El comportamiento de la Bolsa es la muestra de cómo los inversores se mueven con cautela sin la referencia del futuro. Invertir en un mercado -salvo el del dólar- es un vuelo a ciegas. La primera señal la dio el monto de negocios que bajó $650 millones a $1.124 millones. Traducir esta cifra es fácil. Faltaron los inversores más cautelosos y se quedaron los compradores de oportunidad que aprovecharon los precios más bajos para hacer algunas compras y ventas. Lo que sucedió es lo que en la jerga se conoce como “el rebote del gato muerto”.
El S&P Merval, el índice de las acciones líderes, antes de llegar a un cierre positivo de 1,34%, pasó por varias alternativas. Abrió con un alza de casi 2% y a las 14.00 estaba 2,55% arriba. A partir de ese momento comenzó a recortar ganancias hasta el cierre.
Transportadora Gas del Norte (+9,31%), lejos fue lo mejor de la rueda. Lo siguió Pampa Energía (+3,49%). Los bancos tuvieron leves recuperaciones. Supervielle aumentó 2,10%; Macro, 1.84%, BBVA, 1,02% y Galicia 0,84%. YPF recuperó 1,44%.
En el exterior los ADR’s argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en Wall Street- tuvieron mejor suerte. Central Puerto (+6,23%), Pampa Energía (+4,27%) y MercadoLibre (+4,08%) fueron lo mejor de la rueda.
Los bonos en dólares con legislación local, cerraron en baja. El Bonar 2020 perdió 0,34% y el Bonar 2024, 0,26%. Los que tienen ley extranjera tuvieron suerte dispar. El Discount perdió 1,32%, pero el Par salvó la situación al anotar un avance de 2,17% y permitió que el riesgo país bajara 6 unidades (-0,3%) a 2.102 puntos básicos.
El dólar se mantuvo en alza más allá del leve “tropiezo” del dólar Bolsa que cedió 43 centavos a $125,30. El contado con liquidación aumentó 17 centavos y cerró en $130,22. El dólar libre o “blue”, sumó $1 al finalizar a $133.
En el mercado oficial, la divisa se vendió en bancos y casas de cambio 9 centavos más caro a $ 77,41 y elevó el valor del dólar solidario a $100,42. El dólar mayorista tuvo una fuerte presión de compra que obligó al Banco Central a vender alrededor de USD 50 millones. La divisa aumentó 6 centavos y cerró en $ 73,11. La buena noticia de la inflación de julio de 1,9% le dio más aire al Banco Central para alejará la opción de devaluar por la amenaza de la brecha cambiaria.
Las reservas, a pesar del leve rebote del oro, que cerró en USD 1.956, y del euro -el dólar cedió 0,20% ante las 6 principales monedas del planeta- perdieron USD 45 millones y quedaron en USD 43.208 millones. Un dato relevante para medir la caída de las reservas es que se produce en una situación favorable para crecer ya que el oro en el año subió más de 30% y el dólar bajó 9,26% frente a las principales monedas desde el 19 de marzo pasado. Ambos activos integran las reservas.
Nada indica que esta pesadez cambie hasta que se conozca el resultado del canje de la deuda. Ni la noticia de la producción de la vacuna en la Argentina ni la menor inflación de julio sirvieron de estímulo a los inversores que demandan datos más contundentes sobre la economía. Un plan económico, por ejemplo.
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