Tras la misión técnica que estuvo en el país la semana pasada, el Fondo Monetario Internacional (FMI) planteó que la Argentina enfrenta dificultades económicas complejas y que deben adoptarse políticas que restablezcan la confianza, pero al mismo tiempo remarcó que esas medidas deben ser calibradas para fomentar la recuperación económica.
“Argentina enfrenta dificultades económicas y sociales complejas, en el contexto de una crisis de salud sin precedentes. La profunda recesión ha provocado un aumento de los ya elevados niveles de pobreza y desempleo, cuyos efectos se ven agravados por importantes presiones en el mercado cambiario. Estos son desafíos excepcionalmente difíciles sin soluciones fáciles. Un conjunto comprensivo de políticas podría respaldar el restablecimiento de la confianza, pero deberá ser apropiadamente calibrado para fomentar la recuperación económica y asegurar la estabilidad macroeconómica”, enfatizó el Fondo en un comunicado.
Estuvieron en Buenos Aires entre el martes y el domingo el jefe de la misión para la Argentina, Luis Cubeddu, y la directora adjunta del Departamento para el Hemisferio Occidental, Julie Kozack. Se sumaron a las reuniones el representante del organismo en el país, el jamaiquino Trevor Alleyne, y otros técnicos vía zoom desde Washington. Por el gobierno, participó en varios de los encuentros el representante del Cono Sur ante el Fondo, Sergio Chodos.
“El equipo del FMI mantuvo reuniones productivas con las autoridades argentinas, representantes del Congreso, el sector privado, los sindicatos y la sociedad civil para discutir los desafíos multifacéticos que enfrenta el país e intercambiar opiniones sobre la mejor manera de abordarlos”, dijeron Cubeddu y Kozack mediante un parte de prensa.
Señalaron que el equipo pudo adquirir una “comprensión más profundizada de los planes de políticas de las autoridades para estabilizar la economía y ponerla en una senda de crecimiento más sostenible y uniforme” y plantearon que comparten el “compromiso de las autoridades con políticas que aseguren una consolidación fiscal favorable al crecimiento y al mismo tiempo protejan a los más vulnerables, permitan una reducción gradual de la inflación e impulsen la creación de empleo, la inversión y las exportaciones”.
“El personal del FMI seguirá colaborando estrechamente con las autoridades. El equipo planea regresar a Buenos Aires a mediados de noviembre para iniciar discusiones sobre un nuevo programa respaldado por el FMI”, agregó el comunicado.
La Argentina le debe al organismo USD 45.000 millones, que buscará reestructurar con el objetivo de descomprimir el escenario financiero en los próximos tres años y tener mayor espacio para adoptar políticas tendientes a lograr la recuperación económica. La aspiración oficial es postergar los vencimientos por varios años pero sin comprometerse a aplicar las reformas estructurales que históricamente reclamó el Fondo. Por lo pronto, Cubeddu y Kozack les transmitieron a los actores con los que se reunieron que no es la intención del organismo pedir en estas circunstancias del país ese tipo de reformas.
La misión se reunió con varios ministros del gabinete, entre ellos el titular de Economía, Martín Guzmán, y el de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, así como también con el presidente del Banco Central, Miguel Pesce. Además, tuvieron encuentros con cámaras empresarias (UIA y Ciara) y con representantes del sindicalismo. También tuvieron un feedback de la realidad económica del país con economistas, con los bancos, y con organizaciones sociales.
Las palabras de los directivos del Fondo están alineadas con la percepción que tuvieron no sólo los funcionarios, sino también el resto de los actores que tuvieron reuniones con ellos. Si bien admitieron estar preocupados por la crisis que enfrenta el país, expresaron la vocación por ayudar a la Argentina en este momento, en línea con la postura que públicamente adoptó la directora gerente del organismo, Kristalina Georgieva. Consultadas fuentes oficiales acerca de cómo percibió el Gobierno la misión del FMI, aseguraron que se los notó “colaborativos y conscientes de las restricciones que enfrenta el país”.
La comitiva cerró su labor un día antes del inicio del encuentro anual del FMI y el Banco Mundial (BM), que comenzó hoy y que se extenderá durante toda la semana. En esta oportunidad, se realizará de modo virtual con el foco puesto en la recuperación de la economía tras el Covid-19. En este marco, el organismo dará a conocer este martes sus estimaciones de PBI para la economía global y la Argentina para 2020 y 2021.
Seguí leyendo: