Según Grobocopatel, por el cepo a las exportaciones, en 6 meses habrá menos carne y aumentará el precio

El empresario agroindustrial, radicado hace más de un año en Uruguay, dijo que el Gobierno en vez de solucionar problemas, crea otros nuevos. Citó un estudio del kirchnerismo para pedir que al campo “le saquen el pie de encima”

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Grobocopatel, durante una presentación. Es una de las voces más escuchadas del sector agroindustrial  (Matías Arbotto)
Grobocopatel, durante una presentación. Es una de las voces más escuchadas del sector agroindustrial (Matías Arbotto)

Radicado desde hace más de un año en Colonia, Uruguay, Gustavo Grobocopatel, expresidente y líder del grupo “Los Grobo”, una de las voces más prominentes del sector agroindustrial, dijo que la Argentina “le duele”, que el Gobierno actúa con prejuicios respecto del campo y que será difícil recuperar las exportaciones que se pierden con las actuales medidas.

En conversación radial por Mitre, Grobocopatel dijo que hay formas mucho más racionales para aumentar la producción ayudar a los sectores sociales con dificultades que prohibir las exportaciones de carne, medida que decidió prorrogar el Gobierno y que tiene a las entidades del campo que integran la Mesa de Enlace reunidas en Río Cuarto, al borde de adoptar medidas de protesta.

Según el empresario, la medida oficial “desinfla” la actividad ganadera. “Estamos tratando de buscar soluciones simples a problemas complejos, con medidas que no han funcionado y no funcionarán”, señaló.

Estamos tratando de buscar soluciones simples a problemas complejos, con medidas que no han funcionado y no funcionarán”

Cuando se le señaló que el Gobierno argumenta que así logró bajar los precios de la carne al consumidor, Grobocopatel respondió que “los precios no bajaron, sino que dejaron de subir, por distintos motivos, no necesariamente por esa medida”. El impacto negativo de la medida será importante, señaló: “va a disminuir la producción y vamos a tener menos carne en 6 meses o un año. Así se crean problemas nuevas. Hay que buscar otras formas de resolver los problemas”.

El empresario dijo que si bien no integra las entidades del campo, tiene la impresión de que el Gobierno no tiene un diálogo verdadero con ellas. “Hay desconfianza, prejuicios. Es así desde hace mucho, pero se agudizó desde la Resolución 125 (la medida por la cual en 2008 el primer gobierno de Cristina Kirchner instauró las “retenciones móviles y desencadenó la “crisis del campo”).

Según Grobocopatel, gracias a la prohibición de exportar carne y otras medidas desacertadas, “Uruguay y Brasil están ocupando los lugares que nosotros dejamos en el mercado internacional. Uruguay había planteado cambios en el Mercosur porque quería un tratado de libre comercio con China, para venderle más. Ahora no lo necesitan, lo tienen con las medidas que tomó la Argentina. El flujo de exportaciones es difícil de restablecer cuando se interrumpe”.

El gobierno de Lacalle Pou quería cambios en el Mercosur para firmar un tratado de libre comercio y venderle más a China; ya no lo necesita gracias a las medidas que tomó el de Alberto Fernández, dijo Grobocopatel
El gobierno de Lacalle Pou quería cambios en el Mercosur para firmar un tratado de libre comercio y venderle más a China; ya no lo necesita gracias a las medidas que tomó el de Alberto Fernández, dijo Grobocopatel

Fue allí que vaticinó que “el precio de la carne va a aumentar. La cuestión es aumentar la cantidad para que la oferta haga bajar el precio. Con las medidas actuales queremos mejorar la situación y en realidad la vamos a empeorar”.

Ante la pregunta de cómo se ve la Argentina desde Uruguay, Grobocopatel (cantante e integrante de un grupo de folclore) citó una frase de Atahualpa Yupanqui, “la Argentina me duele”, cuando vivía en París en París. “Ese es el sentimiento”, fundamentó.

El empresario también señaló la falsa impresión que se tiene porque, a pesar de todo, la producción agroindustrial sigue creciendo. “El sector no crece tanto desde hace 3 ó 4 años; es cierto que crece, pero cuando uno mira Brasil, Ucrania, Uruguay, Paraguay, se da cuenta que mientras la agroindustria en la Argentina creció 30%, en esos países creció 300%. Eso en el interior significa puestos de trabajo, servicios, metalmecánica, industrias integradas al campo y los agronegocios. Y es algo que no requiere recursos especiales, sino solo sacarle el pie de encima. Es muy extraño tener que explicar esto”.

En ese punto, Grobocopatel recordó que el propio kirchnerismo afirmó eso en un estudio de hace 10 años. “Una de las pocas veces en que el Estado midió el potencial de crecimiento del sector fue en un gobierno kirchnerista, cuando el (entonces ministro de Agricultura) Julián Domínguez hizo el Plan Estratégico Agropecuario 2020: allí decía claramente que si al sector se le sacaba el pie de encima el sector podía hacer que la Argentina creciera un 3% extra por año. Eso fue en 2011, es decir que nos perdimos 3% de crecimiento anual durante 10 años. Lo menciono porque es un estudio realizado por el mismo kirchnerismo”.

El grupo Los Grobo tiene su central en Carlos Casares, pero emprendimientos en varias provincias argentinas y en el exterior
El grupo Los Grobo tiene su central en Carlos Casares, pero emprendimientos en varias provincias argentinas y en el exterior

Prejuicios, academia y relato

Sobre las causas de la persistencia en “ponerle un pie encima” al sector, el empresario argentino radicado en Uruguay dijo que se debe a “una cantidad de prejuicios que vienen del desconocimiento del gobierno actual, pero también de otros partidos”. Y respecto de esos prejuicios señaló que muchos provienen del sector académico, donde “muchos tienen una forma de ver la economía de hace 60 ó 70 años y no entraron en la modernidad. Creen que si a un sector le va bien, a otro le tiene que ir mal. Cada tanto, esas ideas antiguas y erradas vuelven a la luz con periodistas y académicos y muchos políticos encuentran en ellas la justificación, el relato para hacer las barbaridades que hacen”.

Consultado sobre el caso de Brasil, Grobocopatel dijo que la economía del socio mayor del Mercosur viene creciendo lentamente, a un 2% anual, desde hace varios años, resultado de que mientras su agroindustria crece a más del 10%, la industria tradicional decrece. “Si hubiésemos seguido el ritmo agroindustrial de Brasil, la Argentina hoy exportaría el doble de lo que exporta, tendría más reservas, menos inflación, menos pobreza y más oportunidades de trabajo”, señaló.

Respecto de las elecciones, el empresario dijo que él votará en el consulado argentino en Colinia y que mantiene las esperanzas en el proceso político argentino. “Me vengo equivocando, pero es verdad que la Argentina ha consolidado bastante bien su democracia, su sistema republicano; eso se ha fortalecido. Los partidos políticos tienen muchos líderes y opciones. Es momento de reencontrarnos en grandes coaliciones –concluyó- porque las transformaciones que se requieren en los próximo años son profundas, fuertes, que son las que van a permitir la vuelta de página”.

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