El Gobierno dispuso un aumento en las tarifas de electricidad para empresas y comercios, que dejarán de recibir tarifas subsidiadas. Según explicaron en la Secretaría de Energía, la medida busca corregir un “tratamiento desigual” en el costo de la energía eléctrica que había entre usuarios de más de 300 Kv diarios.
La medida fue establecida por la Resolución 131/2021, firmada esta semana y que será publicada en el Boletín Oficial. En la resolución, se subdivide la categoría de usuarios de más de 300 Kv (que se conoce como GUDI, por Grandes Usuarios de la Distribuidora) en dos grupos: general, por un lado, y organismo y entes públicos, por el otro, excluyendo a las instituciones públicas que prestan servicios de salud y educación de los tres niveles del Estado, que seguirán con la tarifa subsidiada.
Según los datos de la Secretaría, en la Argentina existen al menos 2.900 grandes consumidores de energía eléctrica que tenían un subsidio que significaba un “diferencial de costos”
A partir de marzo y hasta el 30 de abril, los nuevos precios de referencia para estos grandes usuarios pasarán de $3.042 a $5.748 para las horas pico; de $2.911 a $5.500 para el resto de las horas; y de $2.779 a $5.251 para las horas valles. Son subas de 89 por ciento. En tanto, organismos como escuelas, hospitales y universidades públicas seguirán dentro del esquema de tarifa subsidiada.
Según los datos de la Secretaría, en la Argentina existen al menos 2.900 grandes consumidores de energía eléctrica —sobre un total de 650.000 pequeños y medianos comercios, talleres, industrias y prestadores de servicios— que tenían un subsidio que significaba un “diferencial de costos” y un beneficio con respecto a sus competidores en la provisión de los mismos bienes y servicios.
De acuerdo al detalle, estas industrias beneficiadas iban desde fábricas automotrices hasta grandes espacios comerciales, incluso petroleras. “Hemos tomado esta medida para remediar inequidades que provocaban distorsiones en el costo de la electricidad entre empresas de similares tamaños y actividades, algunas de las cuales pagan el precio monómico y no tenían acceso a la tarifa subsidiada, de la que gozaban sus competidoras”, señaló el secretario de Energía, Darío Martínez.
Con todo, desde el Gobierno aclararon que la medida no alcanza a los 15 millones de usuarios del servicio de distribución de energía eléctrica por redes, ni en las 650.000 pymes, comerciales, industriales y de servicio, y remarcaron que solo involucra a unos 2.900 grandes usuarios que consumen más de 300 Kv diarios abastecidos por las distribuidoras eléctricas. De esta forma, pasarán a pagar el mismo precio de la energía eléctrica que el resto de las empresas de similar tamaño y consumo de electricidad.
Escuelas, hospitales y universidades públicas seguirán dentro de la tarifa subsidiada
“Hemos mantenido expresamente a escuelas, hospitales y universidades públicas dentro de la tarifa subsidiada, otorgándole el tratamiento diferencial que les corresponde por la jerarquía e importancia social de la actividad que desarrollan”, agregó Martínez.
Aunque aun no fue calculado el impacto, que dependerá del nivel de recuperación de la actividad y del consumo, desde la secretaría adelantaron que estas correcciones permitirán generar un importante ahorro fiscal.
Seguir leyendo