Los dos ministros del equipo económico que forman parte del núcleo albertista conservaron sus sillones pasado, por ahora, el terremoto político en el Frente de Todos que forzó a un recambio de gabinete tras las PASO. En su primer día de agenda tras su ratificación en el equipo ministerial, Martín Guzmán y Matías Kulfas continuaron sus agendas entre arengas a la tropa propia y el estudio de los equipos técnicos sobre el impacto que tendrá el paquete de medidas.
Los dos funcionarios se mostraron esta tarde junto a Alberto Fernández en la jura de los nuevos ministros de equipo presidencial. Tanto el ministro de Economía como el Desarrollo Productivo fueron confirmados en sus cargos el viernes por la noche, algo de lo que se enteraron pocas horas antes del anuncio oficial.
Martín Guzmán y Matías Kulfas continuaron sus agendas entre arengas a la tropa propia y el estudio de los equipos técnicos sobre el impacto que tendrá el paquete de medidas
Sus nombres aparecían, junto con el de Santiago Cafiero, como los más apuntados desde la otra orilla del Frente de Todos para empezar un recambio de staff de Gobierno. Guzmán y Kulfas seguirán por el momento en sus puestos y no sufrieron bajas dentro de su equipo.
El ministro de Economía basa su agenda post ratificación en el gabinete en distintas cuestiones. Por un lado, a nivel técnico el Palacio de Hacienda, junto con otros despachos oficiales como el propio Desarrollo Productivo, Trabajo o AFIP, entre otros, estudian cuál será el alcance, implementación y costo fiscal del paquete de medidas que anunciará el Gobierno nacional en las próximas horas como respuesta a la derrota oficialista en las PASO.
Por otro, Guzmán prepara la defensa del proyecto de Presupuesto 2022, que desde el Ministerio de Economía aseguran que aún no tiene fecha determinada, más allá de que desde el oficialismo parlamentario creen que el plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados será convocado para este jueves.
El equipo económico busca despabilar la gestión tras la parálisis de varios días que generó el conflicto interno en la coalición de gobierno. Si bien entienden que el primer efecto del terremoto político ya pasó, en un despacho oficial usan otras metáforas geológicas para graficar el contexto, y creen que el temblor puede guardar, como suele suceder, réplicas menores.
Pero los reflectores no solo se posaron en Economía y en Desarrollo Productivo por la definición de quiénes debían ocupar los sillones principales, sino también porque se explicitó, a cielo abierto, un debate intra Frente de Todos sobre qué dirección debería tomar la política económica. Cristina Kirchner cuestionó abiertamente la política fiscal de Guzmán y reclamó gastar más.
El equipo económico busca despabilar la gestión tras la parálisis de varios días que generó el conflicto interno en la coalición de gobierno
Fuentes ligadas al gabinete económico se defienden: “La economía no es la única razón por la que se perdieron las elecciones”, consideraron. “También hay cuestiones de índole político y de representación”, que explicaron la derrota del oficialismo en las elecciones primarias, argumentan. Y aseguran que el sendero de ejecución presupuestaria y velocidad del gasto público no solo depende del Palacio de Hacienda sino de la gestión propia que hace cada ministerio con sus fondos.
En el equipo económico albertista dicen no sentirse condicionados por el mensaje de la vicepresidenta y repiten como un mantra que “no hubo ajuste en las cuentas públicas”, que es la crítica explícita del sector del Frente de Todos con terminal política en Cristina Kirchner. De todas formas, en los próximos meses aumentará el gasto porque, como suele suceder, el Estado acelera la ejecución de ciertas partidas en el tramo final del año. Eso se sumará al propio paquete de medidas extra que anunciará el Poder Ejecutivo.
Matías Kulfas se enteró de su permanencia en el plantel de ministros pocas horas antes del anuncio oficial. El ministro de Desarrollo Productivo es uno de los dirigentes del albertismo desde su origen y considera que no había, en términos de gestión, argumentos por los cuales desde la otra tribu del oficialismo podrían pedir su puesto. Parte del encono podría explicarse por el libro Los tres kirchnerismos, en el que el economista esbozó críticas a la gestión económica del último mandato de Cristina Fernández de Kirchner.
Este lunes una de las primeras actividades del jefe de la cartera productiva en el ministerio fue juntar a toda su tropa de funcionarios, técnicos y empleados en el noveno piso de Desarrollo Productivo para ensayar un discurso de arenga para lo que viene, en el que enumeró una serie de medidas salidas de ese área del Estado y en lo que fue leído como una suerte de “celebración” por haber mantenido su lugar en el barco de la política económica oficial.
Fuentes ligadas al gabinete económico se defienden y aseguran que la economía no es la única razón por la que e oficialismo perdió las elecciones
Quedó en la cartera industrial, de todas formas, una sensación de extrañeza superado por el momento el tembladeral político. Una de las funcionarias principales del ministerio, la secretaria de Comercio Interior Paula Español, fue una de las dirigentes que el miércoles por la tarde pusieron su renuncia a disposición como parte del operativo que desplegó el kirchnerismo en el gabinete para forzar los cambios.
La mayoría de esas amenazas de renuncia no se concretó y, según aseguran en el Ministerio de Desarrollo Productivo, Español también continuará en su puesto, en el que tiene bajo su órbita la implementación y supervisión de los distintos programas de control de precios.
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