Desde este mes, las autoridades nacionales permiten el ingreso a la Argentina de visitantes de cualquier parte del mundo, un mes atrás, desde el 1º de octubre las fronteras se habían reabierto para la llegada de turistas únicamente de países limítrofes.
A los turistas que lleguen al país les espera una Argentina que necesita divisas extranjeras y una industria turística severamente golpeada por la crisis sanitaria que azotó al mundo en 2020 y que todavía no termina. Con las fronteras internacionales reabiertas, el desafío será el de atraer la mayor cantidad de visitantes a un país que le queda lejos al resto del mundo.
Una de las medidas para incentivar a los turistas extranjeros es la creación de las “Cajas de Ahorro para Turistas” que anunció el Banco Central de la República Argentina (BCRA) días atrás. El incentivo ofrece a los viajeros del exterior la posibilidad de abrir una cuenta bancaria de forma remota con un saldo tope de 5.000 dólares.
“Los turistas extranjeros que visiten Argentina podrán abrir una caja de ahorro bimonetaria y acceder a los servicios financieros y medios electrónicos de pago, con los beneficios inherentes en transparencia y seguridad, en la medida que tengan una cuenta bancaria en su país de origen que será la única habilitada para transferir divisas a la cuenta local”, señaló el BCRA en un comunicado que emitió días atrás.
Por su parte, Matías Lammens, ministro de Turismo y Deportes, dijo a este medio que se espera recibir entre 150.000 y 200.000 turistas sólo durante los meses de noviembre y diciembre. “Esto significaría una inyección de 50 millones de dólares para el país, que nos van a permitir apuntalar esta reactivación que ya comenzó”, expresó el ministro.
Lammens cree que el turismo internacional se va a “resetear” en la pos-pandemia, y que en esta nueva configuración el país tiene una gran oportunidad para preparar “un plan agresivo de incentivos para atraer a los turistas de la región en lo que resta de este año y durante todo el próximo, teniendo en cuenta que los países limítrofes representan el 65% del turismo receptivo que históricamente llega a la Argentina.”
La provincia más austral del mundo espera el arribo de los turistas brasileños
Una de las provincias que apuesta a la llegada de turistas regionales, especialmente provenientes de Brasil, es Tierra del Fuego, tal como expresó Dante Querciali, presidente del Instituto Fueguino de Turismo (Infuetur). La tierra más austral del mundo cerró una temporada de invierno récord, gracias a las buenas nevadas y a una oportuna flexibilización de las restricciones sanitarias para los viajes locales; hoy, con las fronteras internacionales abiertas apuesta a la llegada de vacacionantes brasileños, especialmente a partir de enero, otra buena parte de chilenos y un buen flujo de visitantes estadounidenses que lleguen en busca de expediciones polares.
“La recuperación internacional va a ser lenta, prevemos que primero llegarán turistas de la región, especialmente desde Brasil, y luego habrá una llegada de turistas estadounidenses -en primer lugar-, canadienses, australianos y de otras nacionalidades atraídos por el turismo antártico”, señaló Querciali.
Tierra del Fuego espera recibir un total de 220 recaladas de cruceros antárticos en el Puerto de Ushuaia durante toda la temporada de verano, con un promedio 175 pasajeros en cada uno, estamos hablando de aproximadamente 38.500 turistas que conocerán el “continente blanco” partiendo desde tierras argentinas.
Querciali prevé que recibirán aproximadamente 200 mil turistas durante la temporada de verano, unos 100 mil menos que los valores normales, parte de esta pérdida puede deberse a la ausencia de turistas europeos que luego de la pandemia prefieren el turismo regional y vacacionar dentro de Europa, explicó el presidente de Infuetur.
Una ciudad protocolar
“El desafío que nos dejó la pandemia es el de regenerar el encuentro con el otro”, dijeron fuentes del Ente de Turismo de la Ciudad de Buenos Aires (Entur). “El viajero busca ese encuentro, de la manera menos mediada posible, para generar un vínculo con los locales y sus costumbres”, agregaron.
La gran apuesta de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para lograrlo es la de ser una metrópolis que cumpla estrictamente con todas las seguridades sanitarias. “Queremos que los turistas que lleguen a la Ciudad puedan disfrutarla de forma segura. Es por esto que todos los prestadores están trabajando con protocolos aprobados -comentaron desde el Ente de Turismo de la Ciudad de Buenos Aires (Entur)- los viajeros se encontrarán con una Buenos Aires que ya vacunó a más del 70% de su población con las dos dosis, y con la novedad de que el uso de tapabocas no es obligatorio en espacios abiertos”.
“La oferta cultural y gastronómica de la Ciudad no tiene restricciones de capacidad, para sostener estas condiciones los turistas que arriben deberán hacerlo con esquema de vacunación completo, presentar un test PCR negativo hecho dentro de las 72 horas previas al viaje y contar un seguro médico con cobertura Covid-19″, explicaron.
“Otro de los atractivos es el tipo de cambio favorable para los turistas, que esperemos que sirva para atraer la mayor cantidad de visitantes y así continuar con la recuperación de todo el sector turístico”, concluyeron.
Mendoza apuesta a recuperar su conectividad internacional
“Mendoza está preparada para recibir a los turistas internacionales, ya que fue una de las primeras en activar el turismo interno”, dijo Mariana Juri, ministra de Cultura y Turismo de Mendoza, en diálogo con Infobae. “Seguimos realizado gestiones con diferentes compañías aéreas, con el fin de mejorar la conectividad de nuestra provincia. A partir de la apertura, SKY, Copa y LATAM retomarían sus operaciones directas a nuestra provincia”, agregó Juri.
Actualmente, la provincia tiene 10 vuelos semanales directos entre la ciudad de Mendoza y Chile, Panamá y Brasil; sin embargo, si bien es una de las provincias argentinas con más conexiones internacionales directas, esperan continuar aumentando su cantidad de frecuencias hasta incluso “superar los vuelos con los que contaba la provincia”, según expresaron desde la cartera de la ministra Juri.
“La capacidad estimada con la cantidad de vuelos confirmados a la fecha es de 4900 turistas extranjeros mensuales en vuelos directos. Y se estima que un 5% de los extranjeros que ingresan por Ezeiza realizan conectividad de cabotaje con la provincia de Mendoza, lo que implicaría unos 3700 turistas más en vuelos con conexión vía Buenos Aires, lo que representa aproximadamente unos 8600 turistas extranjeros por mes”, calcularon.
Por el momento, las autoridades de turismo de Mendoza observaron que la mayor cantidad de reservas se hicieron desde Chile, Brasil y Estados Unidos. Una situación similar a la de Ushuaia, que también espera que el puntapié de la recuperación del turismo internacional la den los viajeros regionales, para que luego se sumen los estadounidenses.
Todos las fuentes consultadas ven con buenos ojos el futuro del turismo receptivo en Argentina. La apuesta está hecha en la llegada de los viajeros regionales en primera instancia, para que se sumen a ellos los norteamericanos. De los europeos poco se dijo, por lo que se estima que la recuperación de este mercado será más lenta y habrá que esperar un poco más para volver a recibir grandes flujos de turistas del viejo continente.
Luego de las épocas más crudas de la pandemia, la Argentina se reabrió al mundo y se encuentra con el desafío de volver a posicionarse como un destinos atractivo, pese a estar “alejado” del resto del mundo. Con medidas financieras, un tipo de cambiario favorable para los extranjeros y grandes atractivos a lo largo y ancho del territorio, el país busca volver a levantar a una de sus industrias más importantes, y una de las más golpeadas por la crisis sanitaria que estalló en marzo de 2020.
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