Walmart, la más grande cadena de hipermercados de EEUU y del mundo, profundizó una movida para pelear a cara de perro con Amazon, el más grande vendedor online del planeta.
Esta semana,Tom Ward, jefe de servicio al cliente de la empresa fundada en 1962 por Sam Walton, anunció el plan de aumentar el número de “centros de satisfacción” (imperfecta traducción de “fulfillment centers”, donde se completan físicamente los pedidos de los clientes), en lo que es un directo desafío a la estrategia de Amazon de instalar estos centros en locaciones cercanas a los grandes centros urbanos donde reside la mayoría de sus clientes, de modo de acortar los tiempos de “la última milla” de distribución física de los bienes que los clientes ordenan por el canal online.
Pero la extensa red de tiendas físicas de Walmart, cercanas a centros urbanos, es una ventaja competitiva sobre Amazon, que invirtió fuertemente en sus centros de distribución pero tiene sus grandes galpones de almacenamiento en lugares más alejados.
Walmart abrió el primero de este tipo de centros en 2019, cuando empezó a experimentar el concepto, al que sumó los Alphabots, robots con ruedas que toman los bienes de los estantes y completan las órdenes de los clientes, que pueden buscarlos simplemente pasando por centros de retiro y digitando su número de orden desde su Smartphone salir con el pedido en el baúl, o esperarla en su casa, para verificar cuán veloz es la “última milla” de Walmart.
Para desarrollar los Alphabots Walmart se asoció con Alert Innovation, una firma de robótica para manipulación de alimentos; Dematic, especializada en automación; y Fabric, una firma neoyorquina especializada en “satisfacción” de micro-pedidos.
De a docenas
Ward dijo que Walmart abrirá “docenas” de estos centros (el primero sería en Salem, New Hampshire, donde inició las pruebas) y luego “vendrán muchos más”. También señaló que seguirá empleando “humanos” para el manejo de productos frescos como carne y verduras. Los “Alphabots” podrán empacar “miles de bienes para nuestros clientes, incluidos productos electrónicos”, dijo Ward. “En pocos minutos –agregó- cada pedido estará listo para que el cliente lo pase a buscar o el chofer de distribución se lo lleve a domicilio”.
El desarrollo de los Alphabots empezó en 2019, cuando Walmart se asoció con Alert Innovation, una firma de robótica para manipulación de alimentos; Dematic, especializada en automación; y Fabric, una firma neoyorquina especializada en satisfacción de micro-pedidos.
Son todos conceptos que, en diferentes formas, desarrolló Amazon para convertirse en el más grande vendedor online, posición que reforzó en 2020, debido a la pandemia y los largos y masivos confinamientos de población. El crecimiento de la empresa fue tal que en solo 10 meses, precisó un documento presentado en la reciente edición del “Foro Económico Mundial” de Davos, la empresa de Jeff Bezos incorporó 427.000 nuevos empleados.
Prohibido dormir
Walmart no se quedó quieto. Durante la pandemia ajustó su canal online, por el que las ventas aumentaron 79% en el tercer trimestre de 2020. No fue gratis; sus costos aumentaron notablemente y la idea es que los “alphabots” los reduzcan 75%, estimó la consultora Jefferies, citada por el Financial Times.
Amazon tampoco se quedó quieta y el año pasado lanzó “Amazon Fresh”, una cadena de productos alimenticios cuyas nueve locaciones en EEUU funcionan como centros de distribución a la vez que compiten con supermercados y megatiendas como Walmart. Amazon no ha usado aún robots en esos centros, pero es pionero en el uso de robots en sus centros de distribución.
Ya antes de la pandemia, Walmart tenía a Amazon entre ceja y ceja e inició su proceso de automación y distribución online de alimentos, también con el objeto de sacarle más cuerpos de ventaja a Kroger, la segunda cadena minorista de alimentos por volumen de ventas. En 2019, Walmart había vendido USD 273.000 millones, Kroger USD 106.000 millones y Amazon USD 28.000 millones en alimentos, según reportó en ese momento Statista, un medio especializado en periodismo de datos.
Ya entonces Walmart había empezado el desarrollo de los Alphabots y una encuesta de la consultora Willard Bishop estimaba que 10% de las ventas de alimentos serían por el canal online y Bain & Co, otra consultora, precisaba que en Corea del Sur e Inglaterra la proporción ya llegaba al 15 por ciento.
La pandemia aceleró todo. Y Walmart quiere correr más rápido que la liebre de Jeff Bezos.
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