Roque Fernández: “No creo que los países que nos puedan ayudar lo vayan a hacer si permanentemente votamos en contra de ellos y a favor de dictaduras”

El ex presidente del BCRA y ex ministro de Economía analizó en una entrevista con Infobae la política oficial y dio recomendaciones. El rol de las instituciones y su aspiración de sumarse a la Cámara alta

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El ex ministro Roque Fernández
El ex ministro Roque Fernández

El ex ministro de Economía Roque Fernández afirmó que “el Fondo Monetario Internacional no le concederá un acuerdo a la Argentina para postergar el pago de su deuda si el Gobierno no presenta un programa económico nuevo con reformas estructurales.

En una entrevista con Infobae, el economista de 74 años doctorado en la Universidad de Chicago, miembro del Consejo Superior de la Universidad del CEMA y también fue presidente del Banco Central y ministro de Economía, afirmó que el Gobierno “va a tratar de imponer” más estatizaciones “todo el tiempo, pero no creo que pueda lograrlo”, por el freno del poder judicial”.

Roque Fernández es otro de los economistas con aspiraciones a ocupar un cargo legislativo: será candidato a senador nacional por la provincia de Córdoba en las próximas elecciones.

_ ¿Cómo observa la situación institucional y su influencia sobre la economía?

_ En términos institucionales la situación no es buena, porque todo el tiempo se vuelve a poner en discusión la división de poderes, la independencia del Poder Judicial y creo que eso genera mayor incertidumbre a una situación económica grave. Y la solución a este problema pasa por la política, para consolidar las instituciones. Si se toma una cuestión concreta como el tema de las vacunas, se anunció que se podrán importar 20 millones de dosis de las vacunas Pfizer, pero hace ocho meses se sacó una ley que impidió hacerlo antes y la oposición no hizo nada para evitarlo. Eso significó la muerte de decenas de miles de personas por la falta de funcionamiento de las instituciones. El Gobierno utilizó un criterio geopolítico para generar una traba pararancelaria al frenar el ingreso de estas vacunas que ahora entrarán y la oposición debería haber sido firme en no convalidar esa ley original. Ahora, el Gobierno reconoce su error al habilitar este cambio.

_ ¿Qué refleja esta lentitud de la oposición en el Congreso?

_ No le prestó suficiente atención al tema, aunque si uno lee comentarios de aquel momento se discutía el ingreso o no de Pfizer, pero no se sabía que se trataba de una vacuna en particular. No sé por qué la oposición no se puso más firme, pero sé que se podría haber opuesto a la ley o dejar más en evidencia lo que podía ocurrir. De alguna manera, los controles fallaron.

Roque Fernández hizo fuertes críticas
Roque Fernández hizo fuertes críticas al Gobierno y a la oposición por las vacunas (EFE)

_ Y, en el mismo sentido, ¿cuánto influye entonces el enfoque ideológico de la política exterior del Gobierno sobre la economía?

_ Tiene mucho que ver, porque, tal como está planteado el proceso electoral en curso, estas elecciones de política exterior no son ingenuas: la construcción de la polarización en base a la premisa maniquea de ‘amigo-enemigo’ que irritan a todos aquellos argentinos que creen que el país debe estar junto a los países democráticos en lugar de con las dictaduras que no respetan nuestros valores, como las de Venezuela, Cuba, o Nicaragua, o la autocracia de Rusia. No sé si les dará resultado en las elecciones, pero es lo que buscan.

_ En febrero 2020 usted decía que la influencia del enfoque bolivariano de Cristina Fernández de Kirchner es minoritaria sobre el Gobierno. ¿Sigue pensando lo mismo?

_ Es minoritaria dentro del justicialismo. No creo que el peronismo en general tenga esa postura, pero claro que ella es la tiene mayor poder político en el Poder Ejecutivo, por lo que sí tiene la influencia suficiente sobre estas acciones del Gobierno.

_ ¿Si el Gobierno ganara las elecciones de medio término, se podría consolidar esta tendencia?

_ No es bueno que el Gobierno gane para que se profundice esta tendencia autoritaria, pero no creo que por esta razón la mejor opción sea Juntos por el Cambio, que no hizo una resistencia a este tipo de actitudes. Así que hay que pensar en no permitir el poder hegemónico del oficialismo con una pluralidad mayor, porque, aunque si bien compartimos los valores republicanos con Juntos por el Cambio, no ha sido suficiente. Por eso traté de generar un espacio donde se consoliden estos valores, ya que Juntos por el Cambio en materia económica tiene una orientación socialdemócrata y Argentina en la alternancia de los últimos 20 años deterioró su situación económica como consecuencia de no haber encarado las reformas necesarias para el país, ni con el kirchnerismo, ni con el gobierno de Mauricio Macri.

“Hay que pensar en no permitir el poder hegemónico del oficialismo con una pluralidad mayor, porque, aunque si bien compartimos los valores republicanos con Juntos por el cambio, no ha sido suficiente”

_ ¿Y quién representa estos valores que promueve?

_ Depende de cada distrito. En Córdoba hemos logrado una coalición entre el Partido Demócrata y la comunidad evangélica que va a competir en las elecciones, donde el cargo para primer diputado es para Mery Lunge y para primer senador lo ocupo yo, en un espacio que tampoco tiene que ver con el peronismo del gobernador Juan Schiaretti, cuyos senadores también apoyaron al Poder Ejecutivo con el tema de Pfizer en el Congreso.

_ ¿Se siente representado por algún candidato en el área metropolitana?

_ Comenzamos trabajando con Ricardo López Murphy, que tiene un pensamiento idéntico, pero luego su grupo decidió ir a una interna con María Eugenia Vidal. Una parte del Partido Demócrata apoya a Juntos por el Cambio y la otra al espacio de Javier Milei.

Elogios de Roque Fernández a
Elogios de Roque Fernández a Ricardo López Murphy

_ ¿Le parece que Javier Milei es un buen candidato?

_ Es una persona que está dentro del liberalismo, aunque es más extremo, libertario, aunque es diferente en el sentido correcto a Juntos y al kirchnerismo. Algunas de sus ideas son un poco más extremas, pero es preferible a las otras dos opciones.

_ ¿Cuánto pueden incidir estos economistas que mencionó, y otros como Martín Tetaz, en el plano legislativo, dado que el Congreso tiene una postura más reactiva que proactiva, salvo excepciones?

_ No mucho, porque creo que serán pocos. Si suponemos que entra López Murphy, Tetaz, Milei y José Luis Espert en provincia de Buenos Aires y algunos más en Córdoba, Mendoza y Santa Fe, será una decena de economistas interesantes porque tendrá un pensamiento diferente. Todos piensan que la división de poderes es el marco normativo correcto y la economía de mercado con la regulación necesaria es la mejor combinación para lograr mayor bienestar, así eso sería positivo.

_ ¿Coincide con los analistas económicos que elogian la acotada agenda del ministro Martín Guzmán, pero coinciden en que no tiene suficiente respaldo político para implementarla?

_ Si, totalmente. Creo que el problema de Argentina no lo puede resolver ni el ministro Guzmán ni el economista más iluminado o el mejor del mundo, porque el problema es político y la solución también: Guzmán puede ser mejor o peor, pero no habrá una solución técnica a este problema.

El problema de Argentina no lo puede resolver ni el ministro Guzmán ni el economista más iluminado o el mejor del mundo, porque es un problema político

_ Y en el plano técnico en sí, ¿qué opina de su gestión?

_ La gestión económica está totalmente sometida a lo que los economistas llamamos dominancia fiscal desde hace casi dos décadas. La falta de sustentabilidad de las finanzas públicas obliga al país incurrir en déficit que se financia emitiendo deuda y eso agrava la solución porque la solución es eliminar el déficit; pero el Gobierno tiene una postura negacionista y dice que la inflación es multicausal, o que los empresarios suben los precios o no quieren aumentar la producción. Esto llevará a aumento de la emisión monetaria y de la deuda cada vez más insostenible y también explica por qué Martín Guzmán no podrá, más allá del esfuerzo que hace, llegar a un acuerdo con el FMI porque atrás de él está esa dominancia que él no puede controlar y que es responsabilidad del sector político.

Fuente: Secretaría de Finanzas
Fuente: Secretaría de Finanzas

_ Pero es difícil pensar que el Gobierno pueda eludir un acuerdo en 2022, cuando los vencimientos superan los USD 20.000 millones...

_ Es muy difícil; si no encaran reformas estructurales, con el programa económico que tienen no habrá acuerdo con el FMI. Y no veo voluntad política para hacer estas reformas.

_ Pero el FMI demostró varias veces que la política también es más relevante que la cuestión técnica al apoyar programas de la Argentina, en contextos muy diferentes, como 2001, 2003 y 2018, entre otros…

_ El FMI tiene sus economistas que es su staff y sus directores que son políticos. Y lo que ocurrió es que, a nivel político, se movió a algo en la dirección del populismo. Esto permitió que se demoren las reformas estructurales. Por eso no creo que el Fondo plantee una ruptura, tratará de ayudar, pero no con los mecanismos convencionales, sino manteniendo el diálogo abierto, pidiéndole a algunos países que hagan un crédito puente, como ocurrió en el pasado, por ejemplo, durante la crisis del Efecto Tequila para México. Esas cosas pueden suceder, pero no creo que los países que nos puedan ayudar lo vayan a hacer si permanentemente votamos en contra de ellos y a favor de dictaduras o regímenes autoritarios. No hay un programa viable ni el soporte político de Occidente, así que habrá una larga letanía de conversaciones y viajes sin una definición.

No creo que el Fondo plantee una ruptura, tratará de ayudar, pero no con los mecanismos convencionales, sino manteniendo el diálogo abierto, pidiéndole a algunos países que hagan un crédito puente

_ ¿Cree que las últimas señales de estatizaciones, como la Hidrovía o los ferrocarriles de carga se van a profundizar?

