El dólar en el mercado paralelo anotó su segunda rueda de avance consecutiva con una suba de $1 que lo llevó a los $143, mismo valor de fines de marzo pasado. El avance de la divisa en el mercado informal fue el movimiento más destacado en medio de cotizaciones planas de los bonos soberanos y una nueva caída del índice S&P Merval de la Bolsa porteña. El riesgo país, por su parte, subía 8 unidades a 1.586 puntos.
Con el avance de la cotización paralela, la brecha cambiaria con el dólar mayorista roza el 54%. El dólar MEP y el contado con liquidación, por otro lado, anotaron una leve baja a $143,04 en el primer caso y una suba también modesta, a $151,46 en el segundo. El MEP sube 2,1% en el año mientras que el liqui trepa 7,7% y el libre retrocede $23. Aunque se sostiene en niveles altos en términos históricos, el dólar informal está lejos del pico de $195 que tocó en octubre y todavía sin grandes sobresaltos.
El dólar oficial cotizó al cierre de hoy a $98,33 para la venta al público según el promedio de valor de mercado que informa diariamente el Banco Central.
Fuentes privadas del mercado estimaron que las compras oficiales totalizaron hoy poco más de USD 140 millones, con lo que en abril acumula unos USD 770 millones y en lo que va del año supera los USD 3.000 millones.
Con algo menos de volumen que ayer la plaza operó USD 246,1 millones en el segmento de contado. No hubo operaciones en el mercado de futuros del MAE y se pactaron unos USD 165 millones en el mercado de futuros Rofex.
En otro orden, la Bolsa porteña cerró con un descenso de 0,8% hasta alcanzar las 47.679 unidades en línea con las ventas pendientes desde la rueda anterior, ante la evidente prudencia de los inversores que desconfían en la marcha de la economía local y se preocupan por los alcances de una cruenta segunda ola de coronavirus.
En Nueva York, las acciones argentinas que cotizan fuera del país -american depositary receipts o ADR- mostraron también mayoría de bajas, con el papel de Transportadora de Gas del Sur y su retroceso del 3,5% a la cabeza. En tanto, Pampa Energía le siguió con un retroceso del mismo orden. En total, 13 de 21 papeles argentinos que cotizan en Wall Street sufrieron pérdidas este martes.
Las acciones “siguen en niveles de muy alta volatilidad. Se ven afectadas por la incertidumbre económica de largo plazo (acuerdo con el FMI) y por los altos niveles de presión tributaria sobre el sector privado. Lo seguimos viendo como opciones para ganar valor en un horizonte mayor a dos años”, señaló un informe de Quinquela Fondos.
El Gobierno impuso recientemente restricciones a la movilidad ante un fuerte incremento en los casos de Covid-19 que pone en peligro el sistema de salud y aumenta el riesgo sobre las debilitadas finanzas del país.
“Las acciones siguen en niveles de muy alta volatilidad. Se ven afectadas por la incertidumbre económica de largo plazo (acuerdo con el FMI) y por los altos niveles de presión tributaria sobre el sector privado” (Quinquela)
Mientras tanto, el ministro de Economía, Martín Guzmán, sigue con su gira por Europa para recibir apoyo en las negociaciones con el FMI y ver la posibilidad de reprogramar un próximo vencimiento ante el Club de París.
El riesgo país que elabora JP Morgan trepó 8 unidades hasta los 1.586 puntos, luego de haber perdido unas 30 unidades la rueda previa, en la que los bonos soberanos argentinos se contagiaron levemente de la suba de hasta 15% que experimentaron los títulos de Ecuador luego de la victoria de Guillermo Lasso, un candidato conservador y pro mercado, en las elecciones presidenciales del domingo pasado. Hoy, los títulos argentinos cotizaron “planos”, casi sin movimientos.
“Frente a la segunda ola de COVID, el Gobierno nacional se debate aún sobre qué tipo de cuarentena aplicar y por lo tanto qué tipos de medidas de asistencia debería imponer”, dijo la consultora Delphos Investment, luego de que en 2020 se estipularon pagos adicionales para los trabajadores más afectados y para quienes pertenecen a la economía informal.
Sostuvo que esto se afrontó “con emisión monetaria, con un impacto directo sobre la cotización de los dólares alternativos. Emitir nueva moneda sin respaldo se fue primero al dólar y luego a los precios (...)”.
Agregó que “el ala política ahora presiona para volver al ruedo con medidas similares, pero Economía busca aplicar un concepto más restrictivo de manera de contener el impacto adverso sobre las cuentas fiscales, y por ende sobre la asistencia monetaria del BCRA”.
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