Tras un trimestre difícil, abril será la prueba de fuego para testear el plan anti-inflacionario de Guzmán antes de las elecciones

El período enero-marzo cerraría en torno al 12%, de acuerdo a las mediciones privadas. Para lograr un nivel de inflación similar al de 2020, hacia adelante el IPC debería rondar el 2%. Qué auguran los analistas

Guardar
El ministro de Economía, Martín Guzmán, insiste con lograr su objetivo inflacionario de 29% para el 2021, pero los privados afirman que esa meta quedó obsoleta
El ministro de Economía, Martín Guzmán, insiste con lograr su objetivo inflacionario de 29% para el 2021, pero los privados afirman que esa meta quedó obsoleta

¿Quién dijo que la batalla está perdida? La meta inflacionaria del 29% prevista en el Presupuesto 2021 es extremedamente ambiciosa, prácticamente imposible de cumplir de acuerdo con la evolución de los precios en los primeros meses del año. Pero a lo que en verdad apuesta hoy el Gobierno es a que, en diciembre o, más precisamente, al momento de las elecciones, la inflación interanual se ubique bastante por debajo del 40%.

Con que 2021 cierre igual que el año pasado en materia de precios (36%), el ministro de Economía, Martín Guzmán, podrá mostrarse satisfecho. Habrá logrado desacelerar la carrera inflacionaria, que viene picando en punta desde los últimos meses de 2020 y no logra frenar. Para el Gobierno, frente a la inercia que dejó el final del año de pandemia sumado al efecto de la suba de las commodities, la batalla recién arranca. Y abril será el mes clave para demostrarlo.

Una fuente oficial reconoció a este medio que en el equipo económico estaba contemplado que el primer trimestre sería difícil frente a la inercia que venía registrando la inflación desde octubre pasado, sumada a la necesidad de liberar algunos precios que habían estado pisados durante prácticamente todo el año. Y confían en que las señales que comenzó a dar Guzmán en materia cambiaria ayudarán, junto con la moderación tarifaria y la previsión salarial, a ir frenando los precios a partir del segundo trimestre. “Acá lo importante es que el mercado crea este mensaje y los agentes económicos actúen en función de esas variables”, dijo la fuente.

“La estrategia del gobierno de moderar la depreciación del tipo de cambio oficial, dar aumentos de precios regulados por debajo de la inflación pasada y alinear las paritarias en función de la pauta del 32% va a lograr desacelerar la inflación en la previa electoral, pero no será suficiente para lograr la meta oficial del 29% para 2021. Para cumplir con la suba de precios planteada en el Presupuesto 2021, la inflación promedio mensual debería ser inferior a 1,7% a partir de abril, lo cual es poco probable producto de la elevada inercia”, manifestó en un reciente informe el director de la consultora Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina, al agregar que para ellos la suba de precios del 2021 será del 42,5% este año.

Los alimentos vienen liderando la suba del IPC desde los últimos meses, con aumentos por encima del promedio
Los alimentos vienen liderando la suba del IPC desde los últimos meses, con aumentos por encima del promedio

De acuerdo con el informe, el IPC GBA Ecolatina trepó 3,3% entre la primera quincena de marzo y el mismo período de febrero, por lo que prevén que la inflación en el tercer mes del año se ubique en torno al 3,5% y en 11% el acumulado del trimestre. “De este modo, la inflación se mantendrá por encima del 3% por sexto mes consecutivo. A los habituales incrementos de indumentaria y educación de marzo, se les suma el aumento en la tarifa del subte y taxis (CABA) e incrementos en telefonía, naftas, cigarrillos y prepagas. Asimismo, los alimentos y bebidas volverán a crecer por encima del nivel general”, destacó la consultora.

Para Gabriel Caamaño, de EcoLedesma, “la prueba de fuego” del Gobierno ya fue el primer trimestre. “Después, probablemente a partir de abril salgan a pisar todo para no llegar tan mal a las elecciones, pero hay que ver qué tan efectivo es eso y no será gratis, va a tener un costo muy alto”, dijo.

“Abril tal vez sea un mes en el que se pueda ver si la estrategia oficial de contener el tipo de cambio está sirviendo para frenar los precios o no” (Giorgio)

“La meta del 29% ya murió. La estrategia que están aplicando ahora y que reforzarán pisando más precios es para que la inflación no se les vaya más arriba que la del año pasado, para que eso no quede en evidencia antes de las elecciones”, agregó Caamaño. Si a partir del cuarto mes del año la inflación mensual ronda el 2% -algo que hoy luce improbable-, la inflación en el año alcanzará al 34%.

En Econviews, las estimaciones para marzo ubican la inflación en el rango del 3,5 a 3,8%. Consultada por este medio, la economista de la firma Lorena Giorgio sostuvo que “abril tal vez sea un mes en el que se pueda ver si la estrategia oficial de contener el tipo de cambio está sirviendo para frenar los precios o no”. Planteó además que hay que mirar de cerca qué ocurre con las audiencias públicas en materia de tarifas y analizar también cómo inciden en la inflación mayorista los aumentos de luz y gas a las empresas. Según Giorgio, “para decir que el gobierno está empezando a tener éxito en su plan, en abril debería verse un número más bien cercano al 3%”, que si bien igualmente sería alto, al menos mostraría una senda de desaceleración.

“Para terminar el año en 29%, tenemos que tener meses con registros de 2% o incluso por debajo, que fueron números que se registraron solamente en la pandemia, con lo cual resulta difícil creer que este año, que va a ser de recuperación, de elevado gasto electoral, y de recuperación salarial, se pueden lograr”, remarcó la economista.

Matías Carugati, de Seido, coincidió: “Me parece difícil que se logre volver a los registros de algunos años atrás (2% mensual). El ´nuevo normal´ está en torno al 3%, lo cual implica una velocidad anualizada de casi 43%. En efecto, la mayoría de las proyecciones está incluso por arriba de eso, en torno al 48%”, dijo.

Por su parte, Guido Lorenzo, de LCG, sostuvo que para ver una tendencia de baja de la inflación sería necesario primero que abril muestre un alza de precios menor a marzo, y que luego ese freno se confirme en mayo. Respecto de las metas, la del Presupuesto ya es inviable porque marzo debería haber mostrado una suba de precios del orden del 2%. Pero para alcanzar una cifra más o menos razonable, dijo el economista, debería primero converger al 3% en abril, y que luego se ubique por debajo del 2%. “Con eso -remarcó Lorenzo-, el mercado empezaría a creer, más allá del número de inflación anual, que hay un proceso de desinflación. Mientras se mantenga por encima del 3%, es difícil el objetivo que se plantea el ministro”.

SEGUIR LEYENDO

Guardar