Las acciones argentinas estuvieron negociados este viernes con leves bajas, en línea con la tendencia anotada en los ADR (acciones locales que cotizan en el exterior), mientras que los principales índices de Wall Street exhibieron números rojos, pese a un reporte que mostró que las ventas minoristas en Estados Unidos tuvieron un alza imprevista en junio.
El índice accionario S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires perdió 0,6%, en los 63.090 puntos, tras caer sendos 0,7% en la dos sesiones anteriores. El referencial líder acumula una alza del 23% en lo que va del 2021, frente a una inflación minorista por encima del 25 por ciento.
En el plano local, las elecciones primarias que se realizarán en septiembre y los comicios legislativos de noviembre, donde se renovarán 127 bancas de la Cámara de Diputados y 24 del Senado, centran la atención de los inversores.
“El ‘modo electoral’ ya se adueñó de la escena y por lo cual viene ganando una mayor apatía en esta etapa”, dijo a Reuters un analista del mercado.
Los precios minoristas de Argentina crecieron un 3,2% en junio, con lo que acumulan una subida del 25,3% en el primer trimestre del año y un alza del 50,2% en los últimos 12 meses, reportó el ente de estadísticas (INDEC).
En las bolsas de Nueva York, los principales índices registraban claras pérdidas, en un rango del 0,8% al 0,9%, mientras que las acciones y ADR de compañías argentinas que son operados en dólares en el exterior perdieron hasta 3,6%, encabezados por IRSA. Le siguieron Banco Francés (-3,1%) e YPF (-3%).
Los bonos Globales, en dólares con ley extranjera, ganaron un 0,2% en promedio, mientras que el riesgo país de JP Morgan, que mide la brecha de tasas entre los bonos del Tesoro de EEUU y similares emisiones emergentes, descendía ocho unidades para la Argentina, a 1.587 puntos básicos a las 17 horas.
El Merval en dólares gana 23% en 2021, una tasa apenas debajo de la inflación del período
“Creemos que los bonos soberanos van a continuar moviéndose al mismo ritmo que la deuda global de misma calificación, que viene lateralizando desde, por lo menos, marzo de este año”, estimó la consultora Delphos Investment en un informe de mercado.
Las lentas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional por la renegociación de una deuda de unos USD 45.000 millones, una fuerte inflación que golpea la débil economía y la pandemia de COVID-19 -que dejó más de 100.000 muertos- crean un clima difícil para el mercado financiero, según analistas.
El portavoz del FMI, Gerry Rice, dijo que hubo “discusiones muy productivas en los últimos días” entre el personal del organismo multilateral de crédito y las autoridades argentinas, aunque se negó a proporcionar un cronograma para un potencial acuerdo.
Respecto de los bonos en dólares, los analistas de Portfolio Personal Inversiones evaluaron que “los drivers (directrices de mercado) que pusieron fin a la sangría desde mediados de junio estuvieron relacionados a las novedades positivas en la negociación con el FMI. Más allá del buen clima para emergentes en el exterior (la tasa de los bonos del Tesoro de los EEUU a 10 años no encuentra piso), es una buena noticia que el Gobierno no abandone la meta de arreglar un nuevo acuerdo con el Fondo, aunque sea en el primer trimestre de 2022″.
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