Mientras que los indicadores de Wall Street exhibieron moderadas caídas entre 0,1 y 0,7 por ciento, esta tendencia externa no incidió en la Bolsa de Buenos Aires, que consiguió hilvanar una serie de diez ruedas consecutivas en alzas.
En el plano local, el reciente repunte del orden del 17% en pesos experimentado por el panel líder S&P Merval obedeció más al salto del dólar implícito en la operatoria bursátil, con un contado con liquidación ahora en los 168 pesos, antes que a una mejora en la percepción de los agentes de mercado sobre los activos domésticos.
Así, las acciones argentinas siguieron sostenidas en pesos, ante la búsqueda de cobertura frente a las depreciación del peso. El índice S&P Merval de Buenos Aires ganó un 2%, a un cierre de 48.239 puntos, con lo que acumuló una mejora del 17% en una seguidilla de diez ruedas hábiles de octubre.
“Cuando el dólar deja de ser negocio, por alto y caro, es la Bolsa que comienza a subir sin que nadie se dé cuenta”, afirmó Jorge Fedio, analista técnico de Clave Bursátil. “Como siempre sucede, nos daremos cuenta mucho después, cuando bastante lejos se despegue del piso recortando diferencias con el dólar. Hoy y ahora puede llegar a ser la única expectativa técnica válida para este momento”, estimó.
Desde el pasado 10 de septiembre el riesgo país argentino escaló cerca de un 30%
Especialistas del mercado consultados por Reuters coinciden en que el mercado estuvo apalancado hasta ahora mediante el contado con liquidación, mecanismo por el que se compran activos en pesos y se liquidan en dólares en el exterior, lo que pone a resguardo a las carteras del riesgo argentino, cuando la brecha cambiaria entre el dólar mayorista y el bursátil se disparó hacia la zona de 120 por ciento.
En el exterior, los ADR de empresas argentinas que se operan en dólares en Wall Street exhibieron números mixtos, aunque destacaron las bajas de dos papeles representativos: Grupo Galicia perdió 0,8%, mientras que YPF restó un 4,8%, a USD 3,57, en una rueda en la que la cotización del petróleo termino ligeramente abajo, a USD 41,01 para el barril de Texas.
En tanto, la firma de bienes raíces IRSA reportó la reapertura de algunos de sus centros comerciales tras meses de inactividad por la pandemia de coronavirus que arrastra Argentina. El ADR de la compañía ascendió 4,3% en Nueva York.
Los bonos soberanos en dólares con ley extranjera, que iniciaron la rueda con una clara caída de 1% en promedio, finalizaron con cierre neutro, con paridades entre 38 y 45 dólares. El riesgo país argentino ascendió cinco unidades, a 1.408 puntos básicos. El indicador de JP Morgan aumentó un 28% desde los 1.101 enteros del pasado 10 de septiembre, cuando ingresaron al menú los títulos reestructurados.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) indicó que Argentina enfrenta desafíos sin soluciones fáciles, una profunda recesión, condiciones sociales empeorando, desequilibrios económicos creciendo y una brecha cambiaria en expansión.
Una delegación del organismo regresará al país en noviembre, con la idea de que el Gobierno afiance una hoja de ruta frente a tantas adversidades, en el marco de la renegociación de un crédito ya otorgado en 2018 y del que se desembolsara unos 44.000 millones de dólares.
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