Se entiende el giro que quiere dar el Gobierno al tomar medidas que no están en su diccionario como la baja de las retenciones a las exportaciones del campo, incluida la carne, o facilitar las operaciones con divisas a petroleras y mineras para que puedan comprar en el mercado oficial el 100% de los dólares que necesitan para pagar sus deudas con el exterior, entre otras decisiones.
El mercado se vio sorprendido porque no lo esperaba de un Gobierno que prefiere crear impuestos antes que bajar gastos. Pero la emergencia es la que manda. El viernes se fueron de los bancos USD 180 millones de depósitos privados en dólares que quedaron en USD 16.453 millones, 742 millones menos de los que tenía al inicio de la semana pasada. Para tomar dimensión de la caída basta decir que en los primero 20 días de setiembre se fueron solo USD 72 millones contra 742 millones de 5 días hábiles.
A esto hay que sumarle USD 100 millones que vendió de dólar ahorro y USD 80 millones para abastecer a los importadores.
El impacto se vio a pleno en las reservas que cayeron USD 370 millones a 41.381 millones. Por supuesto, la mano tan abierta del Banco Central se hizo a cuenta de que las nuevas medidas que tomarán en estos días que, creen que repondrán largamente esos dólares. Además, como plan B tienen los swap con el Banco Central de China y las 68 toneladas de oro que suman casi USD 4.000 millones que se pueden poner como garantía para obtener créditos a tasa blanda.
El dólar detuvo el ascenso ante las posibles novedades. El dólar Bolsa o MEP, que podría tener más facilidades para operar en el futuro, quedó sin cambios en $ 138,79 con un buen monto de negocios de USD 40 millones y el contado con liquidación cedió $ 3,70 a $ 145,65 con operaciones por USD 55 millones. Otro buen dato vino del “canje blanco”, que bajó su costo a 4,5%. La semana pasada se pagaba 8% por esta operación, que consiste en comprar dólares en el exterior con pesos en Buenos Aires.
El que no se pudo contener fue el “blue” que aumentó, sin negocios, $ 1 a $ 147 porque creen que este mercado quedará desabastecido al caer la cantidad de clientes bancarios habilitados para comprar el cupo de USD 200 mensuales en sus bancos. El “blue” o dólar libre es el más promocionado pero el menos importante en negocios. Los que mandan en el mercado son los dólares alternativos.
En la plaza oficial el dólar subió 39 centavos a $ 80,62 y elevó el precio del dólar ahorro a $ 132. El dólar mayorista subió 6 centavos a $ 76,18.
A cuenta de las más racionales medidas cambiarias que parecen avecinarse, los nuevos bonos de la deuda estuvieron equilibrados. El AL29D perdió apenas 0,30% y el AL30D, 0,16%. Pero la caída fue compensada ampliamente por la suba del bono más utilizado, el AL35D, que subió 2,11% e hizo que el riesgo país bajara 32 unidades (-2,4%) a 1.300 puntos básicos.
La Bolsa no se contagió de ese clima porque está muy ligada a lo que sucede con el contado con liquidación. Los negocios crecieron a $ 1.162 millones y al principio de la sesión parecieron traccionar al mercado. A las 15.30, el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, estaba 1,30% arriba, pero a partir de allí empezó una decidida baja por la toma de ganancias que lo llevó al cierre a perder 2,22%. Aluar (-6,02%), Ternium (-5,37%) y BYMA (-4,84%) fueron los más afectados. Hubo solo tres alzas. La más destacada fue la de Edenor con 4,36%.
Los ADR’s argentinos -certificados de tenencias de acciones que cotizan en dólares en las bolsas de Nueva York- tuvieron una buena rueda. Entre los ganadores estuvieron Loma Negra (+5,12%), Despegar (+2,91%) y Edenor (+2,27%).
Para hoy se espera más cautela en el mercado a la espera de las definiciones del Gobierno. Los ahorristas e inversores votarán con el precio del dólar la calidad de las medidas que se están por tomar.
Seguí leyendo: