El Aporte solidario y extraordinario, más conocido como Impuesto a la Riqueza, generó ingresos por $ 223.000 millones al fisco, informaron desde la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), desde donde precisaron que según datos preliminares unos 10.000 individuos con patrimonios superiores a los $200 millones “cumplieron con las obligaciones previstas por la ley”.
Ese número de contribuyentes está 3.000 personas por debajo de los cálculos previos del gobierno y desde la AFIP dicen que “los vamos a ir a buscar para que paguen”.
De hecho, hace diez días Infobae había informado sobre el inicio de las inspecciones de la AFIP a empresarios que decidieron no pagar al impuesto. La agencia envió notificaciones en forma electrónica y presencial a personas que no hicieron el “aporte solidario” requiriéndoles, entre otras cosas, papeles de trabajo de sus Declaraciones Juradas, abuse de presentación, comprobantes de pago, detalle de los bienes gravados y valuaciones y documentación respaldatoria de los bienes informados.
Se trata de “un muy buen resultado; vamos a hacer todo lo necesario para que los que no cumplieron con su obligación hagan frente al pago del aporte”, aseguraron en la agencia recaudadora.
“Calculamos un universo potencial alcanzado de 13.000 contribuyentes, pero sabíamos que muchos iban a litigar y otros que, directamente, no pagarían. A esos últimos ya los estamos fiscalizando para garantizar el cobro del aporte, que es lo que tenemos que hacer”, destacaron.
“La mayoría de los contribuyentes alcanzados por el Aporte solidario y extraordinario cumplieron con su obligación. Los recursos generados serán fundamentales para hacer frente a las urgencias sanitarias y económicas que nos impone la pandemia”, dijo la titular del organismo, Mercedes Marcó del Pont.
Otros datos preliminares precisan que los contribuyentes que presentaron su declaración jurada y pagaron el impuesto representan el 80% del universo potencial estimado por la administración tributaria durante el debate parlamentario.
Además, y en referencia a los cerca de 3.000 aportes “de menos”, desde la AFIP señalaron que para asegurar que todos los contribuyentes alcanzados por el Aporte solidario y extraordinario, la agencia ya inició un número relevante de fiscalizaciones integrales a contribuyentes millonarios que omitieron completar las declaraciones juradas e ingresar los pagos correspondientes”.
A partir de procedimientos abierto por la Dirección General Impositiva (DGI) para analizar el patrimonio de quienes no cumplieron con sus obligaciones, el fisco tiene un plazo aproximado de 150 días donde el organismo está habilitado a solicitar información detallada.
El destino de los fondos
En cuanto al destino de los fondos recaudados, desde la administración tributaria dijeron que, según lo establecido por la ley, los recursos generados se destinarán directamente a financiar:
-Unos de $45 mil millones, cerca del 20% del total recaudado, para la compra y/o elaboración de equipamiento médico, elementos de protección, medicamentos, vacunas y todo otro insumo crítico para la prevención y asistencia sanitaria.
-Una suma similar, esto es, otro 20% de los ingresos preliminares, se destinarán a subsidios para las micro, pequeñas y medianas empresas, para sostener el empleo y las remuneraciones de sus trabajadores.
-A las becas Progresar les corresponderá una inyección adicional de otro 20% del total recaudado, destinados a reforzar el programa de ayuda estudiantes mediante un incentivo económico y un estímulo personal en todos los niveles de formación durante su trayectoria educativa y/o académica.
-Unos $33 mil millones, o 15% de la recaudación observada hasta el momento, será destinado Mejora de la Salud y de las condiciones habitacionales de los habitantes de barrios populares a través del Fondo de Integración Socio Urbana (FISU).
-Unos 55 mil millones, o 25% de los fondos, financiarán programas y proyectos de exploración, desarrollo y producción de gas natural, actividad que resulta de interés público nacional.
El origen
Cabe recordar que la ley 27.605, que estableció este Aporte Solidario, comúnmente llamado Impuesto a la Riqueza, aprobada en diciembre de 2020, estableció la aplicación que debe dar el Poder Ejecutivo los fondos recaudados. El impuesto surgió del diputado del “Partido Solidario” Carlos Heller, y tuvo el impulso del jefe de la bancada del Frente de Todos en la Cámara Baja, Máximo Kirchner.
Por el momento, las estimaciones sobre el destino de los fondos son preliminares. Desde la AFIP señalaron que la agencia “continuará con los procesos de fiscalización iniciados sobre quienes no presentaron sus declaraciones juradas” y que esperan “que a lo largo de las próximas semanas avancen en los juzgados las causas iniciadas por distintos contribuyentes millonarios para no pagar el aporte”.
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