El Gobierno adelantó la convocatoria a gremios y empresas para el Consejo del Salario Mínimo

El Gobierno decidió adelantar al martes próximo la reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil que integran gremios y empresarios. La sesión plenaria estaba prevista para el 30 de septiembre, pero fue adelantada como parte de las medidas que busca anunciar el Poder Ejecutivo tras la derrota electoral en las PASO.

Según confirmaron a Infobae fuentes oficiales, la reunión tendrá lugar el 21 de septiembre y además tendrá una cantidad ampliada de integrantes, según determinó este jueves el Gobierno a través del Boletín Oficial. De esa manera, el consejo del salario podrá tener hasta 64 integrantes entre ejecutivos de cámaras empresariales y directivos de sindicatos.

El piso de remuneraciones tuvo en lo que va del año un incremento del 35% y el Gobierno abogará por una suba mayor, que podría ser de al menos el 45% considerando la pauta inflacionaria actualizada para 2021 que estableció el Ministerio de Economía. El salario mínimo actúa como “referencia” paritaria para los trabajadores del sector informal, que no están alcanzados lógicamente por las negociaciones salariales gremiales.

El salario mínimo, además, impactará directamente en algunos de los programas sociales que otorga el Gobierno nacional, principalmente el plan Potenciar Trabajo, que paga la mitad de un SMVM por cuatro horas de trabajo como contraprestación, y que influye también en los criterios de ingreso a las Becas Progresar y a la jubilación mínima de quienes tienen 30 años de aporte, entre otros.

A partir del 1° de julio, el ingreso mínimo había sido fijado en 27.216 pesos, en 28.080 desde el 1° de agosto y en 29.160 pesos desde el 1° de septiembre para los trabajadores mensualizados, por lo que la nueva convocatoria procura aumentar esos valores, probablemente a partir del 1° de octubre.

El avance de la inflación y la reapertura de paritarias generales que propició el Gobierno en las últimas semanas para evitar que el salario termine el año con su cuarta pérdida consecutiva de poder de compra forzó al Poder Ejecutivo a revisar sus propias pautas de incrementos. Y en esa lógica, la derrota electoral el domingo pasado aceleró la decisión.

En términos prácticos la actualización del piso remunerativo tiene una influencia mayor en el gasto del propio Estado que en el mercado laboral del sector privado. Según explican fuentes oficiales y empresarias, esto sucede porque algunas de las prestaciones sociales que otorga el Poder Ejecutivo están directamente relacionadas al salario mínimo. En ese sentido, además, la mayor parte de los convenios colectivos de trabajo ya cuentan con remuneraciones que superen ese monto.

El aumento del salario mínimo ya había tenido un reajuste tras el acuerdo inicial de fines de abril para incrementarlo en 35 por ciento. En una primera intención, el piso de remuneraciones para los empleados iba a tener lugar en siete tramos hasta febrero de 2022.

Pero la aceleración inflacionaria de los primeros meses del año dejó vetusto ese aumento y el Gobierno decidió, en un primer momento, acelerar los ajustes y poner plazo para una revisión paritaria de la mínima. La administración nacional determinó entonces que ese 35% que estaba previsto en siete tramos se realizara más rápido a través de tres aumentos que terminaron este mes.

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