En el BCRA ya hace varias semanas se encendieron luces de alarma por la compra de dólares del sector minorista. A razón de apenas USD 200 por persona, en junio la pérdida de reservas habría superado los USD 600 millones sólo por este rubro, superando con amplitud lo que se venía operando en meses previos.
Ante esta circunstancia, el directorio de la entidad impondría nuevas restricciones. Según se definió en reunión de comisión ayer, los beneficiarios de planes sociales no podrán acceder al mercado cambiario, o mejor dicho tendrán que pedir “autorización previa” para hacerlo. Un eufemismo que utilizará el titular del BCRA, Miguel Pesce, para bloquearlos.
Incluso algunos directores del BCRA son partidarios de cortar “de cuajo” la posibilidad de comprar los USD 200, pero se trata de una decisión política sumamente delicada. En definitiva, una medida de este tipo no será definida por el directorio del Central, sino en todo caso por las más altas esferas del Gobierno.
En junio se registró la compra de dólares “solidarios” más alta desde que se impuso el límite de U$S 200 por persona. Fueron más de U$S 600 millones los que tuvo que vender el Central. La cifra supera los U$S 532 millones que el Gobierno debíe pagar para no caer en default por la deuda en abril
En los últimos días hubo denuncias desde el Central por los denominados “coleros digitales”. Muchos de ellos reciben una comisión para aplicar el cobro de su Ingreso Familiar de Emergencia para comprar dólares al “tipo de cambio “solidario” de $ 97 (tipo de cambio oficial más 30%) y luego venderlos en el informal por arriba de los $ 120. Pueden hacer este procedimiento dos veces al mes hasta completar los USD 200.
El límite de USD 200 mensuales fueron establecidos por el gobierno de Mauricio Macri inmediatamente después de las elecciones presidenciales, reduciendo drásticamente el límite anterior que era de USD 10.000. Sin embargo, el nuevo gobierno decidió mantenerlo a pesar de la fuerte presión que sufren las reservas.
“Nosotros no podemos impedir que los beneficiario de la IFE compren dólares, pero sí que pidan autorización previa, porque el objetivo de este beneficio es que puedan comprar alimentos o hacer frente a necesidades básicas, no a la compra de dólares” graficaban ayer desde el Central. Otra alternativa que también se analiza en el BCRA, más drástica, es la de bloquear el CUIT para acceder al mercado de cambios a los casi 9 millones de beneficiarios del IFE.
Algunos directores del BCRA son partidarios de cortar “de cuajo” la posibilidad de comprar los USD 200, pero se trata de una decisión política sumamente delicada. En definitiva, una medida de este tipo no será definida por el directorio del Central, sino en todo caso por las más altas esferas del Gobierno.
En el récord de ventas de dólar “solidario” que se registró en junio también impacto el medio aguinaldo que le permitió a muchos empleados contar con un adicional que utilizaron para la compra de divisas.
Obviamente las compras especulativas para hacer “puré” son posibles debido a que se mantiene una sostenida brecha cambiaria cercana al 30% entre el dólar en el mercado informal y el “solidario”. Esa diferencia cedió parcialmente en el caso del dólar “Bolsa”, ante las fuertes restricciones establecidas a empresas e individuos para dolarizarse a través del mercado bursátil.
En mayo, último dato oficial que divulgó el Central, la compra de billetes para atesoramiento de parte del público llegó a USD 438 millones y hubo un adicional por uso de tarjeta de crédito por compras o pasajes al exterior. Pero en junio el salto adicional fue muy relevante y sería oficializado en el informe del mercado de cambios en los próximos días.
Seguí leyendo: