El Banco Central siguió interviniendo para controlar al dólar. Esta vez el monto fue acotado porque no tuvo que ser vendedor en la plaza mayorista, donde fue un observador que terminó con saldo neutro.
Por eso las pérdidas se limitaron a los USD 27,8 millones que le costó bajar, utilizando bonos AL30D, al dólar MEP a $173,33, un precio que es 20 centavos superior al del día anterior. El contado con liquidación, que opera montos ínfimos en esta plaza que domina el Banco Central, quedó en $ 173,47 (+29 centavos).
Donde sigue intensa la demanda de contado con liquidación es en el Senebi (Segmento de Negociación Bilateral). Las operaciones a 48 horas dominaron el panorama en esta plaza que no publica los precios en las pantallas y las negociaciones son directas entre el operador y el cliente. Como los instrumentos que se utilizan son diversos, el dólar finaliza en distintos precios. Por caso, cuando lo hicieron contra Letras de Descuento de plazos cortos, cotizó a $ 189 pero cuando se trató de acciones del Banco Galicia, el precio fue de $ 192 y los que eligieron Apple, uno de los instrumentos preferidos, lo pagaron a $ 191,20. En esta plaza, el dólar MEP se negoció a $ 178 y el costo del cable (transformar dólar MEP en contado con liquidación) fue de 6%. Cada vez es más caro colocar dólares en el exterior. El “blue” en tanto se mantuvo en $ 185 para la venta y nada hace esperar un sobresalto.
En la plaza mayorista, la divisa de Estados Unidos aumentó 5 centavos a $ 98,55 pero sin ventas del Banco Central por lo que muchos importadores se quedaron sin adquirir los dólares que necesitaban para pagar sus compras al exterior.
“A este ritmo de intervención van a necesitar suerte para llegar con reservas netas a las elecciones” auguró un operador. “Tienen poco resto y el mercado demanda cada vez más dólares. La falta de pelota de tenis o de repuestos para automóviles en el mercado es la prueba palpable de que comienza a haber desabastecimiento en algunos rubros porque los importadores van a ser la variable de ajuste”, agregó.
El problema de esta estrategia es el efecto dominó porque cuando el mercado ve que en algunos productos hay que acudir a dólares alternativos toman como base el costo del contado con liquidación, el único que se puede girar al exterior. Está en $ 190 y traccionará una inflación mayor.
La buena noticia vino por el lado de los bonos de la deuda con ley extranjera que tuvieron una suba cercana a 1% y lograron que el riesgo país bajara 12 unidades (-0,7%) a 1.602 puntos básicos. Es la primera baja tras cinco ruedas consecutivas de alza.
Pero los que mejor performance tuvieron fueron los Boncer, que ajustan por el costo de vida, que subieron hasta 1,74%. Los bonos fueron eximidos del Impuesto a las Ganancias y Bienes Personales junto a los otros títulos públicos y los plazos fijos UVA. La medida tiene como objeto hacer más atractivas las licitaciones de títulos para renovar los vencimientos en pesos que cada vez tienen menos adeptos y obligan al gobierno a emitir bonos más cortos.
La volatilidad se reflejó en la Bolsa donde se operaron $ 1.194 millones y los precios tuvieron fuertes oscilaciones a lo largo de la rueda. El S&P Merval, el índice de las acciones líderes, a la apertura estaba casi 1% arriba y terminó neutro. Las acciones que más subieron fueron las de Aluar (+3,83%), Grupo Valores (+2,95%) y Cresud (+2,53%. Las caídas que más impactaron en el índice fueron las de la cementera Hargor (-4,39%), Edenor (-3,20%) y Transportadora Gas del Sur (-2,12%).
Los ADR’s -certificados de tenencia de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York- triplicaron a las acciones y operaron $ 3.740 millones. A pesar del mayor movimiento, predominaron las bajas. Los más afectados fueron Edenor (-3,9%) y Transportadora Gas del Sur (-3,7%). Entre las escasas alzas se destacó Despegar (+4,01%) ante la posibilidad de la reapertura de vuelos y retorno del turismo.
Para hoy se espera otra rueda volátil, pero con un dólar que no cede en ninguna de sus variantes. No solo aumenta el dólar financiero, sino que en el mercado de futuros el BCRA tiene que vender en los fines de mes más largos. La brecha de la divisa entre fin de diciembre y fin de enero quedó en 65% anual, a pesar de que la intervención del Banco Central bajó los precios 0,40%, lo que refleja la creencia firme de que habrá devaluación. El dólar a fin de año vale $ 108,35 pero salta a $ 114,59 en enero.
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