El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires comenzó a habilitar de manera gradual la reanudación de las obras de viviendas privadas de más de 2.500 metros cuadrados que habían sido postergadas por las restricciones sanitarias que comenzaron a regir el 30 de abril pasado en el marco de la pandemia del coronavirus.
Si bien la flexibilización de esta actividad estaba prevista recién para la semana próxima, el mandatario porteño, Horacio Rodríguez Larreta, decidió adelantar unos días esta autorización que beneficia al sector de la construcción, que había sido afectado por las medidas implementadas para reducir la circulación ante el aumento de los contagios en el distrito.
Para poder volver al trabajo, los contratistas y subcontratistas tendrán que cumplir con el protocolo elaborado por el Ministerio de Desarrollo Económico de la Ciudad y cargar una declaración en la que acrediten que todos sus operarios viajan en transporte privado porque, de lo contrario, no obtendrán el permiso para retomar el funcionamiento.
“Por cada obra, el profesional encargado del área de seguridad e higiene, deberá cargar en el sistema Web de la AGC (Agencia Gubernamental de Control), los datos correspondientes de los empleados y el lugar de procedencia (CABA/PBA) declarando que los mismos no utilizarán el transporte público para trasladarse. Realizado esta carga se le habilitará el código QR para poder continuar y realizar la actividad”, explicó a Infobae el director ejecutivo de este organismo, Matías Lanusse.
Una vez que cuenten la habilitación pertinente, la Secretaría de Trabajo se encargará de fiscalizar que todas estas edificaciones cumplan desde este lunes con todos los requisitos que se les solicitó para volver a funcionar.
Las construcciones de más de 2500 m2 habían quedado paralizadas a fines de abril por decisión del gobierno porteño, en el marco de una serie de restricciones sanitarias que implementó con el objetivo de reducir el número de infectados de coronavirus
El freno se hizo para disminuir la circulación de los trabajadores que usan el transporte público, en especial quienes deben conectar la provincia de Buenos Aires con la Capital Federal, teniéndose en cuenta que el 63% del personal de este sector reside en territorio bonaerense.
Por su parte, las cámaras desarrolladoras, empresas constructoras y representantes de los empleados nucleados en la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) comenzaron a mantener reuniones virtuales con frecuencia, con la intención de coordinar tareas conjuntas para destrabar esta situación.
De estas conversaciones participaron, además de Lanusse, todos los otros funcionarios porteños que integran la denominada Mesa de Vivienda: José Luis Giusti, ministro de Desarrollo Económico; Juan José Méndez, secretario de Transporte y Obras Públicas; Álvaro García Resta, secretario de Desarrollo Urbano; y Ezequiel Jarvis, Subsecretario de Trabajo, Industria y Comercio.
Fue así como las partes terminaron acordando adelantar una semana la reactivación de los trabajos en unos 600 emprendimientos que están ubicados en diferentes barrios porteños, bajo la promesa de no utilizar el transporte público.
Los representantes de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), la Asociación de Empresarios de la Vivienda (AEV), la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos de la República Argentina (CEDU), celebraron esta decisión.
“Les pedimos a las cámaras que confeccionen una lista de trabajadores de las empresas contratistas y subcontratistas para cargarlos en una plataforma digital que permitirá fiscalizar si es efectivo que las compañías trasladan a sus operarios en servicios privados”, precisó Lanusse.
Más allá de volver a la actividad después de varios días, tanto los funcionarios como las cámaras y sindicatos consideraron que es vital seguir trazando medidas articuladas por el bien de un sector que moviliza más de 60.000 trabajadores en la Capital.
“No queríamos que ocurra lo de 2020, nuestras empresas adoptaron los protocolos necesarios para cumplir con todos los cuidados que el contexto de pandemia requiere. Entendemos la situación y tratamos de ayudar, nos hemos hecho cargo del traslado del personal costeando transportes privados, y los operarios, sobre todo, trabajan con más distanciamiento en las obras grandes”, argumentó a Infobae, Ricardo Griot, presidente de la comisión de desarrolladores de la CAC.
De cara al futuro, las empresas constructoras esperan que en breve se reglamente una nueva ley para que las futuras hipotecas se ajusten por salarios, entre otras iniciativas que plantearon tendientes a la reactivación de su actividad.
“Algunos logros acreditan que la Mesa de Vivienda donde están nucleados los principales eslabones de la cadena de valor de nuestra industria, es clave para salir adelante. El blanqueo, hoy vigente, fue una iniciativa que surgió de este marco de acuerdo, y la reacción que hemos tenido durante esta semana para resolver la paralización de las obras dispuesta por el gobierno porteño, también”, le aseguró a este medio Damián Tabakman, presidente de la CEDU.
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