El nuevo presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) Natalio Mario Grinman, expresó su rechazo al nuevo impuesto a la riqueza que sancionará el Senado la semana próxima y dijo que el Gobierno debe tomar medidas para volver a generar confianza.
Grinman,quien sucederá a Jorge Luis Di Fiori, forma parte de la entidad en 1985 y se desempeñaba desde 2016 como secretario.
“Reafirmamos los principios de la libertad, en el marco de un sistema democrático, con respeto por las instituciones de la república y la iniciativa privada”, fueron sus primeras palabras como presidente, que repitió hoy a Infobae.
“Nosotros creemos en la defensa de la libertad, en la iniciativa privada, en el libre mercado, somos una cámara que está a punto de cumplir 100 años, hemos sobrevivido a la historia más dramática de la Argentina, hemos trabajado con todos los gobierno, nos gusta la democracia y creemos en este sistema”, señala el Grinman.
Pero aunque sea una cámara centenaria, sus hombres y mujeres no lo son y están viviendo una circunstancia única. El sector que representa la cámara engloba al 65% del PBI de la Argentina “y hace 10 años que venimos de recesión y estancamiento. Podemos salir de esto, pero con las medidas correctas”.
A la hora de hablar de esas medidas, el presidente de la CAC no hizo referencia a una rebaja impositiva “que nadie cree que pueda suceder”, sino a un trabajo que tiene más que ver con los climas de negocios. “Nosotros representamos a muchas empresas, muchas de ellas son de las más importantes del país, y todos piden lo mismo: que haya calma, confianza, que el Gobierno genere un clima de confianza, que se terminen las diferencias internas. Nosotros entendemos que puede haber discusiones, pero que las resuelvan internamente”.
“No se trata de alcanzar unanimidad de opinión en todos los temas, de negar u ocultar las naturales tensiones propias de la vida democrática; pero sí de alcanzar consensos básicos”, sostuvo, y expresó que la CAC hará oír su voz “con respeto, pero con firmeza, confiamos en Alberto Fernández y lo vamos a acompañar. Somos una cámara de propuestas, no de protesta”.
Pero, además de la confianza, Grinman hizo referencia a los últimos movimientos del Gobierno en lo que tiene que ver con el Impuesto a la riqueza y el uso de la Ley de Abastecimiento. En ambos casos la Cámara ya se había mostrado opuesta a la medida. “La CAC se opone al tributo por un tema conceptual, no se puede seguir inventando impuestos, es ideológico”, dijo. Frente a la pregunta respecto a que sólo 12.000 personas tengan más de $ 200 millones si es porque la Argentina es un país pobre o hay demasiada evasión impositiva, no dudó: “las dos cosas. Las dos respuestas son afirmativas”.
“La Argentina es un país con una enorme cantidad de recursos, pero que no valen nada si no los explotamos. Hemos perdido muchos trenes, necesitamos recrear la mística de trabajo de los inmigrantes, de la cultura del trabajo, de la educación”, señaló
Respecto de la ley de abastecimiento y la novedad del apoyo del sector de la construcción, Grinman dijo que desde la CAC “creemos en los controles” pero buscó marcar una diferencia al señalar que “hay que entender el contexto. Si existe una maniobra especulativa es condenable. Nosotros, nuestro sector, no es formador de precios y para que funcione necesitamos alta rotación y hoy faltan algunos productos porque los proveedores primarios no entregan”. Pero de todas formas dijo que “no es un delito proteger el patrimonio. El agricultor que guarda su producción a la espera de un mejor precio no está cometiendo ningún delito”.
“Hay que contextualizar, si a los productores se les dispara el dólar, si hay cepo, hay que entender las decisiones en ese contexto. Esto no quiere decir que protegemos a los inescrupulosos”, recalcó.
Seguí leyendo: