La medida no solamente provocó sorpresa e incertidumbre, sino un amplio rechazo de las entidades de productores agropecuarios. El cierre de las exportaciones de maíz fue una mala noticia para el campo que atravesó junto a los demás sectores de la economía un 2020 muy complicado en medio de la pandemia del coronavirus.
Hace instantes, en declaraciones radiales, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas, Jorge Chemes, dijo que “la intervención en los mercados y en la comercialización lo único que genera es retracción y que el productor guarde su grano para tratar de resguardar su moneda, y pensar en otros cultivos más seguros y que tengan otra perspectiva. Todo esto que anunció el gobierno provoca el efecto contrario que el que tenemos que buscar”.
El dirigente en sus declaraciones hizo mención a lo que sucedió durante la época del kirchnerismo cuando se aplicaron medidas como las anunciadas ayer, inmediatamente hubo una menor oferta y suba de precios de los alimentos, porque se registró una menor siembra, menor producción, menores exportaciones y una baja significativa en el uso de tecnología por parte de los productores.
Pero además, la intervención oficial en los mercados provocó un enorme desacople entre los precios internacionales y los que percibe el productor, donde el trigo es uno de los ejemplos para ilustrar el impacto negativo que tiene una medida como la anunciada ayer por el ministerio de Agricultura. En la campaña 2009/2010 la siembra del cereal fue de 3,3 millones de hectáreas, transformándose en la más baja en más de un siglo, y con una cosecha de apenas 7,9 millones de toneladas que limitaron la disponibilidad de mercadería para exportar.
“Si bien uno siempre está con el fantasma sobrevolando de una medida oficial como la aplicada a partir de ayer , consideramos que no era necesario llegar a esta decisión que es lamentablemente todo lo contrario a lo que necesitamos, ya que apostamos a tener claridad, mercados abiertos, y un horizonte que nos brinde confianza para producir más”, señaló el dirigente de Entre Ríos.
Y agregó: “Es normal que para esta época del año tengamos de alguna manera algún presión de la demanda sobre la oferta. Este año sin duda el tema de la exportación desde los países asiáticos está derivando en una importante presión sobre la demanda, pero eso no significa que ponga en riesgo y genere un incremento en los alimentos del consumo interno, que es el miedo que tiene el Gobierno. El maíz, si bien tiene una una injerencia en la alimentación, no tiene una influencia para que los precios al consumidor se disparen”.
Por otro lado, el titular de CRA aseguró que el anuncio de ayer del Gobierno lo tomó por sorpresa, aunque había generando algo de inquietud entre los dirigentes y productores el discurso de hace menos de dos semanas de la Vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, cuando en un acto realizado en La Plata habló de los ROES (cupos de exportación) como un mecanismo para controlar los precios internos.
La repercusión en el accionar gremial
Al ser consultado sobre la reacción que tendrán los productores ante el cierre de las exportaciones de maíz, Jorge Chemes adelantó que el tema será analizado la semana que viene durante una reunión de la Mesa de Enlace y no descartó el inicio de una medida de fuerza.
“Yo creo que el anuncio que realizó ayer el gobierno será fundamental y de tratamiento urgente con las demás entidades y las bases de productores para ver las medidas que debemos tomar, porque los anuncios de ayer del gobierno en vez de generar una relación armoniosa con el gobierno, nos está demostrando realmente que el Gobierno nos quiere pegar en la nunca y nos vamos a tener que defender”, dijo el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas.
A todo esto, el dirigente que integra la Mesa de Enlace, señaló: “Lamentablemente en momentos donde se está tratando de hacer crecer al sector agropecuario, nos están llevando a un terreno de conflicto y a un escenario donde siempre tengamos problemas”.
Por último, desde la Asociación Argentina de Productores Autoconvocados ya anunciaron la realización de Asambleas en los primeros días del 2021. Las reuniones de productores que ya están confirmadas son las siguientes: 6 enero en Bell Ville, provincia de Córdoba; 7 de enero en Pergamino; 8 de enero en el cruce de la AO 12 y Ruta 34 y el 9 de enero en el cruce de la Ruta N9 y 178 en Armstrong, provincia de Santa Fe.
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