_ El Gobierno va a tratar de imponer ese rumbo todo el tiempo, pero no creo que pueda lograrlo; cada vez habrá una mayor resistencia, sobre todo en aquellas cuestiones donde se necesite una acción legislativa profunda. Y si quisiera ir por la fuerza en contra de la Constitución Nacional, la Corte Suprema lo va a frenar, aunque lo va a intentar. Además, hay cosas que pueden ocurrir igual, como el caso de la Hidrovía, que es una caja enorme, similar a la del sistema previsional, porque en vez de atender las necesidades de los jubilados que hicieron sus aportes, financiaron a aquellos que no los habían hecho y perjudicaron a todos. Si, en el mismo sentido, los recursos de la Hidrovía se destinan a otro fin que no sea el dragado, habrá serias dificultades en la salida de la comercialización de granos y otros productos. Va a ser un embudo que penalizará mucho toda la actividad del noreste del país.

_ ¿Cómo analiza la relación tensa entre el Gobierno y el campo, que no ni un enfrentamiento abierto como en 2008, ni una relación armoniosa?

_ Esto se va a notar ahora en la elección: el campo obviamente tiene una postura de fuerte decepción con el Gobierno, que, por lo tanto, lo enfrentará más y lo pondrá nuevamente como enemigo y así seguirá. Por este motivo, el interior productivo va a hacer sentir su peso electoral sobre estas elecciones.

_ ¿Qué aliados tiene el Gobierno en el sector privado, dado que enfrenta al campo y al menos no apoya a la industria del conocimiento?

_ Los sindicatos y el sector público, que ha crecido mucho. Pero aún la gente que recibe planes sociales está disconforme, porque no quiere asistencia, sino empleo genuino.

Para el ex ministro, los
Para el ex ministro, los sindicatos serán los principales aliados del Gobierno

_ ¿Y qué reformas serían posibles, no solo necesarias?

_ Prácticamente ninguna, porque van en contra de su ideología y su perspectiva de futuro, por ejemplo, bajar impuestos para beneficiar a las pequeñas y medianas empresas. Va a seguir con lo que está, tratando de controlar los precios, apretando al sector productivo y empeorando la situación.

_ ¿Empeorar hasta dónde? Hay economistas que mencionan la posibilidad de un Rodrigazo o de una hiperinflación, aun en un mundo sin inflación. ¿es posible un desenlace de esa magnitud?

_ Siempre es posible, aunque creo que la probabilidad es baja. Son eventos que ocurrieron en la Argentina y podrían repetirse, no son ficción, pero no lo veo probable en los próximos meses. Si esta situación se sigue agravando, puede desencadenarse una crisis que es difícil saber cómo se manifestará. De todos modos, creo que el Gobierno está suficientemente asustado como para no profundizar los problemas.

_ ¿No cree que la pandemia favorece cierta confusión y desincentiva estas reformas, que tenían un contexto favorable en los 90? Eso se observa cuando el FMI afirma, por ejemplo, que la baja de impuestos no provoca más inversiones. ¿No es más fácil aislarse ahora?

_ Esas definiciones de los organismos multilaterales son válidas para países desarrollados o emergentes que tienen espacio para una política fiscal expansiva por tener una situación ordenada en términos macroeconómicos, que, sin embargo, no pudo evitar una crisis originada en otros factores. La gente protesta más por la distribución del ingreso y de la riqueza, pese a que esta distribución mejoró. De todos modos, se pueden tomar otros ejemplos, como Uruguay. Pero la Argentina no tiene margen alguno para hacer política fiscal expansiva.

_ Si lograra ingresar al Congreso, ¿cuáles serían los primeros proyectos que presentaría?

_ Una reforma tributaria para bajar la presión impositiva y una reforma laboral para bajar los costos de ingreso al mercado del trabajo registrado. Y también tener un sistema diferente, para ir más a un seguro de desempleo, como en el sector de la construcción, a diferencia de las rigideces del resto del sistema.

Quiero impulsar una reforma tributaria para bajar la presión impositiva y una reforma laboral para bajar los costos de ingreso al mercado del trabajo registrado

_ ¿Cómo observa la situación internacional?

_ Sigo con curiosidad y preocupación la política monetaria de Estados Unidos, que es muy laxa; en parte tiene que ver con la pandemia, pero hay una inflación del 5% anual y eso es preocupante, porque cuando esa inflación se empiece a sentir y la población reclame estabilidad, subirán las tasas de interés.

_ ¿Cree que, en todo caso, será un proceso muy gradual, muy diferente a lo que ocurrió en los 80, con una corrección abrupta de las tasas?

_ Si la inflación se dispara un poco más, la corrección va a venir, a fin de este año o principios del próximo.

_ Esto va a repercutir en términos externos para los países de la región…

_ Si, sobre todo para los países que hicieron las cosas bien; nosotros estamos afuera del mercado así que una fuga de capitales argentinos ya se está dando sin esa suba de la tasa, pero cuando esta suba, nuestros socios comerciales, van a sufrir.

_ Y eso se reflejará en los precios de las materias primas que exporta la Argentina...

_ Seguramente se reflejará en el hecho de que habrá menores importaciones de parte de nuestros socios, sin duda.

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