Las acciones argentinas retomaron el sendero bajista este viernes, en una rueda con números mixtos en las pizarras de los mercados internacionales. El panel líder S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires cedió 2,2%, cerca de los 48.547 puntos.
Entre los ADR de empresas argentinas que se negocian en Wall Street, YPF se destacó por una ganancia de 1,1%, mientras que Grupo Galicia mermó 1,4% en sus cotizaciones en dólares. Mercado Libre cedió 0,1%, a 1.156 dólares y siguió cerca de su récord.
En cuanto a los títulos públicos, los bonos en dólares más representativos restaron un 0,8% en promedio, a la espera de detalles sobre la presentación formal de la propuesta de reestructuración de deuda soberana ante el ente regulador de los EEUU (SEC por sus siglas en inglés).
El riesgo país de JP Morgan, que mide la brecha de tasas entre los bonos del Tesoro de los EEUU y sus pares emergentes, subió 19 unidades para la Argentina, a 2.119 puntos básicos a las 17 horas.
Cabe señalar que el Gobierno argentino postergó para la semana próxima la presentación de la oferta de reestructuración con los bonistas. El canje permanecerá abierto hasta el 28 de agosto, la fecha original que tenía previsto el ministro de economía, Martín Guzmán, y la liquidación de los nuevos bonos se mantendrá el 4 de septiembre.
Este viernes, los indicadores de Wall Street ofrecieron un cierre dispar, con el Dow Jones de Industriales que ganó 0,1% y el Nasdaq, que perdió 0,2%, en una jornada marcada por datos poco alentadores sobre las ventas del comercio minorista, que aumentaron pero menos de lo esperado, y por el estancamiento en Washington del nuevo paquete de estímulos fiscales.
El recinto de negocios neoyorquino conseguía cierto alivio por el aumento del 1,2 % de las ventas del comercio minorista en julio en EEUU, a pesar de que economistas encuestados por el Dow Jones esperaban un incremento del 2,3 por ciento.
El Gobierno argentino postergó para la semana próxima la presentación de la oferta del canje con los bonistas
Sin embargo, si se excluyen los automóviles, un sector fuertemente golpeado por la crisis, las ventas minoristas aumentaron en julio un 1,9%, frente al 1,2% que esperaba Wall Street sin contar con el sector del motor, todo ello en medio de la última oleada de casos de COVID-19 en Estados Unidos, lo que fue interpretado como una señal de que la recuperación económica avanza a buen ritmo.
“El mercado ha actuado de forma bastante estoica esta semana. Es agosto, por lo que es posible que tengamos que esperar hasta septiembre para encontrar una dirección sólida”, dijo en declaraciones a The Wall Street Journal la jefa de estrategia de divisas de Rabobank, Jane Foley.
También influyó negativamente la postergación en los EEUU de las negociaciones entre demócratas y republicanos sobre el paquete de estímulos para paliar los efectos negativos de la pandemia en la economía. La presidente de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, dijo que su partido no retomaría las negociaciones hasta que los republicanos incrementen su oferta en al menos un billón de dólares.
“Dado el estancamiento actual, es extremadamente improbable que los consumidores reciban apoyo fiscal adicional en agosto. No hace falta decir que las perspectivas del mercado para septiembre dependerán en gran medida de la política fiscal”, apuntó en una nota reproducida por EFE la economista jefe de Jefferies, Aneta Markowska.
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