Rechazo de los principales empresarios del país al control de precios: “Es una medida muy negativa que no resuelve la inflación”

La Asociación Empresaria Argentina aseguró en un comunicado que “la reciente resolución de la Secretaría de Comercio Interior respecto de la fijación de precios máximos es una medida muy negativa”

Jaime Campos, presidente de AEA

La poderosa Asociación Empresaria Argentina, la entidad que nuclea a los principales dueños de empresas del país, emitió un breve comunicado con una fuerte crítica a la medida del Gobierno de controlar de manera unilateral los precios de los alimentos y otros productos. La misma se impuso por una resolución de la secretaría de Comercio Interior a cargo de Roberto Feletti.

“La reciente resolución de la Secretaría de Comercio Interior respecto de la fijación de precios máximos es una medida muy negativa para el funcionamiento habitual de las empresas establecidas en nuestro país”, destacó la asociación empresaria que preside Jaime Campos.

La experiencia de Argentina y mundial es muy elocuente en cuanto a que los congelamientos de precios no resuelven el problema de la inflación. Esta medida, al alterar significativamente la previsibilidad necesaria, desalienta la realización de inversiones productivas y la generación de nuevos empleos por parte del sector privado, que es el actor central del desarrollo económico y social”, agregaron.

Un almuerzo entre el presidente Fernández y los miembros de AEA, en diciembre de 2019

AEA reúne a los accionistas y ejecutivos de las empresas más grandes del país. Entre sus vicepresidentes están Luis Pagani (Arcor), Héctor Magnetto (Clarín), Paolo Rocca (Techint), Cristiano Rattazzi (Fiat), Alfredo Coto (de la cadena homónima de supermercados), Carlos Miguens (Grupo Miguens), José Cartellone (Construcciones Civiles), Sebastián Bagó (Laboratorios Bagó) y Federico Beaun (La Anónima).

Otros miembros son Eduardo Elsztain (IRSA), Marcos Galperin (Mercado Libre), Martín Migoya (Globant), Pablo Roemmers (Roemmers) y Luis Pérez Companc (Grupo Pérez Companc), entre otros.

En mayo de este año, la entidad había criticado al Gobierno por el cierre a la exportación de carne. A través de un comunicado titulado “Exportar es vital para crecer”, aseguraron que “el futuro argentino depende vitalmente de las exportaciones. Sólo exportando más saldremos del estancamiento y nos encaminaremos hacia el desarrollo. Restringir las exportaciones de carne vacuna es una decisión muy negativa que nos aleja de dicho objetivo”, señaló la AEA en su pronunciamiento.

Además, agregaron que las inversiones “requieren de un marco de previsibilidad y respeto a las reglas de juego que generen confianza en el rumbo del país. La decisión de restringir las exportaciones en un sector tan arquetípico como el de la carne lamentablemente no contribuirán al logro de dicho objetivo”.

Las críticas de AEA se sumaron a otras escuchadas en las últimas horas desde el sector empresarial. El titular de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Mario Grinman, anticipó que con la decisión de congelar los precios “va a haber desabastecimiento”.

“La realidad demuestra que las políticas de congelamiento de precios no logran resolver los desequilibrios macroeconómicos que dan origen a la inflación. Adicionalmente, resultan insostenibles ya que afectan el largo plazo para la continuidad productiva” (Daniel Funes de Rioja)

El dirigente empresario dijo sentir frustración e incredulidad luego de que naufragara la posibilidad de un acuerdo y el Gobierno decidiera imponer la medida mediante una resolución de la secretaría de Comercio Interior.

Es como si un eximio personal de la salud insistiera con un medicamento que nunca ha funcionado,” ejemplificó Grinman. “Es muy raro porque los controles de precios nunca funcionaron. En la historia, en el mundo y en la Argentina. Jamás, desde que se comenzaron a implementar. El primero fue en el año 52 y después todos los gobiernos con algunas excepciones, incluyendo el Gobierno de [Mauricio] Macri hace unos años, implementaron controles de precios. Nunca funcionaron, porque es una aspirina que calma el dolor momentáneo de una enfermedad muy difícil, muy compleja, y la enfermedad continúa”, comentó Grinman.

Si eso fuera la solución para controlar la inflación, en lugar de ponerlo por 90 días pónganlo por 4, 5 o 10 años. Pero no funciona”, ironizó el titular de la CAC.

Otra entidad del sector privado que criticó la medida fue la Coordinadora de los Productos de las Industrias Alimentiacias (COPAL), quien llevó adelante la negociación con la secretaría de Comercio Interior. Su presidente, Daniel Funes de Rioja, señaló: “La realidad demuestra que las políticas de congelamiento de precios no logran resolver los desequilibrios macroeconómicos que dan origen a la inflación. Adicionalmente, resultan insostenibles ya que afectan el largo plazo para la continuidad productiva, dado que lleva a las empresas a producir a pérdida por no atender los innumerables aumentos de costos que viene afrontando el sector”.

SEGUIR LEYENDO