Los activos argentinos buscaron este viernes un punto de equilibrio luego de que el Gobierno celebrara esta semana un acuerdo con sus acreedores por la reestructuración de unos USD 65.000 millones en bonos soberanos emitidos con ley extranjera.
En el exterior, los ADR de empresas argentinas que se negocian en las bolsas de Nueva York exhiben una caída marginal.
En Wall Street, los principales indicadores cerraron mixtos, luego de que el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos informara la creación de 1.763.000 puestos de trabajo en julio, con una tasa de desocupación que descendió al 10,2 por ciento. El tecnológico Nasdaq cayó 0,9% luego de alcanzar máximos históricos.
En cuanto a los bonos argentinos en dólares, reflejaron mínimas bajas. Por su parte, el riesgo país de Argentina, medido por el banco JP Morgan, subió 36 unidades a 2.091 puntos básicos a las 17 horas. El viernes pasado el referencial se ubicaba en los 2.268 puntos.
“El principio de arreglo de la deuda despeja los vencimientos hasta 2025, pero también ayudará a focalizar mejor los problemas del presente”, estimó la Fundación Mediterránea.
El gobierno de Alberto Fernández logró el acuerdo tras modificar algunas fechas de pago de los nuevos bonos sin modificar el monto establecido para los pagos de capital o intereses.
“El mercado esperaba que de la mano del acuerdo vengan señales sobre un plan económico, o por lo menos mayor certidumbre en ese sentido. Las señales fueron las opuestas, donde (el ministro de Economía, Martín) Guzmán dio a entender que no hay un plan en este contexto”, refirió Portfolio Personal Inversiones en un informe.
Acordado el canje de deuda, los agentes financieros están esperando señales de un plan económico
Agregó que “el mercado apuesta a que, con las negociaciones con el FMI, venga un plan económico para ordenar las cuentas y arreglar los desequilibrios fiscales y monetarios. Como veníamos mencionando, el acuerdo fue necesario, pero no es suficiente para que el mercado y la economía comiencen el sendero de la recuperación”.
Los bonos soberanos en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) caían en promedio un 0,7% en pesos por tomas de ganancias. La actividad se centró en las emisiones dolarizadas de mayor plazo.
Tras el acuerdo de reestructuración el Gobierno argentino ahora planea dirigir su atención a negociar un nuevo programa con su mayor acreedor, el Fondo Monetario Internacional (FMI), que aprobó en 2018 una línea de crédito stand-by por USD 57.000 millones, de los cuales se desembolsaron unos USD 44.000 millones.
En la plaza bursátil, el índice líder S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires mejoró 2,4%, a 52.325 unidades, en una plaza con altibajos por tomas de ganancias intrahorarias. Se destacaba la mejora anotada en acciones del segmento financiero.
El Merval alcanzó esta semana, tras el acuerdo con acreedores, un nivel máximo histórico intradiario de 56.114 puntos.
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