El impacto de la cuarentena: en el segundo trimestre la caída del PBI fue de 19,1% y superó a la crisis de 2002

Debido a las medidas de aislamiento por el coronavirus, la contracción trimestral de actividad fue superior al -16% registrado en el primer trimestre de 2002, en el colapso de la convertibilidad

Guardar
La caída de actividad en
La caída de actividad en el segundo trimestre fue la más amplia desde que hay registro. (Reuters)

El Producto Bruto Interno (PBI) de Argentina retrocedió un histórico 19,1% interanual en el segundo trimestre del año, afectado por el aislamiento obligatorio dispuesto por el Gobierno ante la pandemia del coronavirus durante ese período, cuando el aislamiento social fue más estricto.

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó el resultado de los agregados macroeconómicos del trimestre abril-julio, con una caída sin precedentes, superior al -16,3% interanual registrado en el primer trimestre de 2002 tras el colapso de la convertibilidad y la mayor desde que en la Argentina se realizan este tipo de mediciones, a partir del 1900.

También superior a las caídas interanuales del segundo trimestre de 2002 (-13,5%) y del segundo trimestre de 2009 (-11,3%).

Las medidas de aislamiento social por el coronavirus se iniciaron el pasado 20 de marzo y tuvieron mayor efecto en abril y mayo

El desplome del PBI en el segundo trimestre también fue histórico en la comparación con el período anterior, es decir, trimestre contra trimestre. Entre abril y junio cayó 16,2% respecto del primer trimestre de 2020. La baja de actividad fue superior a la de otras crisis, como el -6,2% del primer trimestre de 2002 respecto del último de 2001, del -4,7% del cuarto trimestre de 2008, y el -4,8% del primer trimestre de 2020.

Cabe señalar que las medidas de aislamiento social preventivo y obligatorio se iniciaron el pasado 20 de marzo y tuvieron mayor efecto en abril y mayo, mientras que en meses subsiguientes se fueron flexibilizando, para dar un poco más de dinamismo a la actividad económica, que atraviesa su tercer año consecutivo en recesión.

Para Eduardo Fracchia, economista del IAE de la Universidad Austral, “Argentina enfrenta la crisis actual sin recursos tras una década muy mala. Salió de las crisis más importantes de la democracia en 1989 y 2002 con más capitalismo. El riesgo de que el ‘canto de sirenas’ nos lleve a un modelo más estatista, dirigista con mucha presión impositiva, existe dada la ideología del oficialismo”.

El ente estadístico detalló que los 16 sectores de actividad disminuyeron su producción en el segundo trimestre respecto del mismo período del año pasado, pero los que más cayeron fueron Hoteles y restaurantes (-73,4% interanual) y Otras actividades de servicios comunitarias, sociales y personales (-67,7%).

En la apertura por el lado de la demanda, también se observaron reducciones en todos los componentes, destacándose la de la Formación bruta de capital fijo (-38,4% interanual) y la del Consumo privado (-22,3%).

“Las restricciones globales a la circulación de las personas con el objetivo de mitigar la pandemia de la COVID-19 afectan a un conjunto significativo de actividades económicas en todos los países”, refirió el INDEC, en lo que consideró un “fenómeno excepcional”.

En la primera mitad del año el PBI de Argentina acumuló una contracción de 12,6% interanual

“La clave está en la cuarentena: las restricciones a la oferta y su golpe sobre la demanda desplomaron la actividad económica en el segundo trimestre de 2020. Si bien los efectos fueron inducidos, no por eso fueron menos reales”, indicó la consultora Ecolatina. “En este sentido, resalta el deterioro de todos los indicadores de la economía real entre abril y junio de este año”, agregó.

“Las fuertes restricciones de confinamiento impuestas a partir de la segunda mitad de marzo y que se prolongó hasta agosto tuvieron un importante costo económico para todo el país”, afirmó a Reuters la economista Natalia Motyl, de la consultora Libertad y Progreso.

“Todos los sectores, en menor medida el agroexportador –que se vio afectado por la baja de los precios de las commodities– y el de los servicios esenciales –que no fueron afectados por la cuarentena–, anotaron caídas históricas; destacándose el sector de servicios, la construcción y la producción manufacturera como dos de los sectores que mayores contracciones sufrieron durante el segundo trimestre”, agregó.

La restricción de la oferta y la caída de demanda por la cuarentena retrajeron la actividad en el segundo trimestre en una magnitud sin precedentes

El INDEC registró en el primer trimestre de 2020 una contracción de un 5,4% interanual, luego de que el PBI de 2019 finalizara con una contracción del 2,2 por ciento. De esta forma, en los primeros seis meses de 2020, el PBI acumuló una contracción de 12,6% interanual. El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central entre economistas y consultoras indicó que la actividad económica podría caer un 12% en 2020.

Fracchia subrayó que “los sectores que pueden liderar la recuperación son, entre otros, el campo, la tecnología, la construcción y el yacimiento de Vaca Muerta. El campo con algunos nubarrones de sequía enfrenta precios de materias primas en buen nivel, siendo injusta la diferencia entre el dólar efectivo del sector agropecuario y el paralelo. En lo que se refiere a la construcción, este sector es relevante por el impacto en el empleo. Vaca Muerta sigue fría por el precio del crudo y otras medidas que bajaron los incentivos a extraer hidrocarburos desde el final del gobierno de Macri”.

Seguí leyendo:

Guardar