El precio del dólar volvió a subir en todos los segmentos. Una demanda que se reactivó después del pago de aguinaldos, junto con una oferta que se debilitó después del pago de compromisos en pesos propios de diciembre -tanto de empresas como particulares-, le dieron fuerte impulso al dólar libre, que en la víspera de las Fiestas saltó siete pesos o 4,6%, a $159 para la venta, su valor más alto en un mes.
Del lado formal, se extendió la devaluación gradual y el Banco Central volvió a sumar reservas a sus arcas. En lo que va de diciembre, la entidad acumula un saldo neto positivo de unos USD 410 millones por sus intervenciones, que se observan también en la recuperación de los activos internacionales.
“Era un valor que todo el mundo percibía como piso. Lógicamente, con el ‘solidario’ en los valores que está, ¿cuánto más abajo podía ir el dólar blue? Así que quien esté cobrando ahora y quiera ahorrar algo, parece lógico que si no se puede dolarizar por el mercado oficial lo haga aunque sea en el blue”, explicó el analista financiero Christian Buteler a Infobae.
“Pudo haber habido algo de efecto aguinaldo. En general diciembre es un mes con alto nivel de demanda de pesos, pero al ser un mercado tan chico y al haber hecho un recorrido bajista tan marcado, puede que con algo de liquidez por el medio aguinaldo lo hayan movido un poco”, dijo Leandro Ziccarelli, jefe de Research de ICB Argentina, a Infobae.
Desde el reciente piso de $146 el pasado 10 de diciembre, el dólar blue acumuló una suba de 13 pesos, un 8,9%
Ziccarelli advirtió que el dólar “solidario” le pone un límite a los dólares alternativos, “dado que los que puedan operar el mismo elegirían a igual o menor precio comprar blue sin ninguna restricción de cantidad. Indirectamente, esto también podría marcar un piso, de no quitarse impuestos al dólar oficial, para la baja de los dólares Bolsa”.
En ese sentido, el economista Gustavo Ber precisó que “los dólares financieros continúan buscando reacomodándose gradualmente al alza, toda vez que han quedado por debajo del dólar ‘ahorro’, y dicha situación de abaratamiento se percibe entre los operadores como circunstancial”.
Las paridades bursátiles terminaron con mínima tendencia mixta, en torno de los $141 para el contado con liquidación y el dólar MEP.
Crecen las reservas, aunque se amplía la brecha
En la plaza formal se extendió la gradual devaluación, monitoreada por el Banco Central. La brecha cambiaria entre el dólar libre y el mayorista, que subió once centavos, a $83,36, se amplió a 90,7 por ciento. El monto negociado en el segmento de contado (spot) sumó unos 171 millones de dólares.
“Fuentes privadas del mercado indicaron que el saldo positivo por la intervención del Central de hoy estuvo en el orden de los USD 45 millones, aproximadamente”, indicó Gustavo Quintana, operador de PR Corredores de Cambio.
Los activos internacionales del Banco Central suman un alza próxima a los USD 560 millones en diciembre, un saldo positivo que no se producía desde junio pasado, aunque entre julio y noviembre la pérdida acumulada fue de unos 4.882 millones de dólares.
Ecolatina advirtió que “aunque la caída se atenuó, no se revirtió el derrotero. Por lo tanto, aunque las tensiones en los mercados paralelos se relajaron, las posibilidades de una devaluación continúan latentes: mientras que el poder de fuego del Banco Central no se recupere, las chances de un salto cambiario permanecerán”.
“De la perspectiva de que faltaban dólares hemos pasado a otra en la que sobran pesos, y que lleva a una política más moderada en el planteo de la emisión. Las tasas de interés están por debajo de la inflación tanto para plazos fijos como para las Leliq, frente al pronóstico de que la inflación puede crecer un poco más en el verano según plantean los analistas”, analizó Luis Eduardo Fracchia, director del IAE de la Universidad Austral.
Datos macroeconómicos que ponen presión al dólar
El deterioro del saldo comercial y la amenaza de mayores restricciones a la actividad por un rebrote de los casos de Covid-19 en el país vuelven a poner en el centro de debate si hay dólares suficientes para reactivar la economía en 2021 y si el actual tipo de cambio es suficientemente alto como para estimular el ingreso de divisas.
Portfolio Personal Inversiones destacó que “en el mes corriente, la demanda de dólares fue mucho menor mientras que la liquidación de granos se mantiene en niveles parecidos, abasteciendo de más al mercado y permitiendo al Banco Central recuperar divisas”.
Pero las dudas subsisten una vez superada la estacional demanda de pesos de diciembre, cuando se prevé las negociaciones del Gobierno con el FMI por un plan de facilidades extendidas permanecen abiertas durante los primeros meses de 2021. Además, el INDEC reportó el martes un superávit comercial apenas de USD 271 millones, el más bajo desde agosto de 2018.
Si se debilita el superávit comercial y crecen los contagios de coronavirus, en los próximos meses aumentará la necesidad de emitir pesos para financiar el Tesoro
Los analistas del Grupo SBS consideraron que “hacia adelante, el equipo económico deberá evitar que tanto la brecha cambiaria como las expectativas de devaluación continúen erosionando el superávit comercial”, dado que “el balance comercial volvió a caer en noviembre y arrojó un superávit de apenas USD 271 millones, un 89% menor que el registrado en noviembre de 2019″.
“Somos cautelosos con el peso, al tener en cuenta que esta relativa calma cambiaria se da en un contexto de mayor demanda estacional, pero hay señales de alerta: 1) la emisión monetaria sigue siendo alta, 2) la inflación núcleo se aceleró al 3,9% mensual en noviembre y, 3) sigue latente la posibilidad de una segunda ola Covid-19 que presionaría a mayores estímulos del BCRA”, señaló el agente de liquidación y compensación Neix.
Seguí leyendo: