El ex ministro de Economía, Domingo Cavallo, pronosticó una inflación del 60% para el próximo año y volvió a proponer una liberación del tipo de cambio para achicar la brecha entre cotizaciones.
Aseguró, además, que “con este gobierno no hay nada bueno que se pueda hacer en materia económica”, al trazar un duro pronóstico, en declaraciones a América 24. Estimó que el año próximo, “en el mejor de los casos la inflación será cercana al 60%, si el gobierno hace las cosas mínimamente bien”.
Consultado acerca de la conveniencia de la figura de un “superministro” para manejar la gestión económica y de la posibilidad de incorporarla a la administración de Alberto Fernández, Cavallo consideró que existe un único funcionario dentro del Gobierno capaz de ocupar ese rol, el embajador Guillermo Nielsen.
“Por las ideas y la concepción que tiene de la economía, el único que yo veo para un lugar así es a (Guillermo) Nielsen, no veo a ningún otro. Pero no lo van a llamar, si hasta lo han sacado de la presidencia de YPF y lo mandaron de embajador a Arabia Saudita”, dijo Cavallo.
“Con este gobierno no hay nada bueno que se pueda hacer en materia económica” (Cavallo)
“Ese superministro tiene que cambiar el enfoque general de la economía del Presidente y sobre todo de las ideas de Cristina Kirchner y sus adláteres. Tiene que ser alguien de gran personalidad, que tenga un plan y consiga los apoyos para tomar las decisiones”, agregó.
El impulsor de la convertibilidad en el gobierno de Carlos Menem advirtió que la situación puede empeorar el año siguiente por la regulación de los diversos tipos de cambio que funcionan en el mercado argentino. Cavallo aconsejó incluso aplicar una desregulación cambiaria.
“Debería haber una liberalización cambiaria, para que la brecha no sea tan alta”, señaló y advirtió que “la política monetaria debe ser razonable”. El economista consideró que la Casa Rosada tiene que “como mínimo llevar al tipo de cambio al ritmo de la inflación, de entre 3% y 4%”. El dólar oficial, durante este año, avanzó a un ritmo del 1% mensual, muy por debajo del costo de vida.
Cavallo rechazó la posibilidad de una devaluación porque “le agregaría puntos” a la inflación e impactaría en los salarios y tarifas. “Como los costos están atados al dólar, habría que pagar más subsidios o pegar un tarifazo de mayor envergadura”, advirtió.
“Ese superministro tiene que cambiar el enfoque general de la economía del Presidente y sobre todo de las ideas de Cristina Kirchner y sus adláteres. Tiene que ser alguien de gran personalidad, que tenga un plan y consiga los apoyos para tomar las decisiones” (Cavallo)
Sostuvo que el gobierno “debe dejar de intervenir en los mercados” y que “hay que abrirse al mundo, en lugar de cerrarse y negociar solo con los amigos, hay que cambiar la política comercial externa”. “Esto lo puede hacer un gobierno con ideas claras y un equipo que tenga las capacidades para hacer las reformas. Este gobierno debe dejar de hacer daño”, señaló.
Criticó, además, al ministro de Economía, Martín Guzmán, al señalar que “no tiene apoyo político, no tiene equipo y nadie lo escucha”. “Es un gobierno disfuncional que no está en condiciones de resolver problemas como la inflación y debe dejar de controlar precios”, sostuvo en declaraciones televisivas.
Al proponer un desdoblamiento cambiario, Cavallo dijo que la Argentina “tiene solución, se puede lograr un efecto como el que logramos en 1991. Hoy se podrían implementar las medidas y mejor que en los ´90″. Recomendó, además, ajustar las tarifas “antes de la corrección cambiaria, porque si no, terminarán en una especie de Rodrigazo”