La incertidumbre cambiaria también afecta a las operaciones de compra y venta de campos

Desde la Cámara de Inmobiliarias Rurales sostienen que la situación económica y cambiaria, junto al proceso electoral de los próximos meses, provoca una ralentización de la actividad

Guardar
La actividad de las inmobiliarias rurales afectadas por la situación cambiaria.
La actividad de las inmobiliarias rurales afectadas por la situación cambiaria.

El mercado inmobiliario rural logró en mayo quebrar la tendencia de caída en los valores de los campos, aunque aún persiste la incertidumbre a la hora de concretar operaciones de compra y venta por la falta de un escenario claro en materia cambiaria. “¿A qué dólar se cerraría la venta?, es la frase que más repiten los posibles interesados, en su mayoría con disponibilidad de pesos para hacerse de la titularidad de lotes agrícolas o ganaderos en la Pampa Húmeda. La situación económica, junto al proceso electoral por delante, ralentiza más la operatoria de la plaza.

Juan José Madero, presidente de la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR), admitió ante Infobae que este tipo de cuestiones son las que rigen hoy las operaciones de compra y venta de campos en las principales regiones productivas. “La pregunta constante que escuchamos de los interesados en hacerse de campos es a qué dólar se cerraría la venta de los lotes”, comentó Madero. Allí la respuesta no se hace esperar por parte de los vendedores, el ofrecimiento de los lotes se hacen a cambio de “dólar billetes o dólares reales”, según admitió el titular de la Cámara.

La entidad expuso esta situación en su último informe donde evalúa lo ocurrido en el primer semestre del año En el mismo se admitió que “el mercado cambiario continuó totalmente intervenido y con importantes restricciones para operar en plaza, con brechas significativas y crecientes entre las diferentes cotizaciones del dólar: Dólar Oficial, Contado con Liqui o también el Dólar MEP o Bolsa, entre otros”.

Desde la Cámara, se objetó también la política económica y financiera adoptada por el gobierno nacional durante la primera parte del 2021, donde se aseguró que se “continuó sin un rumbo claro” a instancias de las decisiones gubernamentales adoptadas a partir de “tomar medidas de efecto negativo para la actividad agroindustrial y falencias/lentitud en el manejo de la cuarentena: la economía del país no logró recuperarse y seguimos conviviendo con altos índices de inflación”.

En este sentido, la CAIR consignó que “la demora en las negociaciones de la deuda externa y posterior pago han sido señales muy negativas para el país, agravándose más por el cambio al grupo de standalone, última categoría del índice del Morgan Stanley Capital International (MSCI). Esta situación deja escasos y muy selectivos inversores que miren a la Argentina”, expresó la entidad.

Se estimó además que en el saldo de las medidas adoptadas en el período enero-junio de 2021 llevó a que Argentina “continúa fuera de los mercados financieros, lo que le implica la imposibilidad de reconvertir su deuda externa y deberá seguir pagando altas tasas de interés. El gobierno no muestra un plan económico sólido, ni siquiera de corto plazo, siendo las elecciones de medio término del mes de noviembre la prioridad, por lo que es de esperar que las próximas medidas vayan en dirección a lograr el mejor resultado posible”.

Carne vacuna y valores de los campos

Tal como lo hizo público hace poco más de un mes, la CAIR consideró también que en materia de actividad ganadera “aparece otro semáforo en rojo con la intervención en las exportaciones, quitando interés en la inversión y reinversión en el sector”.

Más allá del estancamiento registrado entre marzo de 2020 y abril de 2021, a partir de mayo pasado se logró quebrar con una tónica bajista en el valor de los campos para su venta. Esto se debió fundamentalmente al buen nivel de precios que exhiben las principales commodities agrícolas que produce la Argentina, como soja, maíz y trigo. Esto llevó a “estabilizar” los valores de los campos agrícolas, tal como admitió la CAIR en el período mayo-junio, y hasta contar con una “ligera suba para el caso de los de mayor valor”.

Sin embargo, sobre el buen nivel de precios internacionales que tienen los granos pesa la incertidumbre –según admite la Cámara Inmobiliaria Rural- para avanzar y acelerar las operaciones de compra venta. Principalmente por la política de restricción que ofrece en materia cambiaria. También impactan allí otras cuestiones vinculadas a la política económica, financiera y hasta productiva que propone el gobierno de Alberto Fernández, con la cual no logra calmar la incertidumbre que reporta el mercado privado. Desde donde se objeta la constante política de intervención. Así, las operaciones que se están reportando no superan los tres millones de dólares en una plaza inmobiliaria muy “selectiva” para el segmento de compra de campos.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar