Con una publicación en su cuenta de Twitter, el embajador de Alemania en la Argentina, Ulrich Sante, expresó su preocupación las restricciones que el Gobierno argentino estableció para los vuelos internacionales, que tienen un cupo para la cantidad de pasajeros que pueden ingresar por semana al país.
“Preocupado por el creciente aislamiento de la Argentina mientras otros mercados se abren y recuperan rápidamente”, escribió Sante. El embajador mantuvo una reunión el 12 de julio pasado con María José Taveira, la representante en la Argentina de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) y aseguró que no pierde su optimismo sobre la posibilidad de que se normalice la situación.
A través de varias medidas, el Gobierno argentino limitó el ingreso de pasajeros desde el exterior al país, con lo que se redujeron los vuelos de las aerolíneas internacionales. El 25 de junio pasado, se redujo el cupo de ingreso de 2.000 a 600 pasajeros diarios (lo que representa solo entre dos y tres vuelos) y a partir de esta semana comenzó a ampliarse en forma progresiva hasta llegar a los 1.000 pasajeros por día.
La aerolínea alemana Lufthansa obtuvo autorización para operar ocho vuelos durante todo el mes de julio. Esto incluye cuatro vuelos entre Frankfurt y Buenos Aires (los días 14, 21 y 28 de julio) y cuatro vuelos entre Buenos Aires y Frankfurt (los días 17, 24, 31 de julio).
Desde IATA vienen reclamando una reunión con el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. “Es imprescindible que se establezcan con el Gobierno los requisitos de forma coordinada y previsible que permitan a la industria operar de forma estable, mientras que siga la pandemia”, señalaron en un comunicado.
Antes de la pandemia se operaban unos 155 vuelos internacionales diarios y ahora se redujeron a apenas tres o cuatro
La asociación advirtió que esta medida puede generar que más aerolíneas internacionales suspendan temporal o definitivamente sus operaciones en la Argentina y reiteró que la industria “quiere ser parte de la solución”. Antes de la pandemia se operaban unos 155 vuelos internacionales diarios y ahora se redujeron a apenas tres o cuatro.
“Las últimas decisiones unilaterales por parte del gobierno están aislando aún más al país, poniendo en riesgo la valiosa contribución que hace este sector a nivel social y económico. Necesitamos decisiones claras y previsibles para poder operar y cumplir con los pasajeros y eso es lo que estamos pidiendo”, dijeron desde IATA en un comunicado difundido a comienzos de este mes.
“Cambiar las restricciones de un día para otro, pone en una situación muy delicada a las aerolíneas, pero sobre todo a los miles de pasajeros que han viajado por trabajo, motivos de salud, reencuentro con familiares, vacaciones, estudios y necesitan volver”, agregaron.
El 30 de junio pasado, el embajador alemán tuvo una reunión con el ministro de Transporte Alexis Guerrera. Según se informó en la cuenta oficial de la Embajada, en el encuentro se habló sobre el interés de Alemania en contribuir a la revitalización de la economía argentina y sobre los lazos aéreos entre ambos países con Frankfurt como hub europeo.
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