Elon Musk preguntó a sus seguidores en Twitter si Tesla debería aceptar el pago en Dogecoin. El último tuit de Musk llega apenas unos días después de que dijera que su compañía de cohetes comerciales, SpaceX, aceptará la criptodivisa inspirada en los memes como forma de pago. “¿Quieres que Tesla acepte a Doge?”, preguntó Musk a sus 53,8 millones de seguidores en Twitter.
Musk, quien ha sido un partidario del Dogecoin, atrajo a 3.922.516 de encuestados en 24 horas da su consulta de Twitter sobre si Tesla debería comenzar a aceptar el token de Shiba Inu. ¿El resultado? Un 78,2% por el Sí, y un 21,8% por el No.
La cuarta mayor criptomoneda ha sido volátil desde que el CEO apareció en “Saturday Night Live” y la llamó “un timo” durante un segmento. Su capitalización de mercado ha caído desde USD 95.000 millones a alrededor de USD 67.000 millones.
Los tuits de Musk de este año han convertido a la divisa digital, antes desconocida y que comenzó como una broma en las redes sociales, en todo un sueño para los especuladores.
Sin embargo, la criptodivisa perdió más de un tercio de su precio el domingo después de que Musk la calificara de una especie de “engaño” durante su intervención como presentador invitado en el programa televisivo de humor “Saturday Night Live”, muy popular en los EEUU.
En tanto, las acciones de Tesla llegaron a desplomarse 6% el lunes en Wall Street, y hasta 5% este martes, ya que surgieron nuevas señales de problemas en su negocio en China.
La Asociación de Automóviles de China informó el martes que Tesla vendió 25.845 vehículos fabricados localmente en abril, una caída de 27% respecto a marzo. Reuters informó por separado que el fabricante del Model 3 decidió no adquirir más terrenos junto a su planta de Shanghái, ya que las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China socavaron los planes para convertir el sitio en un centro de exportación.
Las acciones de Tesla, que anotaron un récord de USD 883 el 26 de enero, ceden ahora a los USD 600, sus precios más bajos desde noviembre
Si bien Musk estuvo jugando al control de daños durante lo que ha sido un período turbulento en China, también estuvo preocupado por el Dogecoin, la criptomoneda que comenzó hace años como una broma que ha ganado valor, en parte, gracias a la atención del multimillonario. El token, que tocó la semana pasada un récord de 73 centavos, se hundió a 46 centavos después de la presentación televisiva de Musk, pero este miércoles rebotó a unos 50 centavos después de que el magnate le preguntara a sus casi 54 millones de seguidores si Tesla debería aceptarla como lo ha hecho la compañía con el Bitcoin.
Las acciones de Tesla, que recientemente advirtió a los inversionistas que los activos digitales que está adquiriendo podrían estar sujetos a precios volátiles y riesgo de pérdidas, se desplomaron este martes hasta un 5,7% antes del inicio de las operaciones regulares.
Problemas en China
Los problemas de Tesla en China comenzaron en marzo, cuando se prohibió el acceso de sus vehículos eléctricos a algunos complejos militares y de viviendas debido a la preocupación por los datos sensibles que recogían las cámaras y sensores de los vehículos. Poco después de que se hiciera pública la prohibición, Musk dijo durante una aparición virtual en una conferencia en China que el fabricante de automóviles nunca usaría la tecnología en sus vehículos para espiar y que sería clausurado si lo hiciera.
En abril, una protesta pública de un cliente durante el Salón del Automóvil de Shanghái se viralizó, lo que provocó una investigación más profunda por parte de un regulador del mercado local y acaloradas críticas al servicio de atención al cliente de Tesla. En un principio, la empresa restó importancia al incidente, pero rápidamente adoptó un tono más conciliador tras el aumento de las críticas.
Los tuits de Musk convirtieron al Dogecoin, una criptomoneda hasta entonces desconocida, en todo un sueño para los especuladores
Debido a que los aranceles del 25% impuestos en los EEUU a los vehículos eléctricos bajo el mandato del ex presidente Donald Trump siguen vigentes, Tesla ahora tiene la intención de limitar la porción de China de su producción global, según dijeron a Reuters personas no identificadas familiarizadas con el asunto. La compañía había considerado anteriormente expandir las exportaciones del Model 3 fabricado en China a más mercados, incluido EEUU, indicó la organización de noticias.
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