Si había un evento empresario que caracterizaba al hotel Alvear antes de la pandemia, ése era el Council of the Americas. Todos los años, hacia mediados de agosto, la entidad norteamericana en conjunto con la Cámara Argentina de Comercio (CAC) congregaban allí a cientos de empresarios para escuchar, durante toda una mañana, a expositores del oficialismo, la oposición, y del sector privado sobre la marcha de la economía.
Este año, tras el impacto del Covid, fue diferente. La conferencia se realizó de manera virtual y si bien faltaron los comentarios de pasillo -muchos en el tradicional VIP- que nutrían gran parte de la cobertura, contó con la participación de varios ministros del gabinete que no sólo repasaron el impacto del virus y las medidas adoptadas, sino que coincidieron en que la recuperación económica está comenzando.
Pero también se refirieron a los desafíos que se le presentan a la Argentina hacia adelante. Y uno de ellos es lograr que los USD 170.000 millones que los argentinos tienen guardados, y que fueron comprando en los últimos años, sean canalizados hacia la inversión. Así lo afirmó el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, quien no pudo estar presente en vivo en el evento, pero expuso a través de un mensaje grabado previamente.
“La inversión extranjera es bienvenida, pero lo cierto es que el mayor desafío en la etapa que viene es poder canalizar a la inversión y al crédito el ahorro interno”, indicó el funcionario, ante un auditorio -esta vez virtual- compuesto en gran parte por empresarios norteamericanos. Pesce dio cifras: en 2019, los residentes argentinos compraron USD 23.000 millones de dólares billete; en 2018, USD 19.000 millones, y en 2017, USD 16.000 millones. “La Argentina tiene dentro de su territorio USD 170.000 dólares billetes, por lo que el primer desafío es lograr que ese ahorro vaya a inversión y al financiamiento”, remarcó el presidente del BCRA.
Remarcó además que la Argentina ha tenido un problema histórico de debilidad de su moneda que fue lo que llevó a la dolarización. “Hoy, el país debe ser uno de los que más cantidad de dólares billetes tiene per capita del mundo. Seguramente, debemos superar a unos cuantos estados norteamericanos. Y la forma de solucionar esto es fortaleciendo nuestra moneda y estabilizándola”, sostuvo.
Durante su presentación, la anfitriona, presidente y CEO del Consejo de las Americas, Susan Segal, apoyó de forma muy contundente la reacción que tuvo el gobierno de Alberto Fernández en el manejo del virus y dijo claramente que “la Argentina está haciendo un buen trabajo”. Sin embargo, remarcó que los desafíos que se le presentan al país son fuertes debido a que ingresó a esta crisis con problemas previos. “Para el gobierno de Fernández, son tiempos de muchos desafíos. Uno de ellos fue la renegociación de la deuda, condición necesaria para el desarrollo de un plan económico. El siguiente paso es promover el crecimiento y controlar inflación. Es clave crear un ambiente que promueva la inversión extranjera directa”, enfatizó Segal.
El presidente de la CAC, Jorge Di Fiori, también planteó que el país tiene enormes desafíos hacia adelante. Dijo que la Argentina debe “superar la crisis coyuntural y dejar atrás el estancamiento estructural”. Además, debe apostar a la consolidación macroeconómica con la baja paulatina y sostenida del déficit fiscal y la reducción del costo argentino.
El presidente del BCRA se mostró esperanzado en que se sostenga la recuperación que tímidamente arrancó en junio y que se pueda volver a los niveles previos a la pandemia. Señaló que los desafíos hacia adelante son la reducción de la pobreza y la desigualdad y que las limitaciones que tiene la Argentina hoy son el sector externo y la falta de financiamiento a la producción a través del sistema financiero y del mercado capitales. Sin embargo, destacó el comportamiento que ambos presentaron durante los últimos meses.
Sobre el aumento de la emisión monetaria y la inflación -una de las principales preocupaciones del mundo empresario-, afirmó que si bien esta mayor impresión de billetes para financiar al Tesoro implicaba un riesgo en materia de aceleración de los precios, finalmente eso no ocurrió. “Podemos decir que hemos tenido éxito porque esa mayor emisión no se tradujo en aceleración de la inflación, sino todo lo contrario. En esos meses, hemos tenido una morigeración del proceso inflacionario, lo que nos permitió mantener el tipo de cambio real a través de las intervenciones del BCRA”, precisó el funcionario.
Previamente, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, se había referido a la situación económica en el marco de la pandemia. Durante su exposición, hizo un repaso del escenario previo al Covid y las medidas adoptadas para enfrentar la enfermedad, a la vez que afirmó que ahora se están definiendo medidas para atravesar la transición hacia una etapa de superación del virus.
Según sostuvo, un caso concreto es el nuevo ATP, que contendrá estímulos para convertir los créditos en subsidios si las empresas crean empleo. “Pensamos que la Argentina necesita un nuevo consenso social y productivo para salir adelante”, aseguró el ministro.
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, se mostró optimista con las recientes cifras de la actividad económica y dijo que el país ya se encuentra en “un sendero de reconstrucción”. “La Argentina ya empieza a dar síntomas de que se viene la recuperación; hay actividades que se están dinamizando a velocidades superiores al año pasado, y esperamos confirmarlo con los resultados de agosto”, dijo.
Para el JP Morgan, la Argentina tendrá una caída de su actividad económica del 13,5%, afirmó la directora de la entidad Joyce Chang, durante un panel que compartió junto al CEO de IDB Invest, James Scriven. Según su visión, la renegociación de la deuda es un paso que va en la dirección correcta, pero no es suficiente para estabilizar la macroeconomía. “El desafío de la Argentina es estabilizar y fijar un plan de mediano plazo que pueda ser comunicado al mercado”, precisó la economista.
A su turno, y como buen canciller, Felipe Solá se preocupó por remarcar que Estados Unidos es el primer inversor externo en el país, con un stock de USD 17.000 millones, pero el objetivo es que ese número aumente. “Apostamos a una mayor inversión norteamericana, y a mantener el diálogo y el respeto. Superado el tema de la deuda, vamos a encarar en estos meses el acuerdo con el FMI para tener un nuevo proyecto de crecimiento y que ese crecimiento sea sustentable”, dijo Solá.
Por otro lado, aseguró que están preparando el programa económico para la pos pandemia y se mostró confiado en la capacidad de recuperación del país. Lo que sí remarcó es que las exportaciones deben crecer fuertemente, ya que llegaron hace ocho años a los USD 85.000 millones y hoy se ubican en torno a los USD 65.000 millones. “Promovemos un programa que vaya dirigido a incrementar las exportaciones de alimentos directamente preparados para las personas. Somos muy eficientes en el primer eslabón, pero ahora debemos ir a lo cualitativo”, señaló el ministro de Relaciones Exteriores.
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