El acuerdo alcanzado entre los acreedores y el Gobierno para reestructurar USD 64.800 millones generó un amplio apoyo del sector empresario, que sostuvo que la resolución del problema de la deuda le permitirá a la Argentina avanzar hacia un proceso de recuperación económica.
“La Asociación Empresaria Argentina (AEA) manifiesta su gran satisfacción y felicita al gobierno por haber concluido la muy compleja negociación con los acreedores externos. Esta decisión contribuirá a que las empresas puedan cumplir su papel en el proceso de recuperación económica de nuestro país”, precisó la entidad que preside Jaime Campos.
Y agregó que “es la red de empresas pequeñas, medianas y grandes, que constituyen cadenas de valor, las que hacen posible la producción, el empleo y la generación de exportaciones desde Argentina. Desde la AEA destacamos que esta es una oportunidad para avanzar en el diálogo entre los diferentes sectores de la sociedad, de modo de arribar a consensos básicos para un desarrollo económico y social sostenible”, planteó la entidad integrada por dueños de importantes compañías.
Desde IDEA destacaron el “gran avance para nuestro país” que representa el anuncio. “Esto genera un alivio de deuda pero más importante, puede ser un alivio en la economía y en las preocupaciones de todos los argentinos. Este avance brinda una oportunidad, otra vez, para emprender las agendas estructurales que necesitamos como argentinos discutir y avanzar hacia un desarrollo sostenible”, expresaron.
Si bien varios de sus integrantes emitieron comunicados por separado, las entidades que conforman el G6 –Asociación de Bancos Argentinos, Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Cámara Argentina de Comercio, Cámara Argentina de la Construcción, Sociedad Rural Argentina y Unión Industrial Argentina– afirmaron que “la reestructuración consensuada será un aporte central para alcanzar un escenario de previsibilidad a nivel macroeconómico que promueva la inversión privada, la generación de empleo y el desarrollo integral del país”.
“En virtud del acuerdo conseguido, el país inicia una etapa que tendrá como uno de sus objetivos principales complementar el crecimiento económico con el pago de las obligaciones contraídas. De esta manera, cada uno de los actores políticos, económicos y sociales podrá trabajar para que Argentina supere los desafíos de cara al futuro”, dijo el G6.
La UIA, por su parte, coincidió en que a partir de la nueva etapa que comenzará tras el acuerdo por la deuda, “será fundamental promover los consensos básicos para una agenda macroeconómica y de política productiva que se consolide en el tiempo. De esta manera, se podrá construir una perspectiva de largo plazo que compatibilice el crecimiento económico, la creación de empleo y la generación de divisas –que brinde sustentabilidad fiscal y externa–”.
“Este acuerdo representa una oportunidad para que la economía retome la senda del crecimiento con un horizonte financiero claro y posibilita profundizar en políticas que permitan salir del estancamiento crónico. Felicitamos al Gobierno Nacional, ya que consideramos que valientemente ha trabajado en un acuerdo justo y acorde a las posibilidades del país”, plantearon los empresarios Alejandro Simón (CEO Grupo Sancor Seguros y presidente de ADIRA); José Urtubey (Celulosa Argentina); Marcelo Figueiras (presidente de Laboratorios Richmond); Martin Umaran (fundador de Globant); Daniel Herrero (presidente de Toyota Argentina); Martin Cabrales (vicepresidente de Cabrales); Pablo Peralta (presidente del Grupo GST); Mara Bettiol (presidente de UART); y Fabián Castillo (titular de FECOBA), un grupo que se creó para apoyar el proceso y que mantuvo varios encuentros con el ministro de Economía, Martín Guzmán, en el último tiempo.
También apoyaron la decisión del Gobierno y de los bonistas los empresarios del sector de la economía del conocimiento. Desde Argencon, afirmaron que el acuerdo es importante porque “uno de los pilares fundamentales para la reactivación del aparato productivo es el acceso normal a los mercados internacionales de crédito”. “Para las empresas de la economía del conocimiento, que representan el tercer sector exportador del país, el acuerdo representa un paso indispensable para eliminar parte de la incertidumbre en nuestro contexto macroeconómico”, señalaron mediante un comunicado.
A su turno, los comerciantes nucleados en la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) afirmaron que la regularización de los pasivos colaborará con la estabilización de la macroeconomía local y significará una base más sólida para iniciar la recuperación, tras un estancamiento de 10 años y una profunda recesión originada por la pandemia en curso. “Dotará de mayor solvencia al fisco y permitirá que las empresas argentinas accedan a más y mejor financiamiento, favoreciendo así la inversión y la generación de empleo genuino”, explicó la entidad.
“La Asociación de Bancos Argentinos (Adeba) felicita al Gobierno y demás partes involucradas en el proceso por haber logrado generar las condiciones para llegar a un acuerdo amplio, con el objetivo de restaurar la sostenibilidad de la deuda pública y recuperar el crédito de la República. Recuperar y mantener en el tiempo el crédito público, permitirá sentar las bases y generar las condiciones necesarias para que el país retome la senda de crecimiento inclusivo y generación de empleo”, enfatizó la institución que nuclea a los bancos nacionales.
Desde el Banco Ciudad, en tanto, también valoraron la previsibilidad que otorga este acuerdo y las “mayores oportunidades para iniciar una etapa de recuperación económica post pandemia y trazar una agenda de desarrollo y crecimiento, con mejores posibilidades de acceso al financiamiento para los sectores productivos”. “Seguiremos contribuyendo para que nuestros clientes y las comunidades en donde actuamos puedan atravesar lo mejor posible las consecuencias de la pandemia, con toda nuestra organización puesta al servicio de la recuperación socioeconómica”, aseguró.el presidente del banco, Guillermo Laje.
Por su parte, el titular de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), Iván Szczech, remarcó que a partir de ahora el país podrá concentrarse en renegociar la deuda con el FMI y “lanzar la economía argentina que tanto lo necesita”. “Nuestra industria de la construcción será un pilar fundamental del crecimiento a partir de la reactivación de la inversión en obra pública y los incentivos propuestos para la obra privada”, aseguró.
Las pequeñas y medianas empresas nucleadas en CGERA coincidieron en destacar el esfuerzo del Gobierno y los bonistas en alcanzar el acuerdo y plantearon que “es un gran paso para dejar atrás la herencia y enfocarse en la agenda productiva”. Según remarcó el titular de la entidad, Marcelo Fernández, para las pymes el arreglo del tema de la deuda significa que podemos apostar a políticas que beneficien el financiamiento para la producción y el consumo.
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