El feriado de hoy en Estados Unidos por el Día de Acción de Gracias, que se trasformará en un fin de semana largo para los norteamericanos que mañana continuarán su descanso y le restarán operaciones al mercado, le hizo un favor al Banco Central porque los dólares alternativos cayeron sin que tenga que intervenir.
La caída fue mayor en la apertura y se recortó sobre el final. “Es que las empresas salieron a vender dólares anticipadamente porque necesitan pagar sueldos y otros gastos de fin de mes y como el feriado norteamericano paralizará las operaciones de dólar Bolsa o MEP y contado con liquidación, se anticiparon a vender”, señaló Nicolás Rivas, operador de Buenos Aires Valores SA (BAVSA).
Por otra parte, la Comisión Nacional de Valores emitió una circular que reduce de 3 a 2 días el “parking” del dólar MEP. Es decir, facilita las operaciones porque al reducir el tiempo de tenencia de los bonos para operar este dólar, baja el riesgo y le da fluidez al mercado. El contado con liquidación seguirá con su parking de 3 días. La circular, además, limitó a los operadores al reducirles el campo de acción porque les impide tener saldo a favor en dólares en operaciones en bonos con cartera propia. Con esto, quiere reducir la demanda de títulos para operar en la plaza de dólares alternativos. Saben que la intervención del Central utilizando bonos de la deuda tiene un límite y por eso buscan reducir la demanda. Es que los operadores le habían tomado el tiempo a las intervenciones oficiales. Saben que en la media hora final, la autoridad monetaria vende bonos en dólares contra pesos y salían a comprarlos para hacerse de dólares días después.
El efecto del feriado norteamericano se reflejó en la caída del dólar Bolsa o MEP en $ 1,20 (-0,8%) a $ 146,68 con escasos negocios por USD 23,2 millones. El contado con liquidación tuvo un retroceso más suave de 47 centavos (-0,3%) a $ 150,52 con operaciones por USD 54 millones, casi la mitad de una rueda habitual. “El dato importante es que la brecha entre ambos dólares, que el día anterior se había reducido a 1,2%, aumentó a 2,62% que es una diferencia más real” señaló Rivas.
En la plaza marginal, el “blue” o dólar libre, tuvo escasas operaciones y los vendedores superaron a los compradores por lo que bajó $ 2 a $ 158 y quedó vendedor para hoy.
El Banco Central, a su vez, mantuvo su ritmo de devaluación y el dólar mayorista subió 8 centavos a $ 80,80. En esta oportunidad compró USD 15 millones porque los exportadores liquidaron algo más de lo habitual por la proximidad del fin de mes. Por eso, pudieron abastecer la demanda de los importadores y quedarse con un mínimo saldo a favor. Ante la estabilidad del oro y del dólar, estas compras permitieron que las reservas aumenten USD 14 millones a USD 38.746 millones. El día anterior habían padecido un derrumbe de USD 214 millones.
Los bonos en dólares con legislación extranjera tuvieron subas de hasta 1,5%, pero como también subieron los títulos del Tesoro de Estados Unidos, el riesgo país aumentó 11 unidades (+0,8%) a 1.380 puntos básicos.
La Bolsa, con 40% menos de negocios que el día anterior -se operaron $ 1.354 millones- tuvo una toma de ganancias que no impidió que el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, terminara con una leve suba de 0,03%. El mejor momento de la rueda fue a las 11.30 cuando tocó un máximo de 1,20%. A partir de ese momento comenzó un brusco descenso que se fue moderando a partir de la mitad de la rueda.
Transportadora Gas del Norte (+6,73%), la cementera Holcim (+5,91%) y Aluar (+3,77%) fueron los más favorecidos. La contracara estuvo en los papeles de YPF (-3,99%) y Cresud (-1,84%).
Los ADR’s argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron una rueda mixta. Los ganadores fueron Telecom Argentina (+3,02%), MercadoLibre (+2,85%) y Edenor (-2,39%). Los papeles de más retroceso fueron los de Corporación América (-4,09%), IRSA Propiedades Comerciales (-3,93%) e YPF (-2,63%).
La rueda de hoy no tendrá sorpresas, salvo la licitación de tres bonos por $ 90 mil millones para cubrir vencimientos de deuda de noviembre, de la que participarán solo inversores institucionales, particularmente bancos y empresas de seguros, porque a los inversores particulares esta inversión no les atrae. El resto de los mercados operará con montos reducidos porque no operarán las Bolsas de Estados Unidos que son la referencia del mundo. El mercado espera tranquilo el fin de mes porque sabe que diciembre será borrón y cuenta nueva. Se viene el mes más fatídico del año para los gobiernos argentinos.
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