En agosto de 2020, la cantidad de personas con trabajo registrado en el total país alcanzó a 11,8 millones, lo cual implica un crecimiento mensual del 0,3% en términos desestacionalizados, variación que representa a alrededor de 38.500 personas.
De este modo, luego de tres meses de fuerte contracción del trabajo registrado debido a la pandemia -marzo, abril y mayo-, se acumulan tres meses consecutivos con variaciones positivas.
Sin embargo, el dato que surge del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) si se compara contra agosto de 2019 los números muestran que se sigue registrando una caída del 2,6%, lo que significa que se registraron 315.100 trabajadores menos.
El informe del Ministerio de Trabajo señala que si se abre el número por cada una de las categorías, se observa que el empleo público presentó una variación de 0,2% (sumó 5.000 trabajadores), mientras que el sector privado se mantuvo prácticamente estable (0,0%, cayó en 1.300) y los asalariados de casas particulares mostraron una caída del 0,2% (-1.000 trabajadores).
Lo que mostró un fuerte crecimiento fue el ítem trabajo independiente, que mostró un alza respecto de julio de 1,5% (+35,8 mil trabajadores). Según explica el trabajo, este crecimiento estuvo liderado principalmente por la recuperación del trabajo monotributista, que se incrementó un 2,1% (+33,9 mil).
Con este número, el régimen de monotributo mostró tres meses consecutivos de fuerte crecimiento mensual, lo cual permitió recuperar -dentro de esta categoría- el nivel de empleo previo al inicio de la pandemia.
Por su parte, el régimen de autónomos y el monotributo social mostraron tasas de variación positivas de 0,3% y 0,2% respectivamente (+1,1 mil y +0,8 mil en cada caso).
En la comparación interanual, el total de personas asalariadas se contrajo un 3,1% (-297,9 mil trabajadores). Esta caída se compone de retrocesos del 5% en el sector privado (-301 mil) y del 3,8% en el trabajo en casas particulares (-18,9 mil), mientras que el sector público se expandió EN un 0,7% (+22,0 mil trabajadores).
Asimismo, el conjunto del trabajo independiente presenta una caída del 0,7% frente a agosto de 2019 (-17,2 mil), con caídas del 5% en autónomos (-20,2 mil), del 2,8% en monotributo social (- 10,2 mil) y un aumento del 0,8% en monotributo (+13,2 mil).
Así, la cartera que conduce Claudio Moroni informó en agosto de 2020 se contabilizaron 5,770 millones de personas asalariadas en el sector privado. Respecto a julio de 2020, en términos desestacionalizados, se observa una variación del 0,0% (- 1,3 mil trabajadores), lo que muestra que casi se mantuvo estable luego de varios meses de caída en donde estuvo el aislammiento más estricto por la pandemia.
En relación a la situación sectorial, en agosto pasado las variaciones mensuales sin estacionalidad fueron heterogéneas. Entre los sectores que mostraron crecimiento en la cantidad de trabajadores se pudo observar al sector de las Actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler (+0,8%), Construcción (+0,3%), Servicios sociales y de salud (+0,2%) e Industrias manufactureras (+0,1%).
En el caso de la industria y las actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler se trata del tercer mes consecutivo con variaciones positivas, mientras que en el caso de la construcción es el primer mes con variación positiva luego del inicio de la pandemia, explica el trabajo.
El caso contrario, los sectores que sufrieron caídas lo encabeza el sector de Hoteles y restaurantes (-1,9%), Pesca (-1,0%), Enseñanza (- 0,5%), Explotación de minas y canteras (-0,5%), Transporte, almacenamiento y comunicaciones (- 0,3%), Suministro de electricidad, gas y agua (-0,3%) e Intermediación Financiera (-0,3%).
Según el Ministerio de Trabajo, en el caso de Hoteles y restaurantes “se observa un proceso de destrucción de empleo que no aminora su ritmo”.
Un punto no menor es que la caída se dio en todas las provincias. En la comparación interanual, la caída del empleo asalariado no distinguió regiones y quedo expuesto en que las mayores pérdidas se dieron en provincias que no comparten modelos productivos o climas.
Si la comparación se realiza en términos interanuales, la única actividad que muestra una variación positiva es la de Servicios sociales y de salud con un crecimiento de +0,5%. El resto de los sectores presentaron caídas de empleo en el último año. Los más relevantes fueron Construcción (-27,9%), Hoteles y restaurantes (-15,1%), Explotación de minas y canteras (-6,5%) y Servicios comunitarios, sociales y personales (-5,2%). Por su parte, Pesca, Enseñanza, Transporte, almacenamiento y comunicaciones, Comercio y reparaciones, y Agricultura, ganadería, caza y silvicultura también mostraron caídas en sus niveles de empleo que se encontraron entre 4,9% y 2,4 por ciento.
Un punto no menor es que la caída se dio en todas las provincias. En la comparación interanual, la caída del empleo asalariado no distinguió regiones y quedo expuesto en que las mayores pérdidas se dieron en provincias que no comparten modelos productivos o climas. Neuquén quedó a la cabeza con -10,7%, seguido por San Juan (-8,9%), Salta (-8,3%), Mendoza (-8,0%), Santiago Del Estero (-7,2%), Jujuy (-6,6%), CABA (-6,5%), Formosa (-6,2%), La Rioja (-6,1%) y Corrientes (-5,3%).
Los tres distritos más importantes cayeron menos pero su peso relativo es mayor. Santa Fe mostró una baja de -5,2%, Córdoba -4,5%, y Buenos Aires -3,2 por ciento.
Por último, el informe del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) mostró que en agosto de 2020 la remuneración nominal bruta promedio alcanzó los $61.835, mostrando un alza de 34% en relación al mismo mes del año anterior y la media remuneración bruta fue de $48.393, un 33,9% de alza interanual. “En términos reales, teniendo en cuenta la variación del nivel de precios, en agosto de 2020 tanto la remuneración promedio como la remuneración mediana se contrajeron un 4,8% frente a agosto de 2019”, señaló el informe.
Seguí leyendo: