El fin de semana largo cambió ayer las reglas del juego. Por eso las grandes manos se transformaron en vendedores de bonos en dólares y de dólares para hacerse de pesos y colocarlos en cauciones a 7 días a una tasa promedio de 34% anual. Esta situación alivió el trabajo del Banco Central que, además de acudir a las recomendaciones, los “telefonazos” y advertencias de inspecciones a través de la Comisión Nacional de Valores, tuvo que vender USD 19 millones nominales del AL30C equivalentes a USD 7 millones billete. El Central los vende a $ 2 por debajo de cualquier otra oferta. De esta manera, cada día obsequia a los compradores casi $ 40 millones para controlar a los dólares alternativos.
De esta manera, el contado con liquidación operó USD 53,2 millones y bajó 48 centavos a USD 149,75 en el circuito del AL30. Los que operaron con el GD30C, que no tiene la limitación de mantener un saldo comprador que no exceda de USD 100 mil nominales semanales (USD 38 mil en billetes) lo pagaron a $ 154,60 un precio 40 centavos inferior al del día anterior.
El dólar MEP o Bolsa, operó USD 22,7 millones y bajó 25 centavos a $ 149,75. En el circuito libre, quedó en $ 150,95.
El que preocupa es el dólar mayorista que se está atrasando. “Se viene un ancla cambiaria para contener la inflación”, dijo un operador, “ya no se preocupan por ocultarlo”. Razón no le falta. El dólar que rige el comercio exterior, aumentó 10 centavos a $ 88,37. En tres días el peso se devaluó 36 centavos. A esta altura de la semana pasada esa devaluación sumaba 50 centavos. La tasa de devaluación que va entre el lunes y el miércoles marca un ritmo de 25% anual. Por supuesto, en Economía aprovecharán los días del fin de semana largo para acentuar el atraso. Al revés de lo que sucedía antes que, tras los feriados largos, el primer día hábil acumulaba una devaluación de más de 40 centavos, esto podría no ocurrir el miércoles que viene. Observar lo que hará el Banco Central ese día, será un buen test para ver lo que se viene en materia cambiaria.
La mala noticia vino de Chicago. Este ritmo de desaceleración devaluatorio ahora enfrenta una caída de la soja de 3,56% que la volvió a colocar por debajo de los UDS 500 por tonelada al cotizar a USD 497,34. En la semana, la soja llegó a valer USD 510. La diferencia para un productor que soporta una retención de 33% es importante y, si se le suma el atraso cambiario, las estimaciones de rentabilidad deberán ser recalculadas.
En tanto el “blue” o dólar libre, siguió en baja por la sobreoferta de dólares que tiene un mercado tan chico. Bajó $ 1 a $ 151 y se vieron en el mercado muchos cables en dólares que llegaron de Chile y Paraguay que hacen evidente que hay un proceso de fuga de capitales donde una parte retorna para hacerse de pesos y afrontar costos. Esos cables orientan las miradas a las fronteras.
Los bonos con ley extranjera, siguieron en baja y el riesgo país aumentó 9 unidades (+0,6%) a 1.459 puntos básicos. Otro mercado que pagó las consecuencias de la toma de ganancias en Wall Street fue la Bolsa de Buenos Aires que negoció apenas $ 646 millones. El S&P Merval, el índice de las acciones líderes, cerró con una caída de 0,62% en el mínimo del día. CableVisión (-2,59%), Central Puerto (-2,14%), Pampa Energía (-1,99%) e YPF (-1,68%) fueron los que motorizaron la baja del S&P Merval.
Los ADR’s -certificados de tenencia de acciones que cotizan en dólares en la Bolsa de Nueva York- también padecieron una brusca caída de negocios. Las transacciones fueron de $ 1.402 millones. Hace unos días habían operado $ 2.400 millones.
Los ADR’s argentinos tuvieron una rueda negativa. Las bajas más pronunciadas fueron las de YPF (-3,42%) y Grupo Financiero Galicia (-1,62%). Entre los ganadores se destacaron Loma Negra (+2,98%) y Corporación América (+1,69%).
Los plazos fijos indexados siguen sin detener su crecimiento. Cada vez son más atractivos para los inversores que descreen que la inflación pueda ser controlada y abandonan los plazos fijos para pasarse a esta modalidad. Entre el jueves y viernes de la semana pasada crecieron $ 1.256 millones, es decir 1,75%. El ritmo de crecimiento proyectado adelanta que el monto de depósitos indexados podría aumentar más de 20% en los pocos días hábiles de febrero.
Por ahora, con el dólar calmo, las mentes están en modo pesos a 7 días vía cauciones, es decir colocando el dinero en el mercado a través de un agente de Bolsa o en un fondo de inversión de un banco.
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