Y un día volvió el dólar ahorro y la oferta de divisas en la plaza libre fue inmediata. El “blue” bajó $ 1 a $ 144 y quedó vendedor para hoy. Fue la única noticia positiva porque el resto de los tipos de cambio siguen al acecho y con cada vez más montos de negocios.
El dólar Bolsa o MEP, operó USD 45 millones, 25 millones por encima de lo que negociaba la semana pasada, y subió $ 2,02 (+1,5%) a $ 137,31. En cambio, el contado con liquidación tuvo el movimiento más alto desde que están en la plaza los nuevos bonos. Movió USD 62 millones y cedió 17 centavos a $ 143,33.
Los tres dólares alternativos, el libre, el contado con liquidación y el dólar Bolsa, están igualando sus precios y alejándose del tipo de cambio oficial. Es una presión devaluatoria que el Gobierno pretende solucionar negociando con el agro para que ingresen las divisas de lo que queda para exportar de la cosecha pasada. Está dispuesto a ceder retenciones a cambio. Caso contrario, deberá devaluar una alternativa que dispararía la inflación.
Con la baja de retenciones, el Gobierno se mimetiza con Mauricio Macri, de la misma manera que Mauricio Macri, se mimetizó con Cristina Fernández de Kirchner al imponer el cepo cambiario. El modelo económico no cambió en los últimos 17 años y encuentra siempre el mismo obstáculo: la ausencia de divisas e inversiones.
El canje blanco, la compra con dólares en el mercado local de bonos en el exterior para transformarlos en dólares y depositarlos en su cuenta extranjera, bajó su costo de 8% a 6%. Si alguien hace una operación para sacar del país USD 100.000, a su cuenta llegan USD 94.000.
En la plaza mayorista, se siguen consumiendo las reservas del Banco Central. Esta vez tuvo que vender USD 80 millones para satisfacer a los importadores ante la absoluta ausencia de los exportadores. El dólar subió 20 centavos a $ 76,05.
En bancos y casas de cambio el dólar cotizó a $ 80,15 (+11 centavos) lo que equivalió a un dólar ahorro de $ 131,59 que fue activamente demandado por los compradores. Se calcula que se llevaron alrededor de USD 60 millones.
Las reservas sintieron el golpe y cayeron nada menos que USD 102 millones a 41.872 millones. A este ritmo en una semana y media perforarán el piso de 41.000 millones y después comienza una cuenta regresiva digna de una película de suspenso porque pueden atravesar los 40.000 millones.
Por eso, trabajan en tiempo de descuento para asegurar un convenio con los exportadores que les arrimen dólares para poder tener armas para controlar el mercado cambiario que hoy depende más de la voluntad de los ahorristas e inversores que de lo que pueda hacer el Banco Central que no tiene poder de fuego para intervenir y moderar el precio.
Además, tiene una preocupación anexa. El miércoles los depósitos en dólares cayeron USD 220 millones a USD 16.866 millones. Perforaron el piso de 17.000 millones y en dos días bajaron 329 millones. Es la caída más pronunciada desde que asumió el Gobierno y que tal vez se pueda moderar ahora que volvió el dólar ahorro. No hay que olvidar que el dato corresponde al 23 de setiembre.
Los bonos en dólares con legislación local siguen sin ayudar. La baja continúa y sus rendimientos sobrepasan 15%. Los bonos "D", los que se pueden operar en dólares tuvieron bajas de hasta 0,66% en los de mediano plazo (el AL29D y el AL30D) y de 1,20% en los más largos (el AL35D y el AL41D). Pero como bajaron los bonos del Tesoro de Estados Unidos, el riesgo país quedó sin cambios en 1.325 puntos básicos.
La Bolsa, sigue decepcionando. No hay estímulos para asumir riesgos y por eso los inversores están alejados. La prueba son los escasos $ 722 millones que se negociaron. El S&P Merval, el índice de las acciones líderes quedó casi neutro porque anotó una leve alza de 0,08%. Las destacadas fueron Ternium (+2,57%), Aluar (+2,11%) y Mirgor (+1,30%).
Los ADR’s argentinos –certificados de tenencia de acciones que cotizan en dólares en Wall Street- tuvieron cierres mixtos. Los retrocesos más grandes fueron los de Cresud (-7,24%) e IRSA (-5,61%). Los que marcaron diferencia fueron Globant (+3,84%), Tenaris (+3,57%) y MercadoLibre (+2,96%).
El dato positivo para el Gobierno vino del lado de los pesos ya que consiguió asegurarse los fondos para poder pagar los próximos vencimientos de bonos en moneda local. Colocó títulos por $ 61.801 millones que le permitirán afrontar $ 45.000 millones que vencen mañana y $ 12.000 millones de distintos bonos.
Por ahora todas las esperanzas están puestas en la negociación con el agro. Las divisas de rápida disponibilidad, con suerte, cubren todo octubre, y es clave que ingresen los dólares pendientes de la cosecha que los exportadores se resisten a venderla porque el dólar de la soja con las retenciones equivale a $ 50, la tercera parte de lo que cotiza el dólar contado con liquidación.
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