despilfarrar reservas, el dólar MEP subió $1 a $200,41. Contra el GD30, donde opera con libertad el contado con liquidación, el dólar cotizó a $206,75 (+$1,25).
El dólar mayorista mantuvo su ritmo devaluatorio y subió 16 centavos a $102,14. En esta oportunidad el Banco Central compró USD 5 millones y las reservas bajaron 11 millones a USD 41.106 millones.
En el mercado de futuros se tensó la apuesta a la devaluación. Si bien, fin de mes bajó 0,10% a 102,93, fin de enero subió 0,11% a $ 107,56 y febrero, donde los inversores creen que el Gobierno no resistirá, los precios crecieron 0,34% a $ 111,60. Esto significa que el mercado cree que, en los dos primeros meses del año, el dólar subirá 8,42% y que la devaluación a fin de enero tomando como base el cierre de ayer de $ 102,14, será de 5,30%.
Los bonos de la deuda con legislación extranjera padecieron bajas de hasta 2% acompañando a los títulos de la región influenciados por la salida de fondos del exterior por la crisis de los mercados de Chile. De esta manera, el riesgo país aumentó 48 unidades (+1,6%) a 1.749 puntos básicos.
Los bonos atados al precio del dólar oficial quedaron con leves bajas, pero los que ajustan por el costo de vida, los Boncer, subieron 0,50% promedio en las series 2023 y 2024.
Los inversores no quisieron saber nada con asumir riesgos. La Bolsa operó $ 1.178 millones, un volumen habitual, y el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, perdió 1,59%. Ternium (-4,12%), la cementera Holcim (-3,54%) y Banco Macro (-2,46%) fueron los que más padecieron las ventas en un panel donde hubo solo tres alzas, entre ellas la de Cablevisión (+2,45%) porque la Justicia a través de una medida cautelar rechazó el DNU que incluía al sector como servicio público con precios regulados.
Los ADR’s -certificados de tenencia de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron un escaso monto de negocios. Operaron $ 2.752 millones. En este panel predominaron las bajas. Los certificados que más padecieron el movimiento fueron IRSA (-4,8%), Edenor (-3,8%) y Transportadora Gas del Sur (-3,5%).
La turbulencia que afectó a Estados Unidos y a Chile llega en el peor momento para la Argentina porque es un factor que va a incidir en las negociaciones con el FMI. De hecho, el precio de las materias primas quedará afectado y el de los bonos de la deuda también por la salida de capitales. Los números del presupuesto tal vez deban ser revisados, en particular lo que hacen al pronóstico de ingreso de divisas.
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