Desde mucho antes de que irrumpiera el nuevo coronavirus, turistas internacionales, fundamentalmente europeos, habían empezado a reservar plazas en localidades patagónicas para contemplar, este lunes 14 de diciembre, un eclipse total de sol, fenómeno que en la Argentina ocurre cada una o dos generaciones y esta vez se podrá observar en una franja de unos 100 kilómetros de ancho, desde la cordillera (Aluminé, Junín de los Andes, Piedra del Águila, Villa La Angostura, en Neuquén; Sierra Colorada y Valcheta en Río Negro) hasta lugares costeros, como San Antonio y Las Grutas, en la costa atlántica.
“Cancelaron, era muy difícil la entrada al país y ni hablar a las provincias; hoy en estos lugares de la Patagonia es muy difícil dar garantías a los europeos, no por mala voluntad, sino porque el país no tiene sistemas de salud suficientemente preparados para esto; va más allá de la pandemia, que dejó ver cuestiones que en tiempos normales no nos hubiéramos dado cuenta; debemos entender que somos un país subdesarrollado”, señaló a Infobae Alejandro Kuryluk, hasta hace poco secretario de Turismo de Villa La Angostura.
Lo sorprendente es que los extranjeros fueron suplidos por viajeros locales. En La Angostura, donde en principio el eclipse se podría ver en un 98%, la ocupación es buena y trasciende el evento. “Ya hay 50% de la capacidad de alojamiento reservada para enero y febrero, no creímos que se llegara al 30% de ocupación este verano; pero creo que podemos llegar a 70% en enero, contra 92% de enero de 2019”, dijo Kuryluk a Infobae. Pero quienes llegaron por el eclipse deberán adaptar sus planes. Mañana, La Angostura estará nublado y para observar el fenómeno deberán viajar unos 130 kilómetros, hasta Aluminé, desde donde se verá 100% del eclipse (la luna tapará totalmente el sol, será noche en pleno día) y donde, por ser estepa, es muy improbable que las nubes arruinen el espectáculo.
El lugar y el momento indicado
En Aluminé, Piedra del Águila y Junín de los Andes las reservas cubrieron entre 70 y 100% de la capacidad de alojamiento. “Está completo hace varios días. Desde el año pasado estaban completo, pero se cayeron porque eran internacionales y se volvieron a ocupar”, le dijo Martìn Rucci, secretario de Turismo de Piedra del Águila, al diario Río Negro. Las plazas allí son poco más de 200 y se estiran con el alojamiento en casas particulares. En Aluminé, en tanto, las plazas se cubrieron 70% desde los días previos, dijo el secretario de Turismo local, Martín Martínez.
Será la mejor semana turística del lugar desde el inicio de la pandemia. Quienes viajaron a contemplar el eclipse llegaron unos días antes y pudieron disfrutar opciones de pesca, rafting y lagos. Algo parecido ocurrió en Junín de los Andes, que además de belleza natural ofrece trekking, cabalgata y mountain bike. Es otro de los lugares al que podrían desplazarse quienes planeaban contemplar el fenómeno desde La Angostura.
Cuestiones logìsticas
El evento astronómico permitió constatar, también, algunas dificultades logísticas. Para quienes llegan de lejos, el principal aeropuerto es Bariloche (a la oferta de Aerolíneas al principal destino patagónico se sumaron las low cost Jetsmart y, desde ayer, Flybondi), en la provincia de Río Negro. “Cada gobierno provincial y municipal tiene sus protocolos, y como el de Río Negro es distinto al de Neuquén, es el primer escollo”, dijo Kuryluk.
Si por caso el viajero llega a Bariloche en avión, alquila un auto y toma la ruta 40, al ingresar a la ciudad puede pasar el retén dando sus datos si dice que está en tránsito por el lugar (para ir, por caso, a San Martín de los Andes), pero si se alojará en La Angostura debe registrarse en la App Cuidar de Neuquén, que es distinta a la de Río Negro, que usa la App nacional. Y si tiene más de 60 años, debe tener seguro Covid de la provincia. “No son complicadas, pero la gente tiene que dedicarle su tiempo”, dice Kuryluk, quien se entusiasma cuando habla del “Cruce de los Andes”, un evento internacional que, tras quince años de hacerse en otras localidades de la Argentina y Chile, volverá a La Angostura del 2 y el 6 de diciembre de 2021.
Ya hay 4.000 inscriptos, la mitad extranjeros, para un evento capaz de ocupar varios días el 100% de las 6.900 plazas que tiene Villa La Angostura, que podrían estirarse en 2.000 más si se regulan los alojamientos caseros. Para entonces, espera Kuryluk, la Argentina estará mejor organizada para recibir turistas europeos, más allá de la pandemia.
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