Juan Carlos de Pablo: “Alberto tiene que agarrar al equipo económico y decirle esto no está andando, pónganse a laburar’”

El reconocido economista y académico se refirió a la crisis de confianza que afronta el Gobierno y a los problemas cambiarios

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El economista y académico Juan Carlos de Pablo analizó la realidad de la dura situación económica de la Argentina, con una actividad en caída histórica por las medidas de aislamiento social y una crisis de confianza que se acrecienta debido a las recientes medidas cambiarias que generan mayor incertidumbre en el plano financiero.

En diálogo con radio Mitre, De Pablo esbozó con ironía sobre las cinco alternativas con que cuenta el presidente Alberto Fernández para abordar esta crisis: “Uno, suicidarse; dos, renunciar; tres, enfermarse y pedir licencia; cuatro, entregarle las llaves de la Casa Rosada a la señora de Kirchner, y cinco pelear”.

En ese contexto, De Pablo recordó que “Argentina es un país presidencialista y personalista, por eso estamos tan atentos a lo que dice y lo que hace el presidente de la Nación”. Y abundó en que “un Presidente no cambia un gabinete o una forma de gobierno porque alguien le diga. Lo que motiva una decisión tan dramática es que él perciba que está al borde del abismo en materia económica o que tenga la certeza de que pierde las elecciones el año que viene”.

Un Presidente no cambia un gabinete o una forma de gobierno porque alguien le diga. Lo que motiva una decisión tan dramática es que él perciba que está al borde del abismo en materia económica o que tenga la certeza de que pierde las elecciones el año que viene

De Pablo hizo énfasis en los datos de la macroeconomía. El INDEC informó este martes que el PBI se desplomó un histórico 19,1% en el segundo trimestre de este año, cuando más impactaron las medidas de cuarentena por la propagación del coronavirus, que sumaron dificultades para una actividad que atraviesa el tercer año en recesión.

“El INDEC ayer nos informó de lo que pasó en la prehistoria y el Congreso está discutiendo el presupuesto 2021”, graficó el experto. “Cada uno de nosotros está en lo suyo peleándola mientras está esperando este componente importante”, agregó.

Por eso, aclaró lo que quiso expresar cuando le recomendó al Presidente ponerse a pelear desde el máximo cargo de la política: “Pelear quiere decir agarrar a todos los miembros del equipo económico y decirle esto no está andando, pónganse a laburar. El Presidente tiene que ser exigente con su equipo económico”.

Pelear quiere decir agarrar a todos los miembros del equipo económico y decirle esto no está andando, pónganse a laburar. El Presidente tiene que ser exigente con su equipo económico

“Cuando te ves al borde del abismo sacás fuerzas de donde no creías que las tenías. Y te puede salir o no”, afirmó De Pablo, desde su experiencia de analista de la política y la economía de la Argentina en las últimas cinco décadas.

Trabajar en política económica es como trabajar en la guardia del hospital, son los muchachos del SAME”, argumentó.

De Pablo también aludió a otro problema de la actual coyuntura económica: el cepo cambiario y la crisis de desconfianza financiera desatada a partir de las nuevas restricciones anunciadas el martes de la semana pasada.

“Lo que está pasando con el tema del dólar si ocurriera en otro país diría es risible”, apuntó, y refirió que “la famosa comunicación del Banco Central tiene tantos requisitos que tenemos un feriado cambiario virtual”.

Si hoy el señor (presidente del BCRA, Miguel Ángel) Pesce se levanta y dice ‘tenés razón, saquemos el cepo’, nadie va a salir a venderle dólares, van a salir a comprarle los últimos cuatro dólares que le quedan

“Si hoy el señor (presidente del BCRA, Miguel Ángel) Pesce se levanta y dice ‘tenés razón, saquemos el cepo’, nadie va a salir a venderle dólares, van a salir a comprarle los últimos cuatro dólares que le quedan”, aseguró De Pablo. Pero subrayó que “quien tiene responsabilidad ejecutiva, lo único que tiene que hacer es intentarlo”.

“Alberto Fernández no se puede ir a su casa hasta el 10 de diciembre de 2023”, añadió el economista. “El presidente de la Nación debería estar pensando ¿qué carajo hago? O si no, tiene que tener alguien cerca de él en el que confíe, para que mire las cosas como las está mirando cualquiera de nosotros”, aconsejó.

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