La vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Krichner, volvió al ruedo público con una carta en donde reparte responsabilidades entre propios y ajenos y llama al diálogo para acordar políticas que solucionen este estado “agobiante” de la economía.
En una extensa carta titulada “A diez años sin él y a uno del triunfo electoral: sentimientos y certezas”, la vicepresidenta hizo referencia a que la “economía bimonetaria” es el problema “más grave” de la Argentina y que el "freno a la economía y la incertidumbre generalizada sobre qué va a pasar con nuestra vida son agobiantes”.
Frente a esta situación señaló a la gestión del ex presidente Mauricio Macri como uno de los causantes del problema, pero también hizo referencia a funcionarios del gabinete que “no funcionan” y señaló que la solución será imposible “sin un acuerdo que abarque al conjunto de los sectores políticos, económicos, mediáticos y sociales de la República Argentina”.
“La carta me parece que está muy bien”, señaló el presidente del Banco de Valores, Juan Nápoli. “Es un poco lo que veníamos diciendo públicamente, un dólar a 190 pesos te muestra no solo un descalabro económico, sino político e institucional, y entiendo que la vicepresidenta lo está poniendo sobre la mesa”, agregó.
Para el también presidente de Napoli Inversiones SA. el reconocimiento del problema que hace Cristina Kirchner “está muy bien. Señala los problemas propios cuando dice que hay funcionarios que no funcionan, hace un mea culpa y el llamado a una mesa de diálogo para actuar ya. Además, le dice públicamente al presidente Fernández que hay que cambiar funcionarios y que el que toma las decisiones es él”.
Respecto al llamado y la respuesta que puede haber del sector privado, Napoli dijo que era un tema “complejo” pero que entiende que “no debería haber inconvenientes” para que los empresarios se sienten en una mesa a discutir un acuerdo.
Otro empresario, que suele ser protagonista del Coloquio de IDEA, uno de los ámbitos mencionados por la vicepresidenta en su misiva, prefirió el anonimato y aseguró tener una “sensación ambivalente”. Señaló que “por un lado, festejo que Cristina Kirchner señale que hay funcionarios que no están haciendo las cosas bien, pero por el otro lado entiendo que eso puede frenar los cambios porque si Alberto Fernández cede, van a decir que Cristina le maneja el gabinete”.
Una línea similar mostraron fuentes del Foro de Convergencia Empresarial señalaron a Infobae que “si hay un llamado, asistiremos como lo hicimos siempre. En todos nuestros comunicados señalamos que la solución es de esta manera”.
Críticas
En donde se mostraron sorprendidos es en la crítica que les hace Cristina Kirchner al comportamiento que mostraron en el Coloquio de Idea respecto al trato que recibieron tanto el presidente Fernández como el ministro de Economía, Martín Guzmán.
En relación al “maltrato permanente y sistemático” que en su opinión recibe el Presidente, Fernández de Kirchner dijo que esa situación "se produjo hace pocos días en un famoso encuentro empresario autodenominado como lugar de ideas, en el que mientras el Presidente de la Nación hacía uso de la palabra, los empresarios concurrentes lo agredían en simultáneo y le reprochaban, entre otras cosas, lo mucho que hablaba”.
La ex presidenta se refiere a los comentarios que hacía empresarios en el muro de la transmisión de YouTube en donde, por ejemplo, Hector Alfredo Poli, director de Pluspetrol dijo que el problema era que no le creía al Presidente porque “no se planta frente a Cristina Fernández, parece que manda ella”.
Un trato similar recibió Guzmán que mientras hablaba los empresarios escribían. “Cómo se nota que Guzmán vivió sus últimos 17 años en USA”, disparó Alberto Pizzi, presidente de Securitas Argentina. “Inflación menos de 40% sin suba de tarifas, naftas, etc., etc. Pan para hoy hambre para mañana”, sostuvo Ignacio Chamorro, socio de Flexseal.
La situación parecía irse de cauce ya que muchos empresarios se iban retroalimentando al punto que tuvieron que intervernir los organizadores para ponderar la presencia de los funcionarios. Pero lo escrito había quedado plasmado.
“Se podía opinar sin criticar. Hay una realidad: si quieren diálogo tienen que escuchar, si existen esos muros no están para poner que todo es lindo. Sin embargo, una cosa es la crítica fundada y otra las expresiones y comentarios como si fuera el grupo de Whatsapp de amigos. Son empresarios que tienen muy poca calle, muy poco roce”, esbozó una defensa un hombre de negocios que participó activamente en el Coloquio de IDEA.
Desde IDEA, ante la consulta de Infobae, optaron por no hacer comentarios respecto de los dichos de la vicepresidenta. Sólo se limitaron a decir que la posición de la entidad estaba en el discurso de cierre del presiente Roberto Murchinson quien dijo, entre otras cosas, que durante este año aprendió que “cuando nos hablamos y escuchamos salen cosas buenas, como el acuerdo de la industria automotriz” pero que “cuando no nos escuchamos salen cosas malas, como la ley de Teletrabajo que no le sirve a nadie”.
Luego de agradecer la presencia del Presidente en el Coloquio, en esa oportunidad Murchinson dijo que aprendió que “la grieta la hacemos todos los que no estamos dispuestos a encontrarnos con el otro, que se alimenta de nuestros sesgos personales; que una vez instaurada hace muy difícil que nos encontremos”.
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