La Argentina terminó el 2020 con una inflación de 36,1% anual y quedó así dentro de los diez países con aumentos de precios más elevados en todo el mundo. De todas formas, dejó de ocupar un lugar en el podio de las tres inflaciones más pronunciadas a nivel global y pasó al sexto lugar.
De acuerdo a datos recopilados por el Fondo Monetario Internacional, el 2020 tuvo por cuarto año consecutivo a Venezuela como la economía con la inflación más alta, con un índice superior al 6.500%, claramente inmersa en un estadio hiperinflacionario en el que el ritmo de alza de los precios al consumidor que en el mundo se registra en un año y en la Argentina en un mes, se observa a diario, y a veces por hora desde 2015 y alcanzó un pico en 2018.
El segundo lugar le perteneció por segundo año consecutivo a Zimbabwe, que llegó a registrar un incremento en el costo de vida de 622%, tras el 255% que había tenido un año atrás. El tercer puesto, que en 2019 correspondió a la Argentina (ese año tuvo un IPC anual de 53,8%, el más alto para el país desde 1991), quedó para Sudán, con 141 por ciento.
Más abajo del podio quedaron, en cuarta posición, el Líbano (85%), Surinam (49,8%) y luego la Argentina con 36,1% que informó el Indec el jueves pasado. Completan los diez países con inflaciones más elevadas Irán (30%), Sudán del Sur (27%), Yemen (26%) y Haití (22 por ciento).
En el otro lado de la tabla, y todos con inflación negativa, se ubicaron del que menos tuvo al que más: Qatar, Puerto Rico, Emirátos Árabes unidos
Expectativas para el corriente año
Las proyecciones de suba de precios que hace el FMI para 2021 mantiene a la mayoría de los países que en 2020 integraron el top 10, aunque espera que algunos ingresen a ese grupo como Libia, Sierra Leona y Angola, ninguno con estimaciones de inflación superiores al 20% anual.
De acuerdo a datos recopilados por el Fondo Monetario Internacional, la Argentina quedaría cerca de integrar nuevamente en 2021 el trío de economías con inflaciones más altas del mundo
Tomando en consideración las perspectivas del sector privado (49,8% según el Relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central) y si los cálculos del FMI terminando siendo correctos la Argentina quedaría cerca de integrar nuevamente el trío de economías con inflaciones más altas del mundo ya que pelearía el tercer lugar con Surinam, de la que espera un 51% anual para este año.
Diversos factores explican una presión alcista del costo de vida en 2021. “Analizando cómo cerró el 2020 y los atrasos que dejó el año pandémico, podemos dar cuenta que la inflación se acelerará este año. Hasta dónde llegará dependerá, en parte, de las decisiones del Gobierno nacional y de cuán efectivas sean las mismas: cuanto se pospondrán la corrección de desequilibrios para llegar con la economía ‘andando’ al período electoral. Asumiendo que no hay un salto cambiario, pero que la brecha sigue alta, y un ajuste de tarifas que permite no expandir el gasto en subsidios durante este año, la inflación cerraría en torno al 45% en 2021″, concluyó un informe de la consultora Ecolatina.
La consultora Seido estima que esa cifra debería estar más cerca de 50%. El 2021 “va a ser complicado en materia inflacionaria: ajuste de precios relativos post pandemia, posibles presiones del lado salarial, posibles aumentos en precios regulados y una depreciación sostenida del tipo de cambio oficial hacen difícil pensar una inflación muy por debajo del 3,5% mensual. En términos anuales, creemos que el año cerraría con una tasa acumulada de, por lo menos, 50% anual”, dijo a Infobae el economista Matías Carugati.
Cuál es el plan antiinflación que piensa el Gobierno
Según adelantó el ministro de Economía Martín Guzmán en los últimos días, el Gobierno tomará en cuenta distintos elementos para combatir la inflación y que no sea en 2021 más alta que el 36,1% que cerró el año anterior.
“Hay que bajar la inflación de forma consistente. El problema de la inflación es multicausal y la abordamos como un esquema integral. Buscamos que la inflación se vaya reduciendo 5 puntos porcentuales año a año, con una estrategia que se enfoca en alinear precios clave de la economía y tener una política fiscal consistente”, anticipó el ministro.
Para eso, el Gobierno ya tomó algunas medidas de esquemas de control de precios. El primer fue anunciado esta semana con una renovación del programa Precios Cuidados, que tuvieron un aumento promedio de 5,6%. La otra pata de ese plan es Precios Máximos, que a diferencia del anterior, no fue una medida consensuada con las empresas de consumo masivo, y que implica el congelamiento de productos alimenticios y de limpieza.
Martín Guzmán dijo que se enfocará en alinear precios clave de la economía y tener una política fiscal consistente
En ese sentido, el segundo paso que apunta a cerrar la Secretaría de Comercio, en una mesa que también integran Economía y el Ministerio de Agricultura, será un acuerdo anual de precios de la carne. El Ejecutivo espera poder contar con una docena de cortes de distintas variedades (parrilleros, de olla y pulpa) con actualizaciones periódicas.
Por último, uno de los temas que aparecen como más espinosos para el Gobierno nacional, son las tarifas. La Casa Rosada apunta a tener preparado en los próximos meses un esquema de descongelamiento de los precios de los servicios públicos. Martín Guzmán repitió esta semana que su intención es mantener el gasto en subsidios en términos reales, lo que implicaría un incremento en las boletas de luz, gas y agua entre 40% y 60%, según estimaciones privadas.
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