Si la Argentina pretende dejar de ser el granero del mundo y transformarse en su supermercado, tal como suelen pedir sus gobiernos, no hay otro camino que la innovación. Y la transformación permanente de los mercados junto a los avances tecnológicos puede derivar, por caso, en una alianza impensada. Bioceres, la empresa de biotecnología que produce semillas para los mercados agrícolas globales selló un acuerdo con Havanna, la productora alimenticia de los emblemáticos alfajores, para desarrollar productos en conjunto destinados al mercado argentino y brasilero.
Según fuentes cercanas al acuerdo, la operación entre una empresa biotech y una alimenticia registra “pocos antecedentes, incluso a nivel mundial” y, desde la posición de Bioceres, es un primer paso, ya que mantiene negociaciones abiertas con otras compañías de alimentos para seguir el mismo camino.
Las dos empresas entendieron que es necesario delinear acciones concretas para generar alimentos de alta calidad mediante prácticas productivas amigables con el ambiente y regenerativas del agroecosistema
La alianza entre Bioceres y Havanna tiene posibilidades múltiples, desde producir con harinas con bajo gluten hasta los “alimentos funcionales”, con dos prioridades: la sustentabilidad ambiental y la trazabilidad.
“Las dos empresas entendieron que es necesario delinear acciones concretas para generar alimentos de alta calidad mediante prácticas productivas amigables con el ambiente y regenerativas del agroecosistema”, contaron las fuentes consultadas por este medio.
Desde el lado del marketing, ya hay en marcha focus groups para empezar a diseñar los alimentos a elaborar, que se venderán bajo la marca Havanna, tal vez con algún añadido.
Havanna, propiedad del fondo Inverlat y presidida por Chrystian Colombo, tiene 70 años de trayectoria con sus tradicionales alfajores y golosinas y un esquema comercial de retail con 220 locales propios en la Argentina y otros 130 alrededor de Sudamérica e incluso en España.
“Uno de los primeros objetivos del acuerdo es el desarrollo de alimentos a partir del trigo HB4 tolerante a sequía, un desarrollo de Bioceres, la Universidad Nacional del Litoral y el Conicet que permite un uso más eficiente del agua y una mayor fijación de CO2 que un trigo convencional. Los productos contarán con el más alto grado de información al consumidor respecto de la zona de origen del trigo, la huella ambiental generada, y otros datos derivados del sistema de identidad preservada establecido para la producción de trigos HB4″, aseguraron en la empresa.
La firma rosarina dio así un salto en las grandes ligas de la Bolsa mundial. El 27 de abril pasado, dejó el NYSE y comenzó a cotizar en el Nasdaq junto a las grandes tecnológicas a nivel global, bajo el símbolo BIOX. Ese día, la sociedad participó en la tradicional ceremonia de toque de campana de la Bolsa de Valores de Nasdaq en celebración de la nueva cotización en este mercado. En marzo, Bioceres ya había dado que hablar en Wall Street cuando su acción se disparó al conocerse la adquisición de una participación del 6% en Moolec Science Limited, una empresa de agricultura molecular.
Con una valuación de mercado de USD 580 millones, Bioceres fue la empresa argentina que más se destacó entre las que cotizan en Estados Unidos en el complejísimo año de la pandemia, en donde fueron pocas las que consiguieron un resultado positivo.
“Los avances científicos que fomentan el cuidado del ambiente y los recursos naturales son claves para el futuro” (Aurich)
“Estamos muy contentos de poder iniciar este espacio de innovación junto a una marca tan reconocida en Sudamérica como Havanna, cuya confianza agradecemos enormemente. Esperamos, a través de esta colaboración, lograr un salto evolutivo en la relación del consumidor con el campo, dotándola de mayor transparencia y capacidad de respuesta,” dijo Federico Trucco, CEO de Bioceres tras sellar el “acuerdo de complementariedad científico-productivo para el desarrollo de productos con menor huella ambiental en Argentina y Brasil” entre ambas empresas.
Desde el lado de Havanna, destacaron el objetivo de que el elemento ambiental tenga relevancia en su ecuación de negocios. “Los avances científicos que fomentan el cuidado del ambiente y los recursos naturales son claves para el futuro y deben ser incorporados paulatinamente dentro de las lógicas de producción del mercado alimenticio. Este acuerdo con Bioceres nos pone en sintonía con los nuevos paradigmas que se vienen y nos desafía a diseñar en conjunto productos sustentables con los diferenciales que siempre nos caracterizaron: ricos, reconfortantes y de alta calidad”, dijo Alan Aurich, CEO de Havanna.
SEGUIR LEYENDO: