La mayoría de los argentinos considera que su calidad de vida empeoró y 7 de cada 10 están endeudados

Los datos corresponden a una encuesta privada donde se analiza el consumo y la percepción sobre el futuro

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La mayoría de los argentinos —seis de cada 10— siente que su entorno, en general, tiene una peor calidad de vida respecto a un año atrás. Los datos corresponden a la edición de octubre del Monitor Nacional relevado por la consultora Taquion, donde se analiza el consumo y la percepción sobre el futuro a través de una encuesta online entre más de 2.500 personas.

“Las percepciones negativas en torno al acceso a comodidades, salarios, consumo y esparcimiento, entre otros, reflejan un contexto caracterizado por un constante empeoramiento. En adición, la pandemia ha dejado de ser el causante del malestar generalizado, reflejando una cuestión más arraigada y menos coyuntural. Es interesante ver que en los jóvenes dicho malestar se percibe menos, lo que puede atribuirse a que la mayoría ha vivido su vida adulta en un contexto de inestabilidad socioeconómica”, señalaron desde la consultora al analizar los datos.

El empeoramiento de la calidad de vida pasó a ser un aspecto arraigado, una cuestión reiterativa de la cual cada vez menos argentinos están exentos

“El empeoramiento de la calidad de vida pasó a ser un aspecto arraigado, una cuestión reiterativa de la cual cada vez menos argentinos están exentos. Este deterioro genera un efecto derrame y uno de los ejes afectados es el consumo, productor de un círculo vicioso que también afecta a los comercios y sus allegados. Los rezagos de este círculo limitan el acceso a recursos: salarios que no alcanzan, imposibilidad de pago”, señalaron desde Taquion.

Además, en un mes cayó 8 puntos la preocupación por el acceso a oportunidades de desarrollo. “La seguridad, el acceso al trabajo y la alimentación son las problemáticas que aumentan tras una reducción en el acceso a las oportunidades de desarrollo como el principal problema que preocupa a los argentinos”, explicaron. Así, la proyección y el largo plazo pasa a un segundo plano con el crecimiento de necesidades primarias que tienen mayor urgencia: la demanda del día a día.

Los principales resultados de la encuesta:

El 76% de los argentinos compra menos productos que un año atrás

Según el informe, en un marco de empeoramiento de la calidad de vida, los hábitos de consumo se ven impactados. En línea con el “vivir el día a día”, el 44,7% de los encuestados dejó de hacer una compra mensual y solo compra para el día a día. Otros hábito adquiridos en la crisis son buscar ofertas y realizar comparaciones entre lugares y reemplazar primeras marcas de alimentos por otras más económicas.

Una mujer mira el precio de unos aceites en un supermercado en Buenos Aires (Argentina). Fotografía de archivo. EFE/Juan Ignacio Roncoroni
Una mujer mira el precio de unos aceites en un supermercado en Buenos Aires (Argentina). Fotografía de archivo. EFE/Juan Ignacio Roncoroni

Cuatro de cada 10 reemplazaron primeras marcas por otras más económicas

Ante una reducción en el poder adquisitivo, las segundas marcas son una opción frecuente. Según los datos de la encuesta, solo 11,4% de los que optan por este cambio volvería a comprar primeras marcas ante un aumento en su ingreso. “Esto remarca una actitud en la cual el consumidor considera que su racionalidad al elegir ese producto fue correcta dado que satisface igualmente su necesidad y, por ende, vuelve a elegirlo”, señaló el informe.

Siete de cada 10 argentinos tienen algún tipo de deuda.

Las deudas puede ser tomadas como consecuencia de que el salario no alcanza, para adquirir un bien o para abrir un negocio. El 34% posee deudas que equivalen a más del 50% de su sueldo. Las deudas más frecuentes se asocian con la adquisición de alimentos y bebidas, por lo que tienen que ver con la necesidad, el día a día. Además, dos de cada 10 sostienen que no saben cuándo podrán cancelar la deuda.

El 36,1% de los encuestados tiene deudas con bancos por tarjetas de crédito.

La deudas con bancos por tarjetas de crédito compone el porcentaje más elevado de la morosidad. Sin embargo, según los datos de la encuesta, hay un alto porcentaje que se hallan endeudados con entidades no financieras (una entidad por fuera de los bancos o con el círculo de familia y amigos). “Los jóvenes son quienes menos se hallan endeudados con entidades bancarias, lo que despierta el interrogante en torno a si debe a una cuestión de desconfianza, dificultad de acceso o si simplemente prefieren recaer en sus familiares y amigos a la hora de pedir dinero”, indicaron.

El relevamiento de Taquion fue realizado en forma online, a finales de octubre, entre más de 2.500 personas mayores de 16 años con acceso a internet y redes sociales.

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