El ex ministro de Economía Domingo Cavallo volvió a publicar en su web personal e hizo referencia al camino que debería encarar la administración nacional, más precisamente el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce; para no caer en lo que describe como un “salto inflacionario”.
“El cierre exitoso del canje de las deudas bajo ley extranjera y la reestructuración impuesta por ley a las deudas bajo ley argentina, debería convencer al ministro de economía y al presidente del Banco Central de la conveniencia de reorganizar el manejo cambiario y financiero con la lógica de los mercados libres, aunque inicialmente lo sea sólo en un sentido marginal. Esto es lo que vengo proponiendo, sin éxito hasta ahora, desde que se reimplantó el control de cambios en setiembre del año pasado. Yo espero que ahora, marchen en esa dirección”, señaló el ex ministro de Carlos Menem y Fernando De la Rúa.
Respecto de este punto, señaló que limitar la operatoria del mercado sujeto al control de cambios a las transacciones comerciales con bienes, pero dejar libre a las transacciones financieras inclusive “las compras y ventas de dólares para atesoramiento y turismo”, terminaría contribuyendo a “mantener la brecha cambiaria en los mínimos niveles compatibles con el manejo monetario que haga el Banco Central”.
Respecto del déficit, Cavallo dice que parte del mismo “podrá financiarse con emisión de bonos” del Tesoro en la medida que el mercado absorba cantidades en exceso de los vencimientos de capital que se vayan operando. Pero que habrá una parte que no se podrá financiar de esa manera y que el Banco Central “tendrá que emitir un monto equivalente de pasivos monetarios, ya sea que tome la forma de base monetaria o Leliqs”. A partir de esto, el ex ministro entiende que el stock de bonos que surgen del canje y que estarán en el activo del Banco Central “le dará a la autoridad monetaria cierto margen de maniobra para absorber parte de esos pasivos monetarios”, pero avisa que “no podrá hacerlo a menos que esté dispuesto a dejar que aumente la tasa de interés todo lo que el mercado determine”.
Cavallo afirmó que el manejo monetario y cambiario “basado en el funcionamiento de mercados libres” ofrece la ventaja de “reducir el margen de incertidumbre que enfrentarán ahorristas e inversores porque serán menos probables las intervenciones erráticas y discrecionales del gobierno”. Además, plantea como otra ventaja que se podrán llevar a cabo sus transacciones “de manera totalmente legal y sin tener que arriesgarse a operar en mercados de dudosa legalidad o incluso ilegales”.
Pero de todas formas el ex titular del Palacio de Hacienda en los ’90 puso en duda que esta medida por sí sola lleve tranquilidad ya que un manejo cambiario y financiero “más racional, el riesgo de una brecha cambiaria creciente no desaparecerá si el gobierno sigue adoptando decisiones en materia de precios de los bienes y servicios, públicos y privados, que acentúan la represión de la inflación”, en una clara alusión a los congelamientos de precios y tarifas.
Tanto es así que señala que esta “advertencia” es “particularmente relevante” teniendo en cuenta la reciente decisión del gobierno de congelar hasta fin de año el precio de la telefonía celular, el Internet y la televisión por cable y el anuncio de que regulará sus precios por haberlos declarado servicios públicos.
“La represión de la inflación mediante controles de precios tiene el efecto de desalentar inversiones y restringir significativamente la oferta de los bienes y servicios controlados. Además, los aumentos de presión impositiva anunciados desalentarán la inversión aún en los sectores cuyos precios no se controlan”, explicó Cavallo.
“Son precisamente estos efectos los que aumentan el riesgo de un salto inflacionario peligroso una vez que se salga de la cuarentena sin medidas fuertes de ajuste del gasto público”, finalizó.
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