Cede el Bitcoin, pero mantiene un alza de 150% en 2020 y sigue cerca del récord

El Bitcoin hace una pausa en su ascenso de 2020, luego de haber alcanzado el viernes un máximo de casi tres años, ya que los inversores siguieron adquiriendo la moneda virtual con la expectativa de que podría superar su máximo histórico de poco menos de 20.000 dólares.

El Bitcoin llegó a subir hasta USD 18.766,79, el valor más alto desde diciembre de 2017, aunque este lunes cede 0,5%, a 18.353 dólares. La criptomoneda venía de ganar un 17% la semana anterior, la mayor alza semanal desde junio de 2019, mientras que mantiene un ascenso de 155% en lo que va de 2020, lo que convierte a esta postura en una de las máximas ganadoras de un volátil año financiero.

“Si hubiéramos dicho hace unas semanas que pronto estaríamos a una distancia de 20.000 dólares, el máximo histórico de Bitcoin, podría haber expresado algunas dudas. Sin embargo, ahora ese un movimiento que podría ocurrir fácilmente. Por lo tanto, no es imposible que podamos ver un nuevo máximo histórico antes de 2021″, consideró Simon Peters, analista, eToro en España.

“Quisiera advertir que el mercado parece un poco sobrecomprado en este momento. Es posible que a 20.000 dólares podamos ver a algunos inversores realizar beneficios”, afirmó Peters.

“El 2020 ha sido por mucho el mejor año que ha tenido Bitcoin en términos regulatorios y de masificación en Wall Street. Por el lado bancario, el regulador autorizó a que los bancos norteamericanos custodien bitcoins, y luego otorgó dos licencias bancarias federales a dos empresas de criptomonedas. Y por el lado de inversionistas, clásicos como Paul Tudor Jones dijeron públicamente que ahora Bitcoin era parte de la estrategia de sus hedge funds. El precio ha sido un reflejo de esto”, resumió Guillermo Torrealba, CEO de Buda.com.

“Hoy Bitcoin ha llegado a un punto en el que los inversores institucionales, los bancos y las oficina familiares están ponderando legítimamente su inclusión como defensa contra la devaluación de la moneda”, dijo a Reuters Alex Mashinsky, director ejecutivo de Celsius Network, una plataforma de préstamos criptomoneda. Añadió que en 2017, el rally de Bitcoin fue liderado por inversores minoristas que fueron los primeros en adoptarlo.

“Debido a que los grandes jugadores, como LINE Corp y PayPal están involucrados en esta vuelta, podemos esperar más estabilidad que la burbuja de 2017. Esto ya no es una fiebre del oro”, acotó el experto de Celsius Network.

El Bitcoin ahora cuenta con un mercado de derivados en funcionamiento y servicios de custodia de instituciones financieras consolidadas. Grandes empresas como Fidelity Investments y la japonesa Nomura Holdings comenzaron a proteger los bitcoins y otras criptodivisas para los inversores institucionales.

Otras criptodivisas importantes, incluyendo el Ethereum y XRP, que a menudo se mueven en tándem con el bitcoin, aumentaron este lunes un 7,2% a 505,2 dólares y un 3% a 31 céntimos de dólar, respectivamente.

Ethereum, la segunda mayor criptomoneda por capitalización de mercado tras el Bitcoin, saltó un 7%, hasta su máximo desde junio de 2018, elevando sus ganancias en más de un 25% solo en los tres últimos días.

Operadores comentaron que Ethereum, que suele moverse en línea con el Bitcoin, se vio impulsado por una creciente demanda antes de una actualización de su red de cadena de bloques -prevista para principios de diciembre-, que se espera la haga más rápida y segura.

La tercera moneda más grande, el XRP, trepaba un 15%, a su rango más elevado en dos años, llevando sus ganancias a más de un 75% en los tres últimos días. Los agentes bursátiles dijeron que no había noticias inmediatas de catalizadores que explicaran este salto el lunes.

El precio de estas autodenominadas monedas alternativas está estrechamente ligado al Bitcoin. Con menor liquidez que su primo mayor, tienden a sufrir cuando hay una mayor volatilidad que en la criptomoneda original.

El Bitcoin subió cerca de un 10% en la última semana, cerca de su marca histórica de USD 19.666 de diciembre de 2017. En lo que va de año gana 155%, impulsado por una demanda de activos de riesgo, un apetito por activos percibidos como resistentes a la inflación y expectativas de que tendrá un uso cada vez más grande.

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