En la industria láctea de capital nacional se mostraron molestos por lo que entienden un destrato del gobierno nacional ya que no fueron invitados al encuentro en Casa Rosada entre la administración nacional y el sector empresarial en busca de un acuerdo de precios y salarios.
Fuentes del sector señalaron que “llamativamente las empresas productoras de leche del mercado doméstico y de capitales nacionales no fueron invitadas a la reunión” y a partir de esto explicaron que hay “sorpresa” en esta ausencia “dada la importancia de este producto en la canasta familiar”.
Pero el reclamo desde los sectores vinculados a la producción láctea no sólo tiene que ver con que no fueron invitados al encuentro sino que sí estarán presentes representantes de las empresas extranjeras que operan en la Argentina. “Una anunció que se va del país en los próximos meses y la otra representa apenas el 2% del mercado lácteo argentino”, detallaron.
A la hora de explicar este “destrato” de parte de las autoridades nacionales, desde las empresas lácteas entienden que una posible razón son las discusiones respecto del abastecimiento de leche.
“Es posible que la ausencia sea producto de las arduas discusiones que se están produciendo dentro del sector (CIL), y con el mismo gobierno, relacionadas al abastecimiento de leche y derivados en el mercado local. Es que, motivadas por el aumento de los precios lácteos internacionales y la devaluación del peso de los últimos meses, las empresas exportadoras de leche y subproductos están impulsando una puja por la estacionalmente decreciente producción de materia prima local, lo que provocó una inesperada y fuerte suba de precios de la leche cruda”, agregaron las fuentes consultadas.
El problema que dicen tener es que los aumentos en los precios de la leche a los productores “no puede ser refrendados” en los productos que llegan a las góndolas porque están dentro del régimen de precios controlados por el Gobierno.
“Como consecuencia de esta situación, la de no poder trasladar los precios, ya comienza a observarse una incipiente tendencia de desabastecimiento al mercado local. Sin embargo, a pesar de todo esto, nadie convocó a las compañías que producen leche fluida para el mercado interno”.
Además, desde las compañías fabricantes de productos lácteos de capital nacional explican que la situación de unas empresas y de otras son “sustancialmente diferentes. La estructura de costos de las que abastecen al mercado local, en materia laboral, de producción y de distribución ventas, no son ni remotamente comparables a los costos de las empresas exportadoras de cuasi commodities o monoproductos”.
A partir de esto, desde el sector señalaron que “mientras el programa de precios locales controlados registre aumentos muy inferiores a los aumentos de los precios internacionales, potenciados por la devaluación del peso frente al dólar, la producción de leche nacional se direccionará, naturalmente, a la exportación, en detrimento del abastecimiento y consumo local y de las empresas que atienden a este mercado”.
La producción de leche durante el 2020 alcanzó los 10.575 millones de litros de leche, el valor más alto de los últimos 5 años con un crecimiento de 2,2% respecto de 2019. El dato surge del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA).
Aunque hay bastantes usinas lácteas repartidas por el país, buena parte de la producción se concentra en las provincias de Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos, con 19 empresas que representan alrededor del 60% de la producción total y son las que procesan leche proveniente de tambos de todos los niveles del estrato de producción (menos de 1.000 y más de 10.000 litros de leche diarios).
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