En un contexto en el que el Gobierno continúa luchando contra la inflación, que sigue siendo la segunda más grande de América Latina, el ex Ministro de Economía Hernán Lacunza responsabilizó a las autoridades nacionales por la situación e hizo una particular comparación para criticar las acciones del oficialismo frente a esta realidad.
Sucede que, luego de conocerse el dato del índice de precios de enero, que alcanzó el 4%, las consultoras que relevan precios estimaron que la inflación para el mes de febrero se ubicará entre 3,3 y 3,9%.
Al participar del programa Verdad-Consecuencia en TN, el ex funcionario dio su opinión sobre las razones que generan el aumento general de precios. “Creo que el Gobierno no tiene un buen diagnóstico ni una buena terapia respecto al tema de la inflación, que tiene que ver con la emisión del año pasado, porque cuando se financió el Estado con la ‘maquinita’, el Gobierno ‘canchereaba’ diciendo que podía emitir sin generar inflación”.
Y graficó: “Es como ir a una fiesta clandestina hoy y a la noche hacerme el hisopado. Me va a dar negativo porque hay un tiempo entre el contagio y las consecuencias. Acá es lo mismo: vos emitís hoy y la inflación va a aparecer en seis meses. La inflación que tenemos actualmente es la que produjimos emitiendo dinero en el invierno pasado”.
En este sentido, remarcó que el aumento de los precios “ya no es un error de los consultores o de los analistas”, porque los datos “del último trimestre da un 60% anualizado y hace 8 meses era del 30 por ciento, entonces, está corriendo al doble”.
“Cuando dicen que es multicausal, que es una palabra que a veces la usan como un eufemismo, no está dando en la tecla. Yo veo a la secretaria de Comercio, a Paula Español, que tiene que recorrer los comercios controlando los precios, es una imagen que me hace pensar en alguien que tiene que podar en el Amazonas, es inabarcable”, señaló.
Además, el economista también cuestionó a quienes dicen que la administración de Cambiemos “no emitió e igual generó inflación”, y explicó que eso ocurrió “porque lo que la genera es el desequilibrio, y cuando bajó la demanda de pesos, fuimos todos a comprar dólares”.
Por otra parte, también desestimó la denuncia del presidente Alberto Fernández contra Mauricio Macri por el préstamo que le otorgó el Fondo Monetario Internacional (FMI) a la Argentina, al considerar que “cuando se usa una prosa demasiado adjetivada, es porque se necesita edulcorar el lenguaje, y entonces se utilizan términos grandilocuentes como malversación”.
“Traer a colación este tema tres años después, me parece que es más bien una necesidad política porque no tienen nada para el presente ni para el futuro, entonces revuelven el pasado con dos etiquetas que pegan rápido en la gente, que son el Fondo y la deuda, que tienen una connotación negativa en la memoria colectiva de la gente. Es para hablar un rato de eso, porque, después, ¿cuál es la acusación?”, se preguntó.
Para Lacunza, “es difícil que haya problemas” con ese acuerdo e insistió en que el país fue “al Fondo porque se le cortó el crédito, ya sea por el futuro que se venía o por el pasado”. Pidió “medir la calidad de una decisión en función de las alternativas que había y no de las hipótesis”.
Si bien reconoció que pudieron haber existido “fugas simultáneas” a partir del préstamo, ratificó que “el dinero se usó para pagar deuda en pesos y en dólares”.
“La fuga es por la desconfianza del peso. En el primer gobierno de Cristina (Kirchner), entre 2008 y 2011, la deuda no subió casi nada porque había superávit, pero en esos años se fugaron 70 mil millones de dólares. Puede haber fuga sin deuda y deuda sin fuga”, ejemplificó.
Por último, Lacunza cuestionó la vacunación de algunos miembros del Gobierno, principalmente de su sucesor, Martín Guzmán, y aseguró que él, “en su lugar, hubiera elegido no” aplicarse esas dosis de la Sputnik V.
“A favor del ministro actual, puedo decirte que me imagino la situación: la secretaria entra al despacho, le dice ‘te vinieron a vacunar. Orden del médico presidencial. Burbuja’. Uno, cuando es ministro, no puede estar cuestionando cada cosa. Distinto es su gabinete, ahí es menos creíble porque es gente joven y ni siquiera es su segunda línea, es como la tercera o cuarta”, cerró.
SEGUIR LEYENDO: