Desde que el Gobierno nacional habilitó las obras privadas para la edificación de viviendas privadas, se reanudaron más de 6.000 obras. Las empresas readecuaron los obradores con los protocolos para volver a trabajar y en algunos casos se hicieron cargo del traslado de sus operarios, en especial en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
Fuentes del sector destacaron a Infobae que la actividad muestra un regreso gradual, y que resta que se reactiven unas 2.000 obras, qué están adaptando lo logístico del personal y acopio de materiales. Pero también resaltan que muchas compañías reclaman que se habilite mayor número de trabajadores para que puedan acelerar los procesos de edificación, y que puedan acceder a créditos blandos para enfrentar los efectos del estiramiento de los plazos de entrega, atraso con los pagos de sueldos y a proveedores de insumos.
Aún con esta perspectiva, a más de un mes del reinicio de las tareas, gana el optimismo en una parte del mercado. Ricardo Griot, presidente de la Comisión de Desarrolladores de la Cámara Argentina de la Construcción dijo a Infobae: “las obras, en general, están volviendo más rápido en el interior. En el AMBA, se van reorganizando, lo cual es un avance importante. Obviamente con los protocolos y restricciones”.
Las obras, en general, están volviendo más rápido en el interior. En el AMBA, se van reorganizando (Ricardo Griot)
“Por otro lado, creemos que las leyes enviadas por el Gobierno nacional al Congreso serán claves para expandir la industria. Creo que el incentivo fiscal y blanqueo, cómo la opción del retorno del crédito hipotecario ajustado por salarios, serán importantes para 2021. Notamos, que la baja del valor para edificar medido en dólares sigue siendo el atractivo principal, y la actividad se vio favorecida por mucha gente que emprendió reformas en sus hogares al iniciarse la pandemia”, amplió Griot.
El Informe de Coyuntura de octubre del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), precisó que en septiembre, antes del regreso a las obras privadas, el consumo de cemento evidenció un crecimiento del 10,5% interanual, superando incluso, los niveles de igual mes de 2018. Se sustentó en el impulso de los despachos en bolsa a niveles que no se veían desde 2005, a un ritmo del 36,4%, traccionado por las obras.
Damián Tabakman, presidente de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (CEDU), precisó a Infobae: “Las obras se están retomando, asumiendo los sobrecostos de los protocolos. De a poco, se van recuperando algunas fuentes de trabajo. Esperamos que el proceso se acelere el año próximo, de la mano de una mayor estabilidad macroeconómica y política. Hay buenas oportunidades para que el ladrillo vuelva a ser protagonista, sobre todo enfocándose en el segmento residencial, urbano y suburbano. Existe un boom de ventas de lotes en los barrios privados”.
“Creció mucho la venta online, y creemos que la logística de última milla (por el efecto de almacenar artículos, distribuirlos y entregarlos en mano al usuario final) potenciará las obras de naves para este sector. Serán depósitos urbanos más chicos que los que se levantan en las autopistas con fines industriales, y cerca de los centros de alta densidad y consumo. También, la hotelería se expandirá post pandemia, porque si lo medimos en dólares, nuestro país quedó muy barato y se llenará de turistas extranjeros”, destacó Tabakman.
Cómo contrapartida, los expertos, contaron a Infobae que hay complicaciones con las entregas de materiales. “El mayor faltante se observa en los insumos básicos, cemento, ladrillos, hierro, en general, por fábricas paralizadas por la cuarentena, que ante el descenso de los casos, empezaron a reiniciar actividades lentamente, con el adicional de mayor consumo particular por reformas o ampliaciones de las viviendas”, argumentó Griot.
El desafío de retomar la labor
Los empresarios coinciden en señalar que es un desafío volver a la actividad y poner en marcha una obra luego de casi 7 meses de parálisis total. Llevará un tiempo para que operen a buen ritmo. “Todos los cronogramas en CABA fueron reprogramados y lo que ocurre es que es difícil estimar con precisión el ritmo de avance, certificación y fecha de entrega de las unidades mientras sigamos teniendo protocolos y sobre todo restricción del uso del transporte público de los trabajadores”, comentó a Infobae, Alejandro Reyser, socio y director de RED.
“La devaluación del peso respecto al dólar ubicó al costo de la construcción en los niveles más bajos de los últimos 15 años. Genera así la posibilidad para la gente que tiene excedente de pesos o dólares ahorrados de invertir en un activo que está nominado en dólares. La compra de inmuebles en pozo o en obra, es positiva, y los precios de estos proyectos bajaron entre 50% y 70%”, añadió Reyser.
Fuentes del segmento, comentaron que a varias compañías en el AMBA les está costando rearmar las cuadrillas que tenían antes de la cuarentena porque la mayoría de los trabajadores fueron buscando la forma de hacer otro tipo de actividad para poder generar ingresos. Además, la actualización de la documentación para la regularización de las tareas con seguro de obra, demora la dinámica de las incorporaciones.
Reyser agregó: “Los trabajadores de la construcción no están considerados dentro del grupo de esenciales, por lo que no pueden utilizar el transporte público en ninguna de sus modalidades. Las empresas constructoras junto con los comitentes deben encargarse de facilitarles el acceso a las obras, por medio de remises, taxis o abonando los viáticos de aquellos que utilizan su propia movilidad”.
Los trabajadores de la construcción no están considerados dentro del grupo de esenciales, por lo que no pueden utilizar el transporte público en ninguna de sus modalidades (Alejandro Reyser)
Federico Castillo, CEO & Founder de Berlin Houses, empresa que trabaja con desarrollos ubicados en La Plata, detalló a Infobae: "Las obras se iniciaron en octubre, con 20 personas trabajando de manera. Desde el momento en que se reactivó la actividad, duplicamos nuestra nómina de arquitectos y del personal de obra en todos los proyectos y sumamos jornada extendida para recuperar el tiempo perdido por la paralización del sector. La incertidumbre inicial, nos hizo repensar cómo capitalizar esta crisis y convertirla en una oportunidad. Lo primero que hicimos fue pausar las cuotas de los clientes y reorganizar la estructura.
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