El precio del dólar hoy regirá algo más que el comportamiento de la economía y podría tener influencia en el destino de algunos funcionarios. La gran apuesta de Martín Guzmán es que aparezcan las divisas del campo que, según el ministro de Economía, se verán ampliamente favorecidas por la baja de las retenciones para octubre. El campo no ve el mismo panorama y no parece dispuesto a liquidar más de lo que viene haciendo, entre 50 y 100 millones diarios. En lo que falta del año, sus liquidaciones serían similares a las del año pasado, alrededor de USD 3.000 millones.
Es decir que si no aparecen divisas adicionales, quien cargará con la culpa será el titular del Banco Central, Miguel Pesce, por haber endurecido de manera desarticulada un cepo que ahora tratan de ablandar con medidas que favorezcan a las negociaciones del dólar Bolsa o MEP, para descomprimir el precio del dólar libre que, si bien negocia escasos montos, tiene una influencia poderosa en el ánimo de los ahorristas e inversores.
Por eso, como una versión legal, aunque de menor precio, alentarán las operaciones de dólar Bolsa o MEP que el viernes cotizó a $ 143,42 contra $ 167 del “blue”. Aunque, aducen, es más alto que el dólar ahorro que cuesta $ 135,30. El contado con liquidación, el dólar más utilizado -negocia el doble que el dólar Bolsa- cerró a $ 156. El tema es que los dólares que se mueven en esta última plaza siempre terminan en una cuenta del exterior y eso lo hace inmanejable salvo que el Banco Central salga a malvender los bonos de la deuda, algo impensable en este momento de aumento del riesgo país.
El problema es que un sector de la política que influye directamente en el Gobierno no entiende que el dólar es refugio cuando no hay confianza. En realidad, cree que la falta de confianza se debe a que los medios de comunicación no informan correctamente. Entonces, en el momento más sensible del mercado, la titular de la Defensoría Pública que adhiere a ese sector radicalizado, creó un observatorio de medios, que controlará cuales son las noticias ciertas y cuales las falsas.
La falta de confianza también se vio en la arenga de Alberto Fernández para que el público ahorre en pesos. No lo oyeron. “Hoy hasta las casas en countries o barrios privados se alquilan en el verano en dólares y a valores impensables, ante la imposibilidad de concurrir a los sitios tradicionales de veraneo”, señaló Adrián Mercado, uno de los principales brokers inmobiliarios.
A Fernández ya le hicieron daño con el impuesto a la riqueza, al ponerle al agro en contra, uno de los sectores con los que está dialogando para incrementar el ingreso de divisas. Ese gravamen afecta hasta al mediano que ahora a sus costos debe sumar la caída del viernes de la soja. La oleaginosa perdió 3% y cerró en USD 379 por tonelada, contra 386 del día anterior. En la noche del lunes recuperaba apenas 0,11%.
Para tener un anticipo de lo que puede suceder hoy basta ver lo que ocurrió ayer con los ADR’s argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en las bolsas de Nueva York. Las bajas superaron a las alzas. No hubo grandes retrocesos. El más importante fue el de IRSA (-2,72%), seguido por YPF (-2,32%) y Tenaris (-1,24%). En cambio, las bajas en minoría, tuvieron más fuerza. Pampa Energía aumentó 4,06%; Transportadora Gas del Sur, 4,15%; Central Puerto, 2.71% y Despegar 2,34%.
Los inversores bursátiles hoy tendrán que tomar decisiones basados en el dólar y los augurios no son los mejores. Los tenedores de bonos tampoco encontrarán un campo propicio para que sus tenencias recuperen parte de lo perdido. El dólar, entonces, será el juez de lo que suceda en el Gabinete y la decisión no le corresponderá íntegramente el Presidente de la Nación. Con las recientes medidas, el sector más duro está mostrando que creen que hay que radicalizar la economía tanto como lo hicieron con la política.
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