La industria es una de las actividades que ya volvió, aunque con una alta heterogeneidad, a los niveles de producción prepandemia. Incluso, en septiembre marcó la primera suba interanual del año, con un crecimiento del 3,4% respecto del mismo mes del año pasado. Sin una segunda ola de COVID, las expectativas para el 2021 son auspiciosas.
Pero que la Argentina vuelva a crecer no sólo depende de la cuestión sanitaria. Los industriales hoy no sólo tienen incertidumbre respecto de qué pasará con el virus, sino también de cómo el Gobierno manejará la crisis macroeconómica y cuáles serán las señales que se otorgarán para impulsar la inversión. Con medidas que se fomentan desde el Congreso, como el impuesto a la Riqueza, o previamente la Ley de Teletrabajo, o la Ley del Etiquetado, contrarias al desarrollo de los negocios y a la generación de empleo, hoy el empresario industrial tiene más dudas que certezas sobre el rumbo económico que plantea el Gobierno.
En este contexto, la UIA realizará desde este lunes la 26° Conferencia Industrial, que no tendrá como sede el habitual Golden Center de Parque Norte de los últimos años, sino que se realizará durante cuatro días consecutivos en distintas provincias del país. La apertura será este lunes 30 en la ciudad de Buenos Aires -se transmitirá desde el edificio de la entidad-, el martes le tocará el turno a la provincia de Jujuy; el miércoles a Santa Fe; y el jueves se hará el cierre en la fábrica de Quilmes, en la provincia de Buenos Aires, con la presencia del presidente Alberto Fernández.
“Buscamos que todas las voces hicieran la voz de la UIA. Es una conferencia federal que tiene el desafío de estimular la conectividad en todo el país. Quisimos convertir el hecho de la virtualidad en una virtud y no una carencia”, destacó el presidente de la conferencia y vicepresidente de la central fabril, Daniel Funes de Rioja, el jueves pasado, durante una rueda de prensa.
Es una conferencia federal que tiene el desafío de estimular la conectividad en todo el país (Daniel Funes de Rioja)
Los paneles atravesarán cada uno de los tópicos sobre los cuales la entidad viene trabajando desde hace varios años con el propósito de contribuir a mejorar la competitividad, y que hoy cobran especial relevancia: tecnología e innovación; un sistema tributario que promueva la producción y el federalismo; una política exterior que impulse las exportaciones; el futuro del trabajo y los desafíos para recuperar el empleo formal; la necesidad de realizar un pacto entre empresarios, trabajadores y el Estado; y una macroeconomía que genere previsibilidad, inversión y empleo.
Son todos ejes sobre los que la entidad tiene propuestas concretas que les han acercado a los funcionarios en el último tiempo. La pandemia este año cambió las prioridades y la agenda pública estuvo concentrada en cómo lograr que, tras la cuarentena, la economía tenga el menor impacto posible. Pero con la gran mayoría de los sectores activos, y una expectativa favorable respecto de la llegada de la vacuna, el sector privado busca ahora definición de políticas que le permitan a la Argentina crecer de forma sostenida.
“Estamos viendo que el año que viene va a haber un rebote de entre 5 y 7% del sector industrial, pero este repunte tiene que servir para que se inicie el debate de los temas fundamentales de más largo plazo, de modo tal de que el crecimiento se sostenga”, afirmó a Infobae el presidente de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (Uipba), Martín Rappallini. Según él, hay que trabajar sobre la cuestión laboral, el financiamiento y la alta carga impositiva que desalientan la producción y la exportación. “Hoy tenemos un dólar competitivo; no es super alto, pero tampoco está atrasado. Pero hay que avanzar en sacar retenciones y aumentar reintegros. Las empresas exportan impuestos”, agregó.
Qué pasará con el tipo de cambio es hoy una gran preocupación para cualquier empresario. La amplia brecha que persiste entre el dólar oficial y las cotizaciones paralelas -entre 80 y 90%- sumado a que el Banco Central (BCRA) tiene escasas reservas afectan fuertemente las expectativas y, por ende, generan distorsiones en los negocios, falta de productos y subas de precios. La cúpula de la entidad, liderada por Miguel Acevedo, se reunió el miércoles pasado con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y éste fue uno de los temas de debate.
Estamos viendo que el año que viene va a haber un rebote de entre 5 y 7% del sector industrial (Martín Rappallini)
El ministro, quien recibió a los industriales junto al representante del Cono Sur ante el Fondo Monetario, Sergio Chodos, y el secretario de Energía, Darío Martínez, les aseguró lo que ya dijo varias veces públicamente: “Quédense tranquilos de que no vamos a devaluar”. Reconoció que le preocupa la brecha, que fue generada por fondos que quisieron salir del país, y que sigue trabajando junto a su equipo para seguir achicándola. Vale recordar que durante octubre la diferencia con el dólar blue alcanzó al 150%, y hoy no llega al 100%. El acuerdo que el Gobierno está negociando con el Fondo para despejar vencimientos por USD 44.000 millones ayudaría, creen en Economía, a seguir calmando los mercados.
Pero más allá de los dichos de Martín Guzmán y sus expectativas, la situación macroeconómica argentina es endeble. La pandemia llevó el déficit a 8 puntos del producto, la inflación se aceleró en los últimos meses y el escenario cambiario aún está lejos de ser el ideal. Y eso es lo que inquieta a los industriales, que además perciben un Gobierno que no tiene claro el rumbo y que da señales contradictorias permanentemente.
El Impuesto a la Riqueza es un ejemplo de ello. Desde todo el arco empresario se cuestionó el proyecto y desde la UIA se pidió que no se grave el patrimonio productivo con este tributo porque ello implicaría dejar de invertir para hacer el aporte, pero finalmente las sugerencias no fueron tenidas en cuenta. Y este martes el Senado tratará la iniciativa en recinto y se descarta será convertida rápidamente en ley. “Este impuesto tiene a la UIA en llamas. Hemos sido muy prudentes, pero la gente está con mucho desagrado. Planteamos que estamos dispuestos a contribuir, pero con este aporte financiarán inversiones de YPF”, se quejó un miembro de la entidad, quien agregó que se le pidió a Guzmán que “al menos las empresas que invierten, por ejemplo en gas, tengan las mismas condiciones que la firma estatal.
Miguel Acevedo, Luis Betnaza, Funes de Rioja, Guillermo Moretti y Carolina Castro debatieron durante largo rato con el ministro sobre este “aporte solidario”, aunque a sabiendas de que esa discusión debía darse en otro lado. “Los ministros toman nota y prestan atención a los planteos que se les hace, pero luego nada cambia. El que manda es el Parlamento. Y estoy convencido de que desde el Ejecutivo no van a poner un límite. Son un socio minoritario”, enfatizó otro importante miembro de la UIA.
Acevedo fue claro al plantear, en la conferencia de prensa de la semana pasada, que “la relación más complicada hoy es con el Congreso” y que “hay que buscar consensos” porque “el sector privado es una parte importante de la sociedad, que invierte y genera empleo”. “Yo tengo la esperanza de que haya un giro, pero todavía ha habido esta incoherencia. El Gobierno tiene que entender que hay que apoyar al sector productivo. De lo contrario, van a tener más problemas el año que viene, gente que en lugar de invertir se va a ir”, aseguró otro industrial, y agregó: “El 2021 será clave, ahí sabremos si las medidas que tomaron este año por la pandemia son extraordinarias o no”.
Los ministros toman nota y prestan atención a los planteos que se les hace, pero luego nada cambia (fuentes de UIA)
“No me preocupa. Tenemos que acostumbrarnos a trabajar con un gobierno de coalición. Va a llevar tiempo”, disparó el santafesino Moretti, al tiempo que se mostró optimista respecto del 2021: “En Santa Fe estamos arriba de la prepandemia. El 2021 va a ser un buen año. Si el Gobierno cumple y devalúa en línea con la inflación, será auspicioso”.
También los textiles festejan la recuperación de la actividad y creen que el año próximo será positivo. La utilización de la capacidad instalada de octubre ya superó el promedio del 2018 y 2019, y disfrutan del mercado que pudieron recuperar tras las restricciones a la importación. Admiten que “el impuesto a la riqueza no le gusta a nadie” y que “medidas como la doble indemnización y la prohibición de despidos deben eliminarse” tras la salida de la emergencia, pero siguen apostando al Gobierno, cuando otros sectores ya están desencantados. Propio de una UIA bien heterogénea.
Participarán de la conferencia los ministros Guzmán; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; de Trabajo, Claudio Moroni; y del Interior, Eduardo Wado de Pedro. Además, expondrá la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont. También estarán presentes los gobernadores bonaerense, Axel Kicillof; de Jujuy, Gerardo Morales; y de Santa Fe, Omar Perotti, además del jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien asistirá al acto de apertura de este lunes. Para el cierre, está convocada la canciller de Alemania, Angela Merkel, y el jefe de Estado.
